ColOZio es una película mexicana como ninguna otra: Situada en 1994, la historia narra la travesía de tres amigos: Gael (Diego Calva) y Diego (Manolo Caso) dos drogadictos que, en un viaje de ácido, vaticinan el asesinato de Luis Donaldo colosio y organizar un viaje para evitar su muerte.
Colosio es uno de los políticos más prominentes de la historia nacional, ya que durante un momento se convirtió en un bastión del cambio y la democracia que necesitaba México. Su asesinato, además de un gran misterio, se ha convertido en un símbolo de la intensa corrupción que se vive en el país y lo lejos que llegarán las “figuras en el poder” para mantener el status quo.
ColOZio es una película muy cínica, que se burla de una manera sumamente ingeniosa de la cultura mexicana, mezclando animación, referencias pop y un humor ácido que no teme burlarse de la incompetencia de sus personajes. Y en Fuera de Foco, tuvimos la oportunidad de platicar con el director Artemio Narro y los protagonistas Diego Calva, Manolo Caso y Orlando Moguel sobre porque esta película es una cinta sumamente única.
ColOZio: ¿Una película diferente?
En entrevista, Artemio Narro nos comentó que las influencias para crear esta historia vienen de raíces personales, pues anteriormente reveló que, cuando se dio la noticia del asesinato de Colosio, él precisamente estaba en un viaje de ácido con sus amigos y una de las amigas de su padre los regañó por “no organizar una revolución”.
Pero, ¿de qué sirven las revoluciones? Aunque Diego y Gael (sí, es una referencia y una conexión muy curiosa con la cinta de Y tu mamá También) tienen buenas intenciones, su viaje para salvar a Colosio en realidad tiene una base muy egoísta: ellos constantemente hablan del beneficio que tendrán después de que salven al presidenciable, y en tono de mofa se habla de la figura del político priista como “la esperanza del país”.
“Es muy fácil culpar al otro, decir que si no hubiera pasado tal, entonces no hubiera pasado esto” nos mencionó Artemio en entrevista, quien se pregunta qué hubiera pasado si ColOZio hubiera podido estrenarse en 2020. “Cuando llegamos al [Festival de cine de] Rotterdam, todos creímos que íbamos a ganar un Ariel. Nunca sabremos si pasaría. Pero creo que ha envejecido muy bien y ahora da más risa”.
Tanto Calva, Caso y Moguel estuvieron de acuerdo que la mente de Artemio fue lo que logró hacer una película tan especial, ya que cuidó hasta los últimos detalles para poder crear una película que se sintiera en los 90. “Artemio nos decía qué decir y cómo movernos. […] Todo estaba en las páginas de su historia” nos comentó Diego Calva.
Moguel, quien interpreta a un oficinista aburrido que decide sumarse al viaje para ver si puede conquistar al amor de su vida, nos dijo también que “hubo mucha improvisación y a veces ni había ensayos” por lo que asegura que “fue un proceso muy libre”. El resultado, es una película que se siente autorreferencial, graciosa y que además encuentra la manera de meter críticas importantes a la sociedad actual. ColOZio es un experimento cómo pocas veces se ha visto de esta manera en el cine mexicano.
Para construir los toques meta que tiene la historia, Artemio nos comentó que “fui sumando toques. Toques autobiográficos. Toques de una película de road-trip. Toques de tragedias griegas. En fin, diferentes toques de un montón de cosas que me gustan y temas que me interesaban”.
Y por eso, de acuerdo con Diego Calva: “se logró una película muy bonita, muy íntima. Con una libertad cinematográfica total para entendernos”. Pero la libertad y originalidad de la que goza ColOZio se logró porque el director y los artistas se esforzaron mucho por crear una obra que fuera 100% independiente.
Cine Mexicano contestatario
“Qué pereza ir a sentarnos afuera de la oficina de los señores Cinépolis y Cinemex para que nos digan que teníamos función a las 4 de la mañana, a las 9 de la mañana y duraría una semana” nos comentó Artemio sobre por qué decidió financiar la película por completo, ya que está seguro que ColOZio «no sobreviviría bajo el esquema que se maneja en la industria mexicana».
“Mejor estrenarla en nuestros términos y después vemos cómo le hacemos para que la vea más gente. Así sea regalando copias afuera”. La cinta se exhibe actualmente en la Cineteca Nacional de la Ciudad de México, pero aseguró que “es un tipo de cine que se hace con más pasión que dinero”.
Calva recuerda que cuando inició la producción de ColOZio “no lo hicimos esperando los grandes sueldos, cámpers o que nos trataran bien. Simplemente la queríamos hacer porque nos gusta hacer cine así”. La cinta tiene un tono sumamente diferente al que acostumbramos ver en el cine mexicano, ya que su historia, además de ser sumamente divertida, es una crítica ácida a la sociedad mexicana, pero desde la ficción.
“Para que haya más películas así necesitamos más Artemios” sentenció Manolo Caso. Y al respecto, Artemio nos comentó que lo que necesita el cine mexicano, es “despavilar” las creencias sobre lo que significa “un buen cine” que tenemos arraigadas, según él, desde el cineasta Ismael Rodríguez.
“como industria, estamos muy adheridos, como algo sistemático, desde Emilio Fernández, que el cine mexicano tiene que ser muy solemne. Pareciera que nos auto-prohibimos porque la película tiene que ser de migrantes, narcos, desaparecidos o de plano de cosas absurdas.
Nunca nos ponemos a pensar que también se puede echar desmadre, se puede ser gracioso y puedes cuestionar desde la risa”.
Artemio Narro, Fuera de Foco
Artemio llamó a ColOZio “una oda al cine independiente” y Diego Calva nos afirmó que “hay una libertad muy especial en no tener que deberle cuentas a nadie. Artemio tuvo un gran acierto en decir que no importa si se hace con poca lana o con muchos favores. Si hay una buena idea, el chiste es hacerlo. Y hacerlo de manera autónoma”.
En la entrevista, los tres bromearon sobre cómo la presencia de Diego Calva podría ayudar a que ColOZio tuviera más difusión y éxito en premiaciones como los Ariel. Pero sin duda alguna, esta cinta tiene todo el potencial para convertirse en una joya de culto que, si no tiene éxito el día de su estreno, se volverá un referente cultural para el cine mexicano.