Netflix enfrenta una nueva demanda de difamación, la quinta que recibe este año
La nueva tendencia del streaming para crear dramas basados en la vida real está causando mucha controversia. Mike Tyson recientemente criticó a Star+ por la producción de la historia de Mike: Más Allá de Tyson debido a que no le pidieron permiso para usar su imagen. El ejecutivo de los Lakers, Jerry West, prometió demandar a HBO Max por The Winning Time, y la propia Pamela Anderson dijo que no tuvo ninguna injerencia ni le interesaba estar en el exitoso show de Pam & Tommy.
Ahora, es el turno de Netflix de enfrentarse a su propia demanda por difamación, ya que Rachel Williams, la amiga de la estafadora Anna Sorokin que se hizo pasar por una rica heredera alemana para robar y abusar de la élite de Nueva York, acaba de demandar al gigante del streaming por la forma en la que la representaron en la serie Inventing Anna.
¿Quién es Rachel Williams?
Rachel Williams fue amiga de Anna Sorokin y en el tiempo que pasaron juntas, la impostora le robó más de 62 mil dólares. Ella detalló sus experiencias cayendo en la trampa en un artículo de Vanity Fair y en un libro que ella escribió titulado “Mi Amiga Anna”.
Si bien la serie de Netflix se basó en un artículo de investigación publicado por New York Magazine, Williams ya había anteriormente expresado su descontento con la producción, y de hecho escribió otro artículo para Vanity Fair argumentando cómo la historia “distorsionaba la realidad” para embellecer la historia de Sorokin y “no juzgarla tanto”.
Así que Williams decidió proceder legalmente contra Netflix y la demanda que presentó en Delaware incluye al menos 16 acusaciones difamatorias diferentes. Entre ellas, se encuentran puntos importantes de la historia: como que Williams le pedía cosas a Sorokin, que la abandonó en Marruecos, o que escondió su participación en su arresto.
Al respecto, el abogado Alexander Rufus-Isaacs, quien defiende a Williams, explicó que el problema viene del hecho de que Netflix intentó crear un villano para su historia, y entonces no debieron haber usado su nombre real, ya que cuando se están haciendo ese tipo de acusaciones negativas “debe ser la verdad absoluta”.
“Si quieres basar un personaje en una persona real y quieres hacerlo un villano, no uses su nombre real. Me gustaría que los creadores entendieran eso. Si quieren hacer un personaje despreciable, no pueden usar el nombre de una persona real a menos que lo que digan sea la verdad absoluta”.
Alexander Rufus-Isaacs, The Hollywood Reporter
Netflix está en llamas con las demandas
La demanda de Williams es en realidad solamente la más reciente de las múltiples querellas que enfrenta el streaming. Además de representar a la amiga de Anna Sorokin, Rufus-Isaacs también está representando a Nona Gaprindashvil, la ganadora de ajedrez que decidió demandar a Netflix por una mención en la serie The Queen’s Gambit.
Netflix también enfrenta una demanda por haber incumplido leyes laborales por la serie Love is Blind, ya que el cast aseguró que el productor les obligaba a beber alcohol y limitaba su acceso a agua y comida. Esto sin mencionar la demanda que impusieron varios accionistas contra Ted Sarandos y Reed Hastings sobre la infame pérdida de suscriptores. Además, suscriptores en Rusia también intentaron demandar al servicio cuando paró sus operaciones en el país.
Por si fuera poco, también se debe enfrentar a las investigaciones de The Chosen One en donde murieron accidentalmente dos personas.
