En este artículo:
- John Musker, director de las versiones animadas de La Sirenita, Hércules o La Princesa y el Sapo, desaprueba totalmente los live-action de Disney.
- En particular, considera que para La Sirenita, la nueva versión olvidó por completo la relación padre-hija, que era el corazón de la historia.
- El animador también considera que, antes, Disney estaba más preocupado por crear una historia que fuera cautivadora antes de querer enviar un mensaje particular.
El director John Musker es conocido en la industria por dirigir clásicos animados de Disney como La Sirenita y Aladdin, dos películas que en los últimos años han tenido su propia versión live-action con el objetivo de adaptar sus clásicas historias para conectar con las nuevas generaciones.
Si bien el live-action de Aladdin fue bien aceptado por el público en general, La Sirenita no corrió con la misma suerte y fue duramente criticada desde que se anunció a Halle Bailey como la protagonista de la cinta, debido a que Ariel es representada como una sirena de cabello rojo y piel clara en la película animada de 1989, mientras que Halle es afrodescendiente y de cabello oscuro.
Pero, las críticas no pararon ahí, ya que cuando finalmente La Sirenita se estrenó en salas de cine, al público no les gustó que la historia cambiará ligeramente para adaptarse a las nuevas generaciones, una opinión con la que ahora concuerda John Musker. A continuación te platicamos su declaraciones.
El director de La Sirenita desaprueba que Disney haga live-actions
El live-action de La Sirenita continúa generando interés y discusión a pesar de que ya pasó un año desde su estreno. Sin embargo, esta vez es el propio Musker quien le dijo al periódico El País, que no disfrutó de la película porque considera que la nueva historia perdió totalmente el punto principal de la cinta animada, que era hablar sobre la relación entre padre e hija.
«Creo que había una duda incluso con La Sirenita. No resaltaron la historia de padre e hija, y ese era, en cierto modo, el corazón de la película».
John Musker
De igual forma, al igual que muchos fanáticos/as, Musker admitió que no le gustó como se ve Sebastian, el amigo cangrejo de Ariel, porque no tiene expresiones faciales. “Puedes mirar animales vivos en un zoológico y tienen más expresión”. Incluso, el director explicó que es precisamente por estos detalles por lo cual estas historias funcionan mejor en animación y no hay necesidad de hacer live-action. «Esa es una de las cosas básicas de Disney: el atractivo. Eso es lo que la animación hace mejor».
Musker también confesó que Disney quería deshacerse de la animación clásica con base en dibujos desde que estrenaron la primera cinta de Toy Story en 1995. “Nos propusieron convertir todas las películas clásicas a animación digital”.
¿Disney necesita construir buenos personajes antes que mensajes?
Musker, quien también codirigió otros clásicos como The Great Mouse Detective, Hercules, The Princess and the Frog y Moana, también opinó que Disney debería dejar de preocuparse por los mensajes de las películas y poner más atención en la construcción de la historia misma, dado que descuidar a los personajes puede resultar en que el publico no conecte con ellos.
«Las películas clásicas de Disney no comenzaron tratando de transmitir un mensaje. Querían que te involucraras en los personajes, la historia y el mundo. Creo que ese sigue siendo el meollo de todo”.
John Musker
El director puntualizó que no está en contra de que el cine ahora sea mucho más responsable en ser inclusivo, sino que considera que el estudio debe de priorizar la construcción de buenos personajes y, en el camino, pueden agregar esos mensajes. “No tienes que excluir agendas», dijo el cineasta. “Pero primero tienes que crear personajes con los que simpatices y que sean convincentes».
Sin embargo, Musker comentó que Disney ahora se encuentra en un camino difícil porque no quiere arriesgarse a contar nuevas historias y prefieren seguir filmando live action y secuelas. “Las empresas siempre dicen: ‘¿Cómo reducimos nuestro riesgo? Les gusta esto, ¿verdad? Lo haremos de nuevo y se lo venderemos de una forma diferente”, explicó el director. “O piensan: ‘Bueno, podríamos mejorarlo’. Creo que había una duda incluso con La Sirenita”.