Con diálogos simples, pero efectivos, finalmente vemos a estos personajes cobrar algo de autenticidad.
The Walking Dead sorprendió con un episodio que tuvo los ingredientes necesarios para hacernos volver a tener fe… Aunque no escapen de aspectos ridículos que no aportan a la construcción de la trama.
«The Key» fue el episodio 12 de la 8va temporada y definitivamente que esta segunda parte es mejor que la primera. Bueno, cualquier avance de la historia es mejor del estancamiento previo.
Lo bueno fue la inclusión de nuevos personajes. El aire fresco que entrega tener a otros humanos interactuando y afectando; de alguna forma, el status quo de una comunidad, genera un interés altísimo por conocer qué intenciones tienen en realidad. Georgie es la líder de este nuevo grupo de apariencia pacífico; el cual solo quiere unos discos de música y a cambio darán «información valiosa».
Posteriormente nos daremos cuenta que son planos para hacer molinos, alcantarillas, silos; aspectos fundamentales de supervivencia y convivencia humana antes de llegar a la modernidad. El incluir este nuevo elemento abre el abanico de posibilidades en que puede avanzar la historia. Después de mucho, me hace ver un futuro a la serie.
Es curioso también ver el reto y el contraste de moralidad que enfrentan las mujeres en Hilltop. Maggie está decidida a no hacer caso a la simple petición del nuevo grupo y prefiere asaltarlas y tenerlas de rehén. Antes de ello ni siquiera quería acercarse, fue la insistencia de Michonne la que la llevó al encuentro. Enid está del lado de Maggie, una joven que ahora claramente ha bajado sus estándares morales.
Con diálogos simples pero efectivos finalmente vemos a estos personajes cobrar algo de autenticidad. Eso había perdido The Walking Dead, darles más matices a las decisiones que toma cada persona; por lo que fue bienvenido este primer esbozo de conversaciones un poco más coherentes.
En otro lado tenemos la acción del capítulo que estuvo bastante buena y en momentos hubo tensión, aunque el resultado fuese predecible. Rick decide irse en estampida sobre Negan, quien va en la parte trasera de una caravana de vehículos que se dirigen a Hilltop. El por qué iba solo y sin mayor seguridad no debe preocuparlos, recuerden que esta serie no está escrita por genios.
Rick choca el carro donde está Negan y lo deja malherido. Luego, teniéndolo a unos escasos metros y con un rifle de asalto empieza a disparar -sí, desperdiciando balas- sin asegurarse de dar al objetivo. Negan logra mágicamente meterse en un edificio y escapa la ráfaga de balas del antiguo policía. ¿Cómo Rick pasó el entrenamiento básico de puntería para convertirse en un oficial de la ley?
De ahí tenemos una nueva batalla entre estos dos… Y como es de esperarse, ninguno mata al otro. Debo decir que aunque esto es cansino, no me molestó mucho. Le perdono que Rick justo cuando lo tenía en la mira con su revólver se quedara sin balas (cliché); que en vez de atacarlo con el hacha se la tirara y que Negan cayera varios pisos sin lastimarse.
Sí, todo eso carece de sentido pero al menos fue entretenido. Admito también que de pronto sentí que iban a sorprendernos e iba a ser el final de Negan de una vez por todas. Pero no, obviamente no fue así y lo que ocurrió fue otro intercambio de palabras.
Las mismas de antes, pero con una tensión mayor. Intenso observar a Negan reaccionar desesperado cuando Rick tiene a su amada Lucille… En verdad eso es lo único que le importa al de la risa de villano y las malas palabras. Al final, Negan logra escapar a pesar de estar rodeado de walkers junto a Rick, pero eventualmente es atrapado nada más y nada menos que por… ¡Jadis!
En medio de esa persecución entre héroe y villano, apareció el genial y badass Simon junto a Dwight. Este fue otro aspecto súper positivo de este capítulo y por el cual me gustó tanto. Simon se ha transformado en un personaje que da ganas de saber qué hará después; quien ahora tiene un plan de suplantar a Negan porque se cansó del mismo y, aún dudando, Dwight parece que quiere seguirle la corriente.
Ambos deciden informar al resto de Negan’s que el jefe está muerto, pero que deben seguir con sus orientaciones hasta el final. Lástima que Simon tenga los días contados… El del bate sangriento sabe lo que hizo con los Garbage People.