Una mascota fiel y adorable, trazada al mejor estilo de D-Dog en Metal Gear Solid V
The Walking Dead o la historia de cómo un perro hace que nos olvidemos de Rick por completo. Quizá no tan así, pero sin duda que «Perro» ayudó a que el episodio 7 de la novena temporada pasara de forma más amena. Fue un capítulo muy bien logrado, para nada aburrido; de ésos que, aunque no ocurra mucho, aportan al crecimiento de los personajes.
Henry tuvo su momento, Carol igual, Daryl habló lo suficiente y el nuevo grupo de supervivientes tuvo algo que contar. En Hilltop ahora sin Maggie se siente distinto, un vacío…, pero Jesus quizás tome un protagonismo que le dé un sentido a su estancia en esta serie.
Los elementos de acción fueron escasos a diferencia de otros episodios, pero el hilo conductor y los diálogos tuvieron coherencia. Además, está el factor de que ahora no tenemos momentos demasiado largos con personajes que no nos importan. Quienes aparecen, saben ocupar el espacio para dar realce a emociones, confrontaciones o reconciliaciones que sí son fundamentales. Tara, por ejemplo, salió por tres minutos y fue lo justo. Nadie quiere ver más de ella.
Michonne, la obstinada
Comenzamos donde quedamos la semana pasada, con Michonne decidida a acompañar al nuevo grupo hacia Hilltop. Ella sigue desconfiando de ellos, de las mujeres sobre todo. Su personaje puede resultar molesto en esta etapa post-Rick, lo que se comprende ya que carga con luto y tiene que criar a dos menores a la vez.
Eventualmente llegan hasta el campamento donde rescataron al grupo en cuestión. Ahí reafirman la muerte de uno de ellos, lo que causa dolor a Magna, la del tatuaje en el pecho. En ese lugar también encuentran las armas que portaban, pero Michonne no cree que sea conveniente que las tomen y no los deja. Se crea una pequeña trifulca pero al final Yumiko, que es como la líder, los convence de que lo mejor es hacer caso.
Posteriormente pasan la noche en un pequeño almacén. La de la espada se levanta porque escucha algo sospechoso, ahí mira a Luke sujetando algo que ella cree es un arma. Cuando se voltea, ella actúa por instinto y le rebana su arma… En realidad solo era un violín. Bueno, no cualquiera, un Stradivarius.
Ante la desilusión de Luke de ver instrumento musical tan valioso hecha pedazos, cuenta una interesante historia. Les dice cómo fue que fueron «derrotados» los neandertales, llegando a la conclusión de que la música, en sus primeras manifestaciones, fue clave en el entendimiento entre especies. Una buena analogía en este mundo post-apocalíptico con tantas comunidades distintas.
Las armas del nuevo grupo
Otro punto importante del episodio fue que en un momento de desesperación, y porque una horda de walkers aparece de repente, Michonne decide que los del nuevo grupo recuperen sus armas para ayudar a matar zombies. Una usa arco y flecha, otros tiradoras (¿really?) y Magna, un cuchillo. Solo faltó que viéramos a Luke usando el violín y tendríamos un JRPG completo.
Superando esa intensa batalla, vuelven a emprender camino a Hilltop, pero Connie, quien es sordomuda, se percata de algo en medio del bosque. Todos se fijan pero no distinguen nada…, aunque claramente hay alguien o algo que los está vigilando.
Conozcamos a «Perro»
En la otra historia alterna tenemos a Carol llegando al lugar en medio del bosque donde ahora vive Daryl. Ella busca que Daryl vaya con ellos a Hilltop y de paso cuide de Henry, aunque a él en principio no le agrade tanto la idea.
Daryl ahora vive con «Perro«, una mascota fiel y adorable que snos recuerda al D-Dog en Metal Gear Solid V. Daryl se ha hecho un hombre que come lo que encuentra y no se ve incómodo en ello. Además, ha estado ahí desde que comenzó a rastrear el cuerpo de Rick, uno que nunca encontró. Me gustó mucho eso: a pesar de cómo terminaron ambos, su hermandad era para siempre.
En un momento el perro queda atascado en una de las trampas para walkers. Pero el de la ballesta rápidamente actúa para salvarlo de unos zombies que quieren comérselo… ¡Cuánto se sufre cuando ves a un perro en apuros en la televisión!
Henry también se percata y quiere ayudar, pero Daryl lo aleja, aunque el menor termina rescatando al que tiene toda la experiencia. Después de un cruce de palabras entre ambos, se crea una mejor conexión y Daryl accede ir a Hilltop.
Jesus, el soberano
En Hilltop ya no hay más Maggie. Me dio algo de risa el cinismo cómo plantearon la salida de una de los personajes principales que ha tenido The Walking Dead. Sí, se fue con Georgie…, pero ¿cuándo lo decidió? Demasiada mezquindad con una protagonista que no tuvo ni tiempo de despedida, ¿no creen?
Ahora manda Jesus, aunque parece no gustarle la posición (hasta han votado por él). Tara es la segunda al mando y parece hacerlo bien. Así mismo Jesus se ha estado viendo con Aaron en las afueras (¿romance?). Lo hacen a escondidas porque en teoría no hay relación entre Alexandria y Hilltop. De hecho Michonne hasta ahora supo que Maggie se fue de la comunidad.
Después no pasa mucho más, sólo un bonito reencuentro entre él, Tara, Daryl, Carol y Henry. Al verse todos en Hilltop, comentan que Rosita está malherida y que Eugene está desaparecido en el bosque, por lo que todos emprenden la misión de salvarlo.
Ya queda sólo un capítulo más para finalizar la mid-season de una novena temporada que ha sido altamente positiva en muchos sentidos. Ojalá cierre con broche de oro y, por qué no, con drama y la salida violenta de algunos personajes.