Al término de 2022, la firma de investigación Muso reveló su más reciente estudio sobre la piratería en el medio de entretenimiento, y en específico, alrededor de las series y las plataformas de streaming.
No obstante, más allá de limitarse a la idea de consumir series por links gratuitos o torrents, el estudio ha planteado nuevas formas en que las grandes plataformas enfrentan la piratería hoy en día, una de ellas, la controversial medida de Netflix para evitar el uso compartido de contraseñas.
Pero, en resumidas cuentas, ¿gracias al streaming hay más o menos piratería? ¡Te lo explicamos!
¿Más contenido, menos piratería?
Quizá uno de los fenómenos más interesantes que se ha dado a partir del streaming, es la necesidad de grandes estudios de contar con sus propias plataformas, y a su vez, con contenido exclusivo con el cual atraer a las distintas audiencias.
Por su lado, Netflix siempre ha presentado su propia baraja de series y películas originales, siendo parteaguas en la categoría desde su creación. Y por otro, plataformas como HBO Max, Paramount, Prime Video entre otras, se han visto más bien obligadas a reaccionar a tal estrategia y dividir sus títulos tanto en streaming como en estrenos para cine o para sus canales de televisión premium.
En el reporte de 2022, la firma Muso impartió una investigación sobre de qué forma la exclusividad de contenido y necesidad de poseer una suscripción para consumir series y películas en específico, ha afectado a las mismas en cuanto a piratería y descargas ilegales, entregando resultados que aunque no son completamente positivos o negativos, sí ponen en perspectiva el gran cambio que el streaming ha traído al medio de entretenimiento.
Por un lado, la investigación reporta que en cuanto a materiales extranjeros —en específico animes y películas y series de origen asiático— los niveles de piratería descendieron gracias a la nueva accesibilidad que plataformas especializadas han brindado para consumir tales títulos.
Es decir que, gracias a planes de distribución con plataformas mainstream como Hulu, Netflix, y también entre sitios especializados como Crunchyroll, las audiencias no “se han visto en la necesidad” de perseguir el contenido en plataformas ilegales, logrando un acceso nunca antes visto a materiales alrededor del mundo.
No obstante, el estudio de Muso resalta que, a pesar de la gran disponibilidad de series, a partir del sexto título en el Top de Series más pirateadas, aún hay un gran derrame de anime y animaciones japonesas, cosa que atribuyen a “más un hábito” que a una falta de acceso, o al delay entre estrenos dentro de las regiones de origen y el tiempo que tarda en llegar a streaming en otros territorios. De ahí que series como Chainsaw Man, figuren tan alto como lo hicieron en el último cuarto del año pasado.
“Exclusivo de nuestro Streaming”
En contraparte, Muso destacó que grandes títulos que saltaron del cine al streaming, fueron en realidad de los contenidos más pirateados del año, apuntando a que varios de ellos se consumieron de manera ilegal debido a que se encontraban en una plataforma exclusiva y sin alternativas en otro espacio fuera de Video On Demand.
Tal fue el caso de cintas como Spider-Man: No Way Home, la cual en Estados Unidos estuvo disponible únicamente a través de Starz, cuyo volumen de suscriptores es tan solo una fracción de plataformas como Disney+, Netflix o HBO Max; por lo que la piratería de dicha cinta se mantuvo elevada a lo largo del año.
Asimismo, Muso reflejó un gran número de piratería en las series más vistas legalmente en el año, encontrándose House of the Dragon y The Rings of Power en los primeros lugares de ambas categorías.
Curiosamente, de la lista de series vistas a través de medios ilegales, se ausentaron grandes éxitos del año pasado, tales como Stranger Things, Ozark y Wednesday, los cuales de acuerdo a Nielsen figuran en la lista de series más vistas de la plataforma en 2022.
¿Por qué el caso de Netflix es diferente?
De acuerdo a Muso, Netflix es la plataforma donde más se reflejan las “nuevas formas de piratería” que, de hecho, no son completamente ilegales. Pues más allá de consumir series a través de enlaces y torrents, el contenido de Netflix es “pirateado” a través de cuentas y contraseñas compartidas, lo que “reduce” el número de espectadores que podría tener el contenido individualmente.
Dicha métrica fue uno de los golpes críticos de la piratería para que Netflix comenzara a implementar el fin de las cuentas compartidas, a través de medidas que por ahora no son del todo claras.
Si bien, en días anteriores se había compartido una supuesta estrategia para limitar el uso de contraseñas compartidas —en la que los usuarios tendrían que iniciar sesión en cada dispositivo cada 31 días—, a lo que debido a las reacciones de diversos usuarios, Netflix aclaró que “no eran las limitaciones definitivas”.
