Entre las muchas características por las que el cine de Luis Estrada puede destacar, al centro se encuentra una visión que, más allá de retratar la condición social mexicana y los altos y bajos de su gobierno, tiene por objetivo hacer una crítica activa a los diversos mandatos por los que ha pasado el país.
¡Que Viva México!, su más reciente película, no es la excepción, pues aunque dista bastante de la fórmula que hemos visto al cineasta plantear en otras de sus películas —La Dictadura Perfecta, El Infierno, etc—, también apunta hacia un fin similar: señalar las grandes deficiencias y la nulidad del cambio a pesar de que el país ha pasado a manos de otro partido y otro presidente.
Pero, ¿por qué es tan relevante hacer una crítica frontal a la política a través del cine? ¿Y cuál es ese mensaje nuclear que tiene ¡Que Viva México! para su audiencia? ¡Luis Estrada nos lo cuenta!
¿Que Viva México no tiene un mensaje definitivo?
En entrevista para Fuera de Foco, Luis Estrada compartió que si bien, no todas las películas tienen por misión llevar “un mensaje”, sí tienen la gran tarea de infundir en su público la necesidad de “hacer preguntas, y que cada persona pueda encontrar las respuestas a ello”.
El caso de ¡Que Viva México! se presta especialmente para tal objetivo, pues en sus tres horas de duración, el director busca retratar varios estereotipos mexicanos con los que “cualquiera pueda identificarse” a la vez en que reconoce “lo que está mal con ellos mismos”.
No obstante, para descifrar tales ideas, el director asegura será “un gran reto” para las generaciones más jóvenes que en los últimos años también han demostrado ser políticamente activos. El problema, de acuerdo a Luis Estrada está en que si bien, existe una participación social más activa entre las personas jóvenes, también se han “acostumbrado a tener cosas inmediatas”.
“Entre tik tok, el teléfono y demás, va a ser un reto formidable que se enfrenten a esta película que dura tres horas. Pero creo que a pesar de ello, se van a ver también retratados.”
Luis Estrada, Fuera de Foco.
Sin embargo, aunque el director hace una invitación directa a ver la película e “intentar comprender el panorama político” a través de la historia, asegura que tampoco es una película que busque agradar, y mucho menos hacer que “estén de acuerdo con mi visión del país”, después de todo considera que lo más importante del cine político es despertar interrogantes entre la audiencia:
“Me gustaría que les ayude a pensar cuál es la visión que tienen ellos” puntualizó.
¿Estereotipos mexicanos con sentido?
¡Que Viva México! se centra en Pancho (Alfonso Herrera), un gerente de una empresa que, gracias a su trabajo, ha logrado sobresalir y escalar en la jerarquía socioeconómica. Pero en medio de su cómoda vida “fifí” fallece su abuelo, por lo que tiene que volver al pueblo de La Prosperidad para ordenar y descubrir la herencia que le corresponde a él y su familia.
A lo largo de la historia Luis Estrada propone visiones repletas de estereotipos y personajes hasta caricaturescos, cosa que de acuerdo al mismo, es completamente intencional.
“Hasta hicimos una lotería para ejemplificar el cúmulo de estereotipos que hay alrededor de la mexicanidad” relató el director, señalando la gran probabilidad de que su audiencia llegue a identificarse con situaciones específicas que se reflejan en la cinta.
“Queremos ver si de pronto alguien dice “efectivamente, mi familia está pasando por algo así”, explicó, “La familia Reyes es un microcosmos, una metáfora del país donde plasmamos a todas las clases sociales”.
Más adelante, Luis Estrada recalcó su deseo porque “cada espectador se sienta con la libertad de interpretar la película como pueda”.
“Sobre todo los jóvenes, quizá hasta después de verla, les motiva a ver las otras películas que he hecho, porque les va ayudar a entender a su país y los tiempos que estamos viviendo.”
Luis Estrada, Fuera de Foco.