La empresaria Kim Kardashian ha sido criticada por haber utilizado el vestido icónico de Marylin Monroe durante la Met Gala
Luego de haber utilizado el vestido de Marily Monroe valuado en más de 4.8 millones de dólares, durante la Met Gala, uno de los eventos de moda más importantes del año, la afamada empresaria Kim Kardashian fue el centro de controversias pues la prenda es considerada irremplazable.
Archivistas del mundo de la moda y académicos de Monroe se mostraron furiosos ante la decisión del museo Ripley’s Believe It or Not en Orlando, Florida, al otorgarle el préstamo de la prenda tan exclusiva a la socialité Kardashian, consideraron que fue vulgar, poco ético e imprudente, ya que cualquier movimiento en falso hubiese hecho que el vestido sufriera daños irreparables a una prenda que preserva una gran historia.
¿Poniendo en Riesgo una Pieza Histórica?
Sarah Scaturro expresó su descontento a través de un pie de foto en Instagram al ver utilizar a la Kardashian el vestido de Monroe:
«Cuando yo era la jefa del laboratorio de conservación del Instituto del Traje, tuve que rechazar las solicitudes de personas, incluida Anna Wintour, para tener prendas irremplazables»
Ante los sucesos, Katie Stringer, historiadora de la Universidad Costera de Carolina opina “Son una empresa; no un museo”, refiriéndose al Ripley’s Believe It or Not.
Aunque Stinger señaló “Un museo es una institución permanente, sin fines de lucro, al servicio de la sociedad y su desarrollo, abierta al público que adquiere, conserva, investiga, comunica y exhibe el patrimonio material e inmaterial de la humanidad y su entorno con fines de educación, estudio y disfrute”.
La realidad del préstamo
La pregunta de Stringer fue si el Museo Metropolitano de Arte (donde se realiza anualmente la Met gala) hubiese permitido que le sucediera algo similar a sus colecciones como museo, pues aseguró que sus políticas de selección y preservación de arte no permitiría algo así. Del mismo modo, la curadora asegura que posiblemente el evento habría intentado detener a la Kardashian si se hubiera enterado qué vestido iba a usar.
Pero eso es el Met, Ripley´s Believe It or Not funciona de una manera diferente, sus reglas le permiten a otros adquirir las piezas que son exhibidas, e hizo hincapié en que son una franquicia con 29 “museos” en todo el mundo, pero en realidad son una corporación. De acuerdo con una entrevista que dio un portavoz del museo para el sitio Slate:
Un portavoz de Ripley’s respondió; “Nos enorgullece mucho tener el vestido ‘Feliz cumpleaños’ y consultamos con varios expertos textiles y conservadores en este esfuerzo. Si bien las prácticas de conservación son inherentemente conservadoras, su aporte nos ayudó a elaborar un conjunto de precauciones y procedimientos para la Met Gala”.
«Kim Kardashian ha añadido a la cultura pop el significado del vestido icónico de Monroe», se lee en la página de Ripley’s.
De acuerdo con Amanda Joiner, vicepresidenta de licencias y publicaciones de Ripley’s el vestido fue protegido en todo momento. De hecho, aseguran haber tenido varias conversaciones con Kim Kardashian y su equipo pues la seguridad tenía que ser suficiente, incluso si ellos consideraban que el vestido estaba en peligro de rasgarse ellos podían intervenir.
