Este review no contiene spoilers y fue realizado después de ver la temporada completa de Unbelievable
Finalmente se estrenó en Netflix Unbelievable o Inconcebible, como se tradujo en Latinoamérica, un oscuro true crime, que ya te habíamos adelantado acá, y que probablemente se cuele a fin de año en los tops de las mejores series de este 2019.
La serie cuenta la historia de Marie Adler, una joven que fue violada por un desconocido a mitad de la noche y que luego fue acusada de mentir por una denuncia de violación falsa. Ni la policía, ni sus más allegados creyeron que el horrible acto hubiera sucedido. La vida de Marie se desmoronó en mil pedazos, perdió todo lo que tenía y la sociedad le dio la espalda como si de una leprosa en el Medioevo se tratase.
Unbelievable sigue dos líneas temporales, la del duro proceso que atravesó Marie, protagonizada por una muy convincente Kaitlyn Dever (Booksmart), y la otra que acontece tres años después. En esta última conoceremos a dos investigadoras de distritos distintos que se unirán para indagar sobre una serie de violaciones que guardan características similares. Durante los ocho capítulos que dura la miniserie, seremos testigos de la investigación policial que se lleva a cabo para dar con el violador y, simultáneamente, las traumáticas consecuencias que padece Marie.
De no creer
Basada en el artículo de 2015, y posterior libro, An Unbelievable Story of Rape, escrito por Christian Miller y Ken Armstrong, la serie escrita por Susannah Grant (Erin Brockovich), Ayelet Waldman y Michael Chabon muestra de forma muy cuidadosa el proceso científico y sobre todo psicológico que atraviesan las víctimas de violaciones. A diferencia, por ejemplo, de 13 Reasons Why que tocaba el tema de una forma irresponsable y en donde la escena del acto de violación parecía cumplir un mero morbo de los creadores, nada de eso sucede aquí.
En Unbelievable la pasas mal, te indignas a tal punto que quieres romper el televisor a patadas por los hechos injustos que narra y que tristemente sucedieron y por aquellos otros que siguen sucediendo. La ineficacia policial, el poco tacto y apoyo para con las víctimas y el machismo, contrastan con el increíble esfuerzo que realizan las dos detectives que interpretan de forma extraordinaria Merritt Wever (Nurse Jackie, Godless) y Toni Collette (Sexto Sentido, Hereditary). Ambas con trabajos para aplaudir de pie.
La serie triunfa en todas sus aristas, ya sea en el relato de las mujeres abusadas, como en lo referido al procedimiento policíaco, que nos hace remitir muchas veces a la siempre recomendada The Fall.
Del lado correcto
La serie es dura cuando así lo requiere, en especial su primer episodio que se convierte en una de las horas televisivas más duras del año. Pero también sabe cómo descomprimir, de forma muy inteligente, esa carga a través de algunos diálogos divertidos.
Unbelievable no es un capítulo de CSI, tiene momentos de diálogos muy profundos y se toma el tiempo justo para analizar los pensamientos y las actitudes de sus protagonistas. Pero no por eso deja de lado el misterio policial que en cada capítulo se presenta a través de nuevas pistas.
Desde una perspectiva feminista, Unbelievable emociona con su respetuosa y para nada sensacionalista narración de una violación. La serie se pone del lado de las víctimas para invitarte a reflexionar sobre la justicia o la falta de ella. Durante casi ocho horas te cachetea para que reacciones, pero te premia con un final esperanzador.
Sí, Netflix, el camino es por acá.