El éxito inesperado de El Teléfono Negro, que presentó a Ethan Hawke como el perturbador secuestrador The Grabber, convirtió a la película en un fenómeno de terror moderno, lo que hizo inevitable que Universal Pictures apostara por una secuela.
En esta segunda entrega, Mason Thames y Madeleine McGraw regresan para enfrentarse nuevamente a The Grabber. Sin embargo, considerando que la primera cinta cerró su historia, Gaby Meza se pregunta en esta crítica: ¿vale la pena esta secuela o demuestra que hay monstruos que deberían permanecer enterrados?