Platicamos con la directora Jessica Thompson sobre Invitación al Infierno (The Invitation) y nuestra fascinación con los vampiros
Invitación al Infierno (The Invitation) tiene una premisa fascinante: Evie (Nathalie Emmanuel) es una chica que vive completamente sola y sabe muy poco sobre su legado familiar, por lo que decide tomar una prueba de ADN para averiguar cuál podría ser su origen. Esta prueba la lleva a conocer a Oliver (Hugh Skinner) un distinguido aristócrata británico que comienza a tratarla como su familia y la convence de viajar con él para que conozca el castillo y su familia lejana.
De inmediato, ella es transportada a un mundo de excesos y lujos, con un estilo muy parecido a la exitosa película Ready or Not protagonizada por Samara Weaving. Aquí, Evie también encuentra que la opulencia de la misteriosa familia que la acoge como un miembro más de la familia es bastante estresante, particularmente porque todos sus supuestos ancestros son hombres blancos. Esto de inmediato nos llevaría a pensar que la relación genealógica que guardan entre sí viene de un esquema de esclavitud, y conforme pasa el tiempo, nos vamos dando cuenta de que en realidad se trata de una familia de vampiros que necesita de Evie para cimentar su legado y sobrevivir.
La cinta toca temas como la raza, el abuso y el trauma generacional. Y aunque a veces puede caer en lugares comunes, en realidad es una propuesta interesante que sigue redefiniendo a los personajes femeninos dentro del género de horror y pretende buscar nuevas temáticas para revitalizar una historia tan antigua como las cacerías de vampiros.
Por eso, tuvimos la oportunidad de platicar con la directora Jessica Thompson sobre su historia y por qué quedamos fascinados siempre con las historias de estos legendarios chupasangre.
Vampiros: El Depredador natural de los humanos
Thompson nos contó que parte de lo que buscaban explorar con la historia era «la necesidad de formar conexiones y encontrar de dónde venimos». Encontrar a nuestra verdadera familia y dónde pertenecemos es un tema que se han contado en innumerables ocasiones, pero lo que Invitación al Infierno hace a bien es explorar también el peso de la sangre cuando hablamos de nuestro legado familiar, pues al final del día es nuestra conexión primaria para identificar dónde pertenecemos y de dónde venimos.
«Por eso hacer la historia de vampiros era un círculo perfecto», nos contó Jessica Thompson. «Evie toma el test de ADN y va en busca de su sangre, y ellos utilizan eso para manipularla. Era un ciclo que cerraba perfecto».
Para Thompson, nuestra fascinación por los vampiros viene de varios factores, pues desde hace cientos de años hemos escuchado hablar sobre historias de personas chupasangre y caminantes nocturnos. Pero para ella, lo más aterrador es la facilidad con la que se hacen pasar por humanos, cosa que los hacen los depredadores más grandes del ser humano.
Creo que la razón por la que nos atraen tanto es porque se parecen tanto a nosotros y por eso son son muy engañosos. Son una mejor versión de nosotros. Son más guapos, más fuertes, viven para siempre. Hay algo muy seductor y carismático en ellos que te atraen. Es como jugar con fuego o con el peligro.
Porque se ven como nosotros, pero obviamente ellos están ahí para cazarnos. Y creo que esa es una idea tan aterradora que nos mantiene cautivados.
Jessica Thompson para Fuera de Foco
Terror con Perspectiva de género
Las palabras de Thompson adquieren un significado distinto cuando conocemos a Walter (Thomas Doherty), el cautivador líder de la familia que poco a poco se va ganando la confianza de Evie a través de promesas y tratos delicados.
Sin embargo, rumbo al final nos damos cuenta de que todo fue una farsa, y la película no teme presentarnos como Evie se siente ultrajada y abusada. Jessica Thompson buscaba precisamente eso, ya que quería mostrar a un personaje femenino que se enfrentara a estos temas desde el principio.
Estoy harta de las damiselas en peligro y de los personajes femeninos en películas de terror que corren por ahí llorando y gritando para sobrevivir. Parte de lo aterrador del patriarcado es lo amable y sutil que se ve.
Jessica Thompson
Entonces, por eso buscó que Evie también ”tomara el poder para combatir ese mismo poder”.