Estrenada en Netflix a principios de este año The End of The F***ing World ha sido una agradable sorpresa para todos los que amamos las series fuera de lo común. Una serie de tragicomedia que nos cuenta la aventura de Alyssa (Jessica Barden), una complicada adolescente, y James (Alex Lawther), un autodenominado psicópata. Ambos huyen de su aburrido pueblo, con intenciones diferentes y van descubriendo la forma en la que sus defectos encajan perfectamente.
Esto es sólo un pequeño resumen de todo lo que nos muestra The End of The F***ing World, es por eso que hoy te hablaremos de las 7 razones por las cuales debes verla, y descuida no hay spoilers.
1. La rara trama
Un psicópata buscando su primer asesinato y una chica rebelde se van de la ciudad sin ninguna razón concreta. Debemos aceptar que no parece prometedor, pero resultó mejor de lo que se creía. En la serie no existe algo establecido, estamos siendo arrastrados por las decisiones de James y Alyssa. Esa es una de las razones por las que la serie es imperdible, simplemente no sabes como terminará.
2. Los personajes
El trabajo de Jessica Barden y Alex Lawther ha sido muy destacable estando en la piel de los adolescentes. Al ser sólo dos personajes principales nos da el tiempo suficiente para poder entender que entre las dudas existenciales de los personajes, existe algo más profundo.
Se nos muestra la consciencia de los personajes, un enredo completo totalmente contradictorio entre lo que se hace y lo que nunca se dirá. Y aunque la serie sólo cuente con 8 episodios de 20 minutos, tenemos una fluidez excelente entre la historia y la relación de los personajes. ¿Alguien más los comparó con Bonnie y Clyde?
3. Un placer visual
Existirá más de una ocasión en la que te quedes enbobado con las escenas, y es que están tan bien cuidadas y ejecutadas que no podemos dejar de apreciarlas, un nivel de detalle excelente, tendencias retro y algunas referencias a la cultura pop son lo que encontrarás en algunas escenografías.
4. La música
The End of The F***ing World resalta la música y es algo que no se puede pasar por alto. Con una marcada tendencia indie, tenemos participaciones de The Black Angels, Julie London, Wanda Jackson, Bernadette Carroll, Fleetwood Mac, Mazzy Star y cuenta con una canción de Graham Coxon (Blur) hecha para la serie.
(Recomendación: Francoise Hardy – Voilà)
5. El humor negro
La serie maneja un humor negro, a veces algo extraño, pero funciona bien con la trama y con los personajes. La historia se burla principalmente del amor y de lo complicado que resulta entender la mente humana, una concepción que nunca llegaremos a entender.
6. ¿El amor?
En este punto, hablamos de lo que parece nacer entre Alyssa y James ¿Realmente es amor?. Al principio de la serie, Alyssa comienza una relación con James, porque él es diferente. Aunque era obvio que no sentía amor, la serie los desarrolla como complemento. Se convierten en los refugios de sus inseguridades, un lugar en donde pueden ser ellos mismos y dejar al mundo atrás.
7. La profundidad
The End of the F***ing World explora la visión del mundo de las personas que piensan «diferente», personas que tienen grandes carencias de atención y afecto. Alyssa y James son adolescentes con dudas y traumas que no les permiten encajan en sus casas. La inseguridad los obliga a comportarse como «la chica rebelde» y «el chico psicópata». Un problema real en una sociedad en donde los «parámetros de normalidad» sofocan a quienes no encajan. Muchas veces nos podemos sentir identificados con los personajes. Más aún en momentos en los que queremos salir en un viaje sin destino para poder autodescubrirnos.
La serie aún no tiene una segunda temporada confirmada y recuerden que está disponible en Netflix.
Cinéfilo, ¿Ya viste The End of The F***ing World?