Protagonizada por Phillipa Soo (Hamilton), Simu Liu (Shang-Chi) y Luke Bracey (Elvis), Los dos amores de mi vida se basa en la novela del mismo nombre escrita por Taylor Jenkins Reid, que narra la vida de Emma Blair, una joven que encontró el amor con su mejor amigo de la infancia, Sam, cuatro años después de que su marido el fotógrafo Jesse, se perdiera en el mar.
Sin embargo, en la víspera de la fiesta de compromiso de Emma y Sam, se revela que Jesse está vivo y pasó cuatro años varado en una isla desierta. Esto provocará que la protagonista se divida entre los dos hombres con los que ha vivido una historia de amor única.
Los dos amores de mi vida: ¿ofrece una nueva perpectiva del amor?
Es común que las películas de género romántico terminen en un “vivieron felices para siempre”, pero, ¿Qué pasa si no es así?, esta es una pregunta que planea Los dos amores de mi vida, ya que aparentemente Emma y Jesse estaban destinados a permanecer y disfrutar de la vida juntos, hasta que un terrible accidente los separa, lo que provoca que la vida de Emma se desestabilice y caiga en una profunda depresión.
Si bien la película no profundiza en el proceso de duelo que vivió Emma, sí nos menciona que durante muchos años estuvo sin ningún rumbo y fue gracias a la ayuda de su familia que pudo salir adelante. Sin embargo, cuando un suceso tan grave pasa, te marca de por vida, por lo tanto, Emma ya no es la misma, su personalidad ha cambiado y lo que antes le parecía aburrido ahora le provoca seguridad y paz.
Es ahí cuando el personaje de Sam entra en la vida de Emma, que aunque fueron grandes amigos de la infancia, nunca se habían relacionado románticamente por las diferentes perspectivas que tenían de la vida. Pero años después, resulta que la pareja son el uno para el otro, debido a que Emma quiere formar una familia y tener estabilidad en su vida.
Sam es un profesor de música que siempre ha soñado en conquistar a Emma, de modo que cuando la vida finalmente los reúne, no tiene ningún problema en ayudarla a superar su duelo y rehacer su vida. Y es aquí cuando Los dos amores de mi vida tiene un gran acierto, ya que nos muestra como Sam nunca intenta presionar a la protagonista para vivir nuevamente una relación, sino que las circunstancias se van acomodando.
El personaje de Simu Liu es la parte divertida de la película, sus escenas le brindan una especie de frescura a todo el drama que envuelve a la protagonista. Su personaje se convierte en uno de los favoritos de forma instantánea por la madurez emocional con la que se toma la indecisión de Emma, ya que perfectamente entiende que necesita su espacio a pesar de que teme perderla.
Los dos amores de mi vida muestra que las relaciones no son para siempre
Los dos amores de mi vida presenta como en cada etapa de nuestra vida podemos llegar a tener diferentes amores y relaciones que son igual de valiosas e importantes, ya que para que algo sea real no necesariamente debe ser para siempre. La película ejemplifica de forma positiva la idea sobre que a veces dos personas que se entienden y aman, años después ya no logran conectar.
Los seres humanos estamos en constante cambio y no podemos pretender tener la misma personalidad durante toda nuestra vida, ya que vinimos a este mundo a evolucionar, aprender y tambien es valido cambiar de ideas, estilos de vida, hobbies, etc, de modo que las personas que te hacen feliz en este momento, simplemente en un futuro puede que ya no, y eso está bien.
Los protagonistas de Los dos amores de mi vida logran darse cuenta a tiempo que es tóxico quedarse en una relación solo por los recuerdos del pasado, ya que al final, esto provocará un gran dolor en la relación que en un futuro generará rencores y frustraciones.
