Las olas es la metáfora sobre una relación amorosa, y cómo puede ser turbulenta o permanecer en calma, dependiendo de qué tanto haga la luna llamada «familia»
Cine Caníbal ya nos tiene acostumbrados a traer excelentes películas a las salas de cine, esta cinta de drama y romance dirigida por Trey Edward Shults (Viene de Noche), no es la excepción a la regla.
Y tampoco le es indiferente a aquella característica que la distribuidora ha tenido en sus producciones, pues a pesar de que la sinopsis e incluso los avances se puedan tornar inocentes y tranquilos, una vez que estamos disfrutando la historia, poco a poco tendrá tintes que nunca imaginamos encontrar y nos hará volar la cabeza con la serie de acontecimientos que veremos.
Con su tercer largometraje, el director toca algunos temas tan presentes en la sociedad hoy en día, que harán reflexionar a la audiencia en las dos horas de duración del metraje.
¿Qué nos cuenta Las Olas?
Las Olas cuenta la historia de Tyler (Kelvin Harrison Jr.), un joven que parece tener todo lo necesario para ser alguien exitoso: una familia económicamente solvente que lo apoya para que cumpla sus metas, un lugar principal y envidiable en el equipo de lucha de su escuela; y una relación en la que ambos están perdidamente enamorados.
Sin embargo, Tyler debe mantenerse comprometido con las aspiraciones más altas que le inculcaron, sin importar qué pase a su alrededor, viviendo bajo la intensa vigilancia de su padre Ronald (Sterling K. Brown).
Este último mantiene una tensa relación con su prometida Catherine, quién le ha ofrecido consuelo al joven Tyler. Cuando la situación parece llevarlos al límite, la fachada de una vida perfecta comienza a desmoronarse y los conflictos con su padre empiezan a escalar peligrosamente.
Todo suena muy interesante y no me creerían si les dijera que tan sólo es la primera mitad de la película.
¿Una Cinta Demasiado Larga?
Bueno, en realidad la duración no es el problema, sino la forma en que decidieron utilizar las dos horas. Está hecha de tal manera que cuando sales de la sala, sientes haber vistos dos películas en una sola, es muy, muy, muy marcado el final de una trama y el inicio de otra.
No tendrías ningún problema porque toda la película maneja un relato interesante sobre el amor, la familia y los tipos de pareja que puedes encontrar en la sociedad. Sin embargo, la primera mitad es vibrante, te mantiene tenso, te hace sentir bastantes emociones, te mete a la historia y en su punto crucial te deja sin palabras.
En cambio, con lo que viene a continuación de estos hechos, el ritmo baja drásticamente. Se vuelve muy visual, ahora te hace reflexionar demasiado, pero llega a un punto que se vuelve muy tedioso, lento y hasta innecesario.
Incluso, hay un momento en que se lanzan muchas cosas que podrían ser relevantes, pero salen todas juntas y tan a la «¡Salvemos la película!» que no logran el impacto que sin duda hubieran podido causar.
Una Marea de Historias y Temas de Interés
Pero, a pesar de esta dualidad en su desarrollo, durante ambas historias pareciera que solo se van a centrar en uno o dos personajes, pero la forma de amplitud que le dan al contexto hace que la narrativa brille por sí sola.
En la mayoría de los casos, vamos a saber por qué esa persona piensa o actúa de cierta forma, por qué toma tal decisión y como se dejan influenciar por ciertas personas que son cercanas.
Ofrecerá, además, opiniones desde distintos puntos de vista sobre temas que actualmente aquejan a la sociedad, o son punto de discusión muy presente, tales como: el machismo, el aborto, desintegración familiar, el control de los padres sobre sus hijos, entre otros.
Algo que también marca demasiado esta historia, además de el amor y la familia, es la importancia del perdón. Es claro que la primicia de Las Olas hace que lo importante o destacable sea la familia, el amor y los diferentes tipos de relaciones en pareja que puede haber según la edad.
Otros aspectos presentes en la película son la madurez, el ritmo de vida y las condiciones sociales, pero también resalta la forma en que el perdón puede afectar la relación con alguien. Así como las consecuencias de otorgarlo a la ligera, o, en su defecto, guardarlo por orgullo.
Técnicamente Perfecta
Visualmente es fabulosa, desde el primer momento te cautivarán los movimientos de cámara que se llegan a ocupar acompañados de las luces y la paleta de colores tan llamativos que se utilizan y sobre todo transmiten lo necesario al espectador.
El paisaje de Florida no es para menos, uno de los más bellos para esta historia y que además ayuda a sumergirte en la vida cotidiana de los personajes. Sintiendolos, no como actuaciones, sino genuinamente como si los personajes estuvieran viviendo un día común sin cámaras de por medio.
Los aspectos técnicos toman un papel muy importante al ayudar a reflejar este paisaje emocional que habrá durante toda la película, sobre todo también con la parte musical.
Déjate Empapar por Las Olas
Con una gran producción, grandes actuaciones e increíbles mensajes, Las Olas es una cinta que debería de estar en tus planes del fin de semana, sobre todo si te gusta disfrutar de una cinta que genera discusión al salir de la sala sobre si te sientes como tal personaje o si compartes los ideales del otro. Porque seguramente te identificarás con alguno de sus protagonistas. Pero eso sí, ve preparado o preparada porque no es una cinta para cualquiera, pues a pesar de que la primera parte es muy buena y frenética, la segunda es buena y tediosa. Como sea, no te arrepentirás de haberla visto.