Christopher Lloyd habla sobre su participación en Nobody: la nueva película acción protagonizada por Bob Odenkirk.
Mañana se estrena en salas mexicanas: Nobody, película de Universal Pictures protagonizada por Bob Odenkirk, afamado intérprete conocido por su participación en Breaking Bad como Saul Goodman, quien en esta ocasión da vida a Hutch Mansell: un hombre mayor que luce como un hombre de familia corriente.
Pero esta perspectiva comenzará a transformarse una noche cuando su casa es asaltada, y él renuncia a defenderse con el propósito de evitar complicaciones, lo que decepciona a su hijo Blake (Gage Munroe) y su esposa (Connie Nielsen), quienes comienzan a distanciarse del mismo. Incidente que le perseguirá de manera constante, haciendo salir a su lado más oscuro y violento.
Dentro del cast del largometraje, podemos encontrar al afamado histrión por su papel como Dr. Emmett Brown en la trilogía de Volver al futuro: Christopher Lloyd, quien en esta obra interpreta a David Mansell, el padre del protagonista y ex policía del FBI, el cual ayudará a su hijo en su epopeya vs la mafia rusa.
Sobre su personaje, Lloyd menciona que David “Ama los tiros, las muertes, el peligro, riesgo, intriga y aventura. Pero ya se jubiló, esta en un asilo y se preocupa por su hijo, porque se convirtió en algo que lo asusta y es muy peligroso.”
Nobody es la segunda película en la filmografía del cineasta ruso: Ilya Naishuller, y sobre su experiencia a su mando, Christopher Lloyd comenta emocionado: “Espero que quiera usarme de nuevo. En serio. Es decir, realmente me siento cómodo con él. Aprendí mucho, ya que sabe lo que hace.”
El director David Leitch, encargadode obras como Deadpool 2 o Rápidos y furiosos: Hobbs & Shaw, es uno de los productores de Nobody, y su pasado como stunt nos promete una película llena de grandes escenas de acción, en las cuales también participó Christopher Lloyd, quien elogió a los dobles de acción mencionando: “Son geniales, tuve mi batalla principal con ellos, y eso me emociona mucho.”
Nobody se estrenó hace unos meses en Estados Unidos, recibiendo críticas positivas que elogian la actuación de Odenkirk, y ha recaudado $22 millones de dólares alrededor de todo el mundo.