Platicamos con el talento detrás de El Libro del Amor y nos dijeron cómo buscan reinventar las comedias románticas
«El Libro del Amor» (Book of Love) presenta la historia de Henry (Sam Claflin), un escritor decepcionado porque su novela fue un total fracaso en Inglaterra. Sin embargo, su historia resulta un rotundo éxito en México, por lo que lo invitan a hacer una gira promocional en el país.
A su llegada, Henry descubrirá la verdadera razón detrás de ese logro en ventas: la traductora mexicana María Rodríguez (Verónica Echegui) ha reescrito su historia, convirtiéndola en una apasionante novela erótica. Al principio, el autor está colérico, pero con el paso del tiempo toda esa aventura se convertirá en una gran lección, especialmente cuando comienza a conectar de una manera inesperada con María.
Analeine Cal y Mayor, Verónica Echegui y Horacio Villalobos nos compartieron cosas muy interesantes sobre algunos aspectos de la película y acá te los compartimos.
No es sólo una Comedia Romántica
El cine mexicano tiene el estigma de «sólo producir comedias románticas» por ser supuestamente el género más redituable en el país. Aunque no todas logran ser del gusto del público, hay películas que logran destacar por esos pequeños detalles que las alejan de la «fórmula clásica» que solemos encontrar. Y El Libro del Amor es una cinta que busca precisamente romper con esa preconcepción:
¿Cómo lo lograron? La directora Analeine Cal y Mayor nos comparte: «Me gusta que no llegó a mis manos como la típica comedia romántica donde el objetivo es encontrar pareja o que uno es muy feliz si no tienes pareja. Trata completamente de otra cosa: son dos personajes que su sueño es ser escritores, como uno lucha por ello y le cuesta llegar a dónde quiere y por otro lado se me hizo muy original y muy divertido esta traducción que le hace María».
Durante la travesía de Henry y María en la película, se menciona que esos cambios en la traducción son para «darle a la gente lo que busca» en un libro romántico. Pero, ¿Esta producción mexicana también busca el mismo objetivo? Al respecto, Verónica Echegui comenta: «siento que es complejo saber qué es lo que el público quiere. Por eso, lo que más me gustó de la película es que hablaba de una historia sólida y aunque era una comedia, no pretendía hacer reír «porque sí».
«Había otros temas que hacían de esta historia algo mucho más y que va más allá, por ejemplo las barreras interculturales, cómo entre ambos chocan y cómo se juzgan porque no entienden el mundo del otro, hasta que se van descubriendo el uno al otro, descubren que estaban equivocados y que al final el amor es universal y el lenguaje es universal«.
La Química más allá de los Personajes
Algo que se le puede atribuir a El Libro del Amor es la naturaleza con la que sus protagonistas se desenvuelven en la pantalla. Verónica y Henry Claflin logran hacer que en cada interacción sientas esa tensión, incertidumbre que eventualmente provoca la conexión entre Henry y María.
Podrá existir una diferencia de idiomas, pero la actriz nos compartió que la relación en este aspecto fue facilísima: «desde el primer día. Es un encanto (Henry Claflin), es muy buena persona, es muy sencillo, cercano, se puede hablar con él de todo y luego además es muy divertido. Yo amo este trabajo y lo que hago es lo que más me apasiona, si es encima con gente buena lo agradezco infinito. Yo no quería que se terminara esa peli nunca«.
Horacio Villalobos también disfrutó de este proyecto y primero nos describió lo que fue su personaje Pedro, «Es el representante del editorial en México, es libre con su personalidad y de alguna manera se convierte en el «celestino» para que los personajes de María y Henry tengan su encuentro amoroso, además de ser el que aporta gran parte de la comedia«.
También señaló: «el personaje de Pedro me iba como un guante, la verdad, soy una persona con rasgos muy marcados y soy un actor que le va a tener siempre que poner su personalidad de alguna manera, poco o mucho, al personaje. Entonces no le aporté nada, es un personaje muy bien escrito y lo único que hice fue disfrutarlo de verdad».
La química en este proyecto traspasó la pantalla y se notaba incluso en la producción. Según nos cuenta Verónica, la química que tenían en el set era tan grande que no importaban las brechas del lenguaje al momento de hacerse amigos y al final la directora tenía que poner orden: «Analeine a veces venía y nos decía: ¡Que os calleis ya, que sois muy pesados!»».
Por su puesto que la directora con una gran sonrisa nos compartiría que «estaba todo el tiempo con bromas, aguantándose la risa como niños pequeños, fue muy divertido. Los dos son actores muy generosos, los dos se escuchan, se apoyan y es completamente un gran equipo de comedia romántica. Una actuación depende tanto también de la otra persona que sea generoso, que te escuché, que tú puedas reaccionar y es vital que los dos se apoyen».
México: ¿Cuna de Talento?
En el Libro del Amor, la obra de Henry tiene un gran éxito en México, panorama que no se aleja de la realidad, pues nuestro país en muchas ocasiones ha sido fundamental para impulsar a nuevos talentos y que alcancen un mayor reconocimiento con el arte que crean.
Sobre esto, Horacio opina que «Lo que sucede es que por ejemplo, en la película, el libro escrito por Henry es una intensidad y María lo transforma en una novela erótica y como es buena escritora, evidentemente hace un libro que conecta con los hombres y mujeres de México.«
«¿Por qué aquí funciona? Porque México es una sociedad conservadora, el mexicano aún es conservador, es culpígeno, somos la mayoría católicos, tenemos esos atavismos de las religiones judío-cristianas; y entonces en una sociedad así, algo que es chispeante, morboso y «calenturiento», funciona a la perfección.«
«Ahora, si hablamos de un asunto de malinchismo, también es cierto, somos un poco malinchistas. Además también depende mucho del buen trabajo que ha hecho Pedro para promover el libro, porque en México, no somos muy lectores, entonces el que haya gustado la traducción de María, pero la firma en la portada sea el nombre de un autor británico, son aspectos que pueden influir mucho, es cuestión de reconocimiento, no lo sé«.
¿Conocerían a su autor favorito?
Finalmente, jugamos un poquito con la trama de El Libro del Amor para que Analeine y Verónica nos confesaran si conocerían a sus autores favoritos y si se atreverían a cambiar la historia de un libro escrito por alguien más:
«Bueno, no sé, creo que hay libros que me hubiera gustado leer cómo esa misma historia la vivía una mujer. Libros en los que han sido protagonistas hombres, simplemente me gustaría que el mismo libro se rescribiera pero vivido por una mujer. Tengo 800 libros en casa que me he leído y ahora mismo me preguntas esto, se me viene «Cumbres Borrascosas», pero este no es el caso de lo que te estoy diciendo, pero me he quedado en blanco… Sabes, a mí me hubiera gustado «La Metamorfosis» de Kafka, me gustaría ver la misma experiencia vivida por una mujer de esa época», nos platicó Verónica luego de pensarlo detenidamente.
Por su parte, Analeine nos confesó: «a mí me hubiera gustado haber conocido a Edgar Allan Poe, para ver si era así de oscuro o no. Saber de estos personajes que escriben de literatura gótica, me gustaría saber si son así en su vida real».
El Libro del Amor, producción de Zima Entertainment ya está en as salas de cine y es una buena alternativa si quieres disfrutar de una historia sencilla y entretenida. Ustedes cinéfilas y cinéfilos, ¿Qué libro reescribirían y qué harían si conocieran a su autor?