¡Boom! El hack del siglo se ha logrado y todo está bien en el planeta nuevamente… ¿o no?. Con un show como Mr Robot esto debe tomarse con pinzas, sin embargo el episodio 9 de su 4ta Temporada, y final, es una gran satisfacción para nuestros protagonistas.
«Conflict» es el título de este episodio y el conflicto se da desde un principio, en el momento crítico de la famosa reunión del Grupo Deus, incluyendo a Phillip Price y Whiterose.
En un edificio contiguo, Darlene y Elliot (pero en la personalidad de Mr Robot) están vigilando que todo salga bien, lo que significa que todos los miembros estén reunidos en el mismo lugar para poder hackear sus teléfonos. Posterior a ello, podrán vaciar sus cuentas del Banco de Chipre y despojarlos de la hegemonía financiera que los hace tan poderosos.
La reunión
Antes de que se dé la reunión, Price llega al apartamento donde está Darlene y Elliot, y a éste le entrega en una memoria USB los planes del proyecto secreto de Whiterose, lo de esa máquina extraña en el Congo. El misterio de esto seguro nos volará la cabeza en el último episodio.
Al llegar el antiguo CEO de E-Corp a la reunión con Whiterose se da cuenta que los demás no están ahí y que algo raro sucede. Pero quién tiene más nervios es en realidad el ministro de seguridad de China, al amenazar torpemente a Phillip para que le diga los planes de Elliot.
Price con esa sutileza y gracia en su hablar se sienta cómodamente y bebe champagne, esperando que Elliot se encargue de hacer su plan.
Por el otro lado, Mr Robot se da cuenta que algo anda mal también y que Whiterose seguramente movió la ubicación de la reunión. Al rastrearla con ayuda de Darlene, dan con un edificio Cipriani, el verdadero lugar que reúne al 1% del 1% de las personas más opulentas del planeta. Curiosamente, vemos de espalda a un hombre muy parecido a Donald Trump. ¡Buen guiño Esmail!
Misión hacker
Elliot/Mr Robot le dice a Darlene que ella va hacia el edificio y él se quedará vigilando cómo transcurre lo de Whiterose y Price.
Darlene en su forma hábil logra retrasar que estos peces gordos se vayan, al hacer una jugada que a todos nos trae una sonrisa al rostro: Un video de F-Society. Con todo y máscara se hace inmediatamente viral el clip en que menciona a los miembros del Grupo Deus y pide a la gente que los vayan a «saludar» en el sitio donde están reunidos.
Esto, más un pequeño hack a una trampilla en el parqueo, provoca un retraso que sería vital para completar con la difícil tarea.
Desesperación de Whiterose
Elliot, ya volviendo a su persona, en el afán de apresurar las cosas y que nada salga mal, llama a Price a su teléfono para hablar con Whiterose.
La mente maestra detrás del Dark Army trata de convencer a Elliot de que si se detiene con su plan, podrá volver a ver a Angela, a hablar con ella… a revertir lo del pasado. Elliot duda, el propio Price lo hace, sin embargo el joven recapacita y no se deja manipular.
Desde ahí vemos un cambio en el tono mesurado de Whiterose, sobre todo cuando lo empiezan a llamar desesperadamente los miembros del Grupo Deus tras la filtración de los datos por parte de F-Society.
Finalmente decide salir del lugar y llevarse a Price como rehén, pero este último no es nada tonto… Al final es un mercenario que prefiere ver perder al enemigo que ganar por su cuenta.
Ida y vuelta
La adrenalina juega un papel fundamental en la última parte del capítulo, un ida y vuelta entre Whiterose, Price, Elliot y Darlene nos sugiere un viaje de muchísima intensidad.
Segundos de diferencia pudieron haber sido catastróficos; en las pantallas los espectadores vemos códigos de programación y lenguaje tech que casi no comprendemos, pero sí los mensajes que se mandan los hermanos Alderson, al punto del borde y que saben que todo pendía de un hilo.
Pero al final, con los retrasos causados por Darlene más la habilidad de Price, el plan funciona… el hack a todos los teléfonos que necesitaban se cumple, la alerta falsa se envía y como por arte de magia… el dinero de los magnates ha desaparecido.
El poder del Dark Army no existe más.
Adiós Price
Los últimos segundos de Price no pudieron ser mejores. Este personaje que cada segundo en pantalla roba la escena, se fue por la puerta grande a pesar de ser ejecutado como cualquier otro ser humano.
La rabia de Whiterose denota su falta de controlar el tiempo, y es él/ella quien lo mata sin escrúpulos, a la vista de transeúntes en la noche neoyorkina.
En la última secuencia vemos a Whiterose, ya en su verdadera forma como mujer, arreglándose frente a un espejo, mientras se escucha que agentes del FBI están por entrar a la fuerza a la casa. Lo hacen, pero son interceptados por el Dark Army y se escucha una guerra, mientras esta líder no se inmuta.
Veredicto
Debo decir que fue uno de los capítulos que más me mantuvo al borde del sillón. Las técnicas cinematográficas fueron bien usadas, con planos secuencias muy interesantes, así como actuaciones de actores secundarios que estuvieron impecables.
El final se acerca, y con esas personas que habitan en la mente de Elliot (su familia) esperando al «Tercero«, la conclusión de esta serie apunta a ser una obra de arte.