Ubisoft es uno de los desarrolladores de videojuegos más importantes de los últimos años, pues al encontrarse detrás de exitosas franquicias tales como Assassins’s Creed, Just Dance y próximamente las adaptaciones a videojuegos de Avatar de James Cameron, el estudio ha sido aplaudido internacionalmente por sus triunfos.
Sin embargo, en una investigación reciente, el portal NME ha reportado que la división parisina de Ubisoft se encuentra actualmente en una disputa con sus empleados, luego de que desarrolladores, artistas e ingenieros, alzaran la voz contra las duras condiciones laborales impuestas por la empresa.
¿Ubisoft explota a sus trabajadores?
La semana pasada, el sindicato francés Solidaires Informatique reveló que la producción del videojuego Just Dance 2023 de Ubisoft, había llevado a una sobre-explotación de trabajadores —entre los que se encontraban desarrolladores, programadores, artistas y animadores—, por lo que ante la gran carga laboral, más de uno había presentado problemas de salud.
De acuerdo al sindicato, casi el 10% de los involucrados en el proyecto tuvieron que pedir permisos de enfermedad posterior a la producción, debido a grandes daños físicos que encontrarse horas excesivas frente a los monitores habían producido a todos y cada uno de ellos.
NME reporta que varios empleados, quienes buscaron ayuda de Solidaires Informatique, tuvieron que enfrentarse a largas jornadas de trabajo, y cambios casi imposibles de realizar en cortos periodos de tiempo.
Asimismo, los desarrolladores describieron un “gran desastre” en las estructuras de pre-producción, lo que resultó en modificaciones intensas para el videojuego 11 meses antes del lanzamiento.
“Los jefes pedían cambios e ideas que tenían que ser consideradas como prioridad, a pesar de que el equipo estaba ahogado en trabajo” describió uno de los desarrolladores entrevistados.
¿Just Dance no necesitaba cambios?
Trabajadores de Ubisoft declararon que por lo general “una vez que se presenta una visión clara de lo que tiene que pasar a los técnicos”, quienes “no tienen más opción que buscar una forma de lograr lo imposible”.
Sin embargo, los logros son poco celebrados, pues tan pronto logran resolver un problema, Ubisoft vuelve a sus trabajadores con peticiones “irrealizables”.
“Tenemos que lograr cosas imposibles o todo cambia. Es moral y físicamente exhaustivo.”
Anónimo, NME
Asimismo, destacaron las decisiones estratégicas tardías de lo ejecutivos, tales como conflictos entre productores para “decidir con qué programa desarrollar”, a pesar de tener solo 9 meses de producción restantes.
Por otro lado, declararon que Ubisoft Paris “mintió” en cuanto a la supuesta decisión de contratar más empleados para no cargar más tiempos y tareas sobre el equipo existente, pero tal promesa no se cumplió.
¿Cargas absurdas de trabajo?
Uno de los empleados de NME confirmó que el proyecto de Just Dance exigía “en los días buenos”, jornadas de 13 horas de trabajo: de 9 de la mañana a 10 de la noche. No obstante, en los días de pruebas de calidad, los horarios se extendían hasta pasada la medianoche y madrugadas.
“En las juntas diarias, los empleados eran explícitamente animados a quedarse a trabajar más de la cuenta” relató el desarrollador “El mensaje era claro siempre: hagan horas extra”.
La fuente explicó también que las peticiones de cumplir horas extra eran entregadas a los empleados más tímidos e introvertidos, quienes eran “intimidados” por altos ejecutivos del estudio.
Por otro lado, el equipo detrás del juego intentó conversar con los líderes de Ubisoft Paris para negociar las fechas de entrega, a lo que los ejecutivos se “opusieron”, recorriéndoles la fecha de lanzamiento de mediados de 2024 a Navidad de 2023.
Asimismo, hubo un choque entre partes debido a que el programa para desarrollar Just Dance era completamente nuevo, por lo que los empleados tenían que “aprender rápido” cómo funcionaba. “El problema es que veían esa velocidad como una excusa para agregar más y más cambios”.
Actualmente, el estudio Ubisoft Montpellier enfrenta una investigación por explotación laboral, por lo que se espera que la división de Paris sea estudiada a fondo por las autoridades francesas tras los reportes.