Quentin Tarantino estuvo en el Festival de Cine de Cannes para presentar una proyección de la película de John Flynn de 1977, Rolling Thunder, que aparece en el libro del cineasta, Cinema Speculations. Durante la plática, el director de Pulp Fiction se sinceró sobre diversos temas que rodean a la industria cinematográfica y su experiencia en ella, entre ellos los proyectos que nunca pudo realizar.
Mucho antes del icónico debut de Daniel Craig como James Bond en Casino Royale (2006), Tarantino intentó poner en marcha su propia versión de la novela originalmente escrita por el autor Ian Fleming. Sin embargo, después de múltiples conflictos y cambios en los derechos de autor, jamás pudo realizarla, pero
Quentin Tarantino nunca obtuvo los derechos de James Bond
De acuerdo con Total Film, Quentin Tarantino explicó que después de su éxito con Pulp Fiction, se puso en contacto con la actual productora que posee los derechos de James Bond: Eon Productions, pero en ese entonces no tenía los permisos para llevar a cabo Casino Royale al cine.
«Nos pusimos en contacto con la gente de Ian Fleming y sugirieron que aún poseen los derechos de Casino Royale. Y eso es lo que quería hacer después de Pulp Fiction, hacer mi versión de Casino Royale”.
Quentin Tarantino
La versión de Quentin Tarantino habría estado situada en los años 60 y no estaba pensada para ser una serie de películas, sino que estaba interesado en elegir un actor y solo filmar una cinta, ya que no le interesaba comprometerse con una saga de películas. No obstante, se topó con un problema cuando se enteró que la productora de cine Barbara Broccoli y su hermano Michael G. Wilson, Broccoli, se le habían adelantado al cineasta muchos años atrás, cuando obtuvieron los derechos de la obra de Ian Fleming para cualquier adaptación al cine.
«Pero luego resultó que [los productores de Bond] los Broccoli tres años antes se dieron cuenta de que alguien iba a intentar hacer lo que yo hice. Entonces, lo que hicieron fue simplemente hacer un trato general con los herederos de Fleming y me dijeron: «Tenemos los derechos cinematográficos de todo lo que ha escrito”.
Quentin Tarantino
Los Broccoli habían realizado previamente un acuerdo millonario para que cualquier persona que quisiera adaptar James Bond debía acudir primero a ellos para solicitar los debidos permisos, una situación que puso en conflicto a Tarantino.
Quentin Tarantino nunca se reunió con los productores
Quentin Tarantino explicó que jamás se reunió de forma presencial con los Broccoli, pero escuchó que cuando los productores se enteraron que el director estaba interesado en adaptar la obra, no estaban muy contentos con la noticia debido a que no querían arriesgar a una franquicia que tenía el potencial de reunir millones de dólares en taquilla.
«Siempre me decían cosas muy halagadoras tipo: ‘Mira, amamos a Quentin, pero hacemos cierto tipo de películas y, a menos que lo arruinemos, podemos ganar miles de millones de dólares cada vez que hacemos ese tipo de películas, ¿de acuerdo? No queremos que lo haga. No importa que siga siendo bueno. Podría arruinar nuestra cosa de mil millones de dólares'».
Quentin Tarantino
Si Tarantino hubiera tenido éxito en obtener los derechos cinematográficos de Casino Royale, su película se habría unido a Casino Royale de 1967 y Never Say Never Again de 1983 como otra película no oficial del 007, una situación que ya no apoyaban los Broccoli puesto que tenían la visión a largo plazo de volver una franquicia se que constaría de varias partes.
