The Falcon and the Winter Soldier retomará la problemática racial del cómic: Truth.
Este artículo incluye leves spóilers de el episodio 2 de Falcon & Winter Soldier
El último episodio de Falcon and the Winter Soldier retoma unos de los conflictos más interesantes y controvertidos en la historia de los cómics de Marvel, pues como señala el autor Richard Newby para The Hollywood Reporter, la trama de la serie hará eco lo sucedido en Truth: Red, White & Black, donde se revela que Steve Rogers no fue el primer super soldado.
Esto último se debe al Proyecto Renacimiento, llevado a cabo por Estados Unidos durante la Segunda Guerra Mundial, el cual experimentó con 300 soldados negros buscando crear la fórmula que diera vida a un super soldado.
El único hombre capaz de resistir las pruebas sería Isaiah Bradley, quien se convertiría en el arma del gobierno pero sin recibir la gloría que obtuvo Steve Rogers, al grado que después de cumplir con sus tareas, fue metido a prisión durante 17 años por “robar” el traje del Capitán América, lugar donde fue esterilizado y se le negaron los tratamientos médicos requeridos por los efectos secundarios, causados por la fórmula que le brindó superpoderes, lo que le dejó con las capacidades mentales de un niño.
Con esto, la historia escrita por Robert Morales e ilustrada por Kyle Baker demostraba que el gobierno estadounidense y los nazis tenían más en común de lo que creían, pues ambos sistemas estaban fundamentados en el control de clases que beneficia a las personas de tez blanca.
La brutalidad de este relato inspirado en los hechos reales que involucraron al experimento Tuskegee, cortó de lleno el desenvolvimiento profesional de Robert Morales en Marvel, y a pesar de ser nombrado en algunas ocasiones posteriores, desde 2005 no se había mencionado nada de Isaiah Bradley.
Por lo menos hasta el más reciente episodio de Falcon and the Winter Soldier, donde Bucky Barnes (Sebastian Stan) le revela a Sam Wilson (Anthony Mackie) algo que siempre le ocultó a Steve Rogers: Estados Unidos tenía otro super soldado que usaron durante la Guerra de Corea, el mismísimo Isaiah Bradley (interpretado por Carl Lumbly).
Esta revelación le hace preguntarse a Sam: ¿cómo representar a un país que nunca ha protegido a los/as tuyas/os? Demostrando que los conflictos raciales existen inclusive en el mundo superheroico.
Cuando John Walker (Wyatt Russell) confronta a Falcon hacia el final del episodio, le menciona que Capitán América no puede representar lo mismo que antes, y tiene razón, no se puede predicar sobre la libertad o la salvación del mundo, cuando la misma se ha fundamento en el sufrimiento de las personas de tez negra.
Como señala el autor del artículo, esta es la razón por la que John Walker fallará como sucesor de Steve Rogers, y el porque Sam Wilson saldrá exitoso redefiniendo legado del Capitán America, fungiendo como figura que vele por la seguridad de todas las personas sin importar su color de piel.