El asesinato de la familia Borden

Basada en hechos reales.

Lizzie es una película que parte de una premisa interesante, pero no logra aportar algo novedoso al suceso que ya conocemos.

Esta película está basada en un caso real. Además, no es la primera adaptación que tenemos sobre los asesinatos de la familia Borden. Pues hace pocos meses tuvimos una serie con Cristina Ricci, la cual nos acercaba una historia de época retratando la vida de la mujer reconocida como “La asesina del hacha”.

Ahora, este film protagonizado por Kristen Stewart y Chloe Sevigny no busca centrarse en el asesinato en sí, ni buscar nuevas respuestas a las incógnitas que aún tenemos sobre el caso. Lo más importante en la cinta es el drama familiar y la relación de sus protagonistas: Lizzie Borden y Bridget, una se las sirvientas de la casa.

Basada en hechos reales

El caso real sucedió el 4 de agosto de 1892 en Fall River, Massachusetts. Andrew Jackson Borden y Abby Durfee Gray Borden, fueron encontrados asesinados. Andrew, de 70 años, recibió once hachazos en la cara y el cráneo. Abby, su segunda esposa de 63 años, recibió diecinueve, todos en la espalda. Los cuerpos sin vida fueron descubiertos por la menor de sus hijas, quien de inmediato llamó a su sirvienta, Bridget Sullivan, para mostrarle la espantosa escena. Este desgarrador suceso ha sido fuente de gran inspiración para distintas películas. Sin embargo, éste film en particular parece olvidarse del suceso; y se centra más en la psicología de Lizzie, una de las hijas de la familia.

Además, este también es un relato feminista ya que busca mostrar con énfasis el carácter de su protagonista. Ella es una mujer cuyas ideas van en contra de los pensamientos de la época; por lo que existe una relación muy conflictiva con su padre, una figura respetada en su sociedad. Quizá lo mejor que deja la cinta son los momentos en que la protagonista interactúa con Bridget, sirvienta con la que tiene muchas cosas en común, como los abusos de su entorno y el de la misma sociedad.

Lo más destacado

Uno de los aspectos que se logra sacar adelante es la actuación de sus protagonistas. Chloe Sevigny hace de Lizzie, un personaje cautivador y misterioso a pesar de que muchos conozcan su final. Asimismo, se complementa con Kristen Stewart, que si bien es un personaje más medido en carácter, logra empatar con su compañera con diálogos y escenas que denotan erotismo desde un acercamiento simplista.

El asesinato de la familia Bordenes una película que parte de una premisa interesante, aunque no logra aportar algo novedoso al suceso que ya conocemos. El problema se encuentra en el lento desarrollo de la trama y por momentos, se olvida de conflicto principal de la historia para dar paso al romance. A pesar de esto, llega a ser disfrutable gracias a las actuaciones de Sevigny y Stewart; pues mantienen una química particular a través de sus sufridos personajes. Es un film que podría haber dado más de sí misma , pero que de todos modos mantiene el interés.