Mean Girls es una de las películas que más popularidad ha ganado en los últimos años. La cinta, protagonizada por Lindsay Lohan, Rachel McAdams, Amanda Seyfried y Tina Fey ya tiene días conmemorativos, sus frases se han vuelto memes eternos de internet y suele re-estrenarse en cines durante ciertos momentos.
Por eso, no era de extrañar que a medida que se acerca su 20 aniversario, Paramount quisiera tratar de revivir la fiebre por Mean Girls. De hecho, Tina Fey anunció que iba a escribir y co-protagonizar una nueva película, y en un momento se pensó que esta nueva versión estaría inspirada en el musical de Broadway de 2017.
Pero las cosas se están poniendo difíciles, ya que Rosalind Wiseman, la creadora del libro original de Mean Girls, está lista para pelear legalmente por los derechos de su historia.
¿No le pagaron lo justo a la creadora de Mean Girls?
Rosalind Wiseman es la altura de Queen Bees and Wannabes, el libro no es una ficción, es una guía para familias con hijas adolescentes para sortear ese periodo de tiempo, pero terminó siendo una gran inspiración para la película de Mean Girls en 2004.
Wiseman firmó un acuerdo en 2002 para vender los derechos de su historia por 400 mil dólares. Y en el acuerdo, ella voluntariamente cedió las ganancias asociadas a productos derivados de su obra, como programas de televisión, películas o musicales. Sin embargo, en su contrato estaba estipulado que ella recibiría un porcentaje de las ganancias netas obtenidas del desempeño de la taquilla de Mean Girls.
Sin embargo, de acuerdo con sus abogados, Paramount asegura que Mean Girls no ha sido redituable en 20 años de historia, y que los costos asociados a la producción y distribución de la película fueron tan grandes que simplemente no ha generado ganancias.
Pero ella no está convencida de esto. En una entrevista con The New York Post, ella asegura que “sí, firmé un contrato horrible. Pero Mean Girls hizo muchísimo dinero y siguen reciclando mi trabajo sin considerarme para nada”.
Wiseman también asegura que Mean Girls “cambió la cultura y su actitud alrededor de tantos temas sobre el feminismo” por lo que ahora sus abogados buscan auditar a Paramount para que revele qué tan rentable ha sido en realidad la producción adolescente para que se le pague lo que le deben.
De hecho, el abogado de Wiseman, Ryan Keech aseguró en entrevista para Entertainment Weekly que tienen sólidas bases para proceder legalmente contra el estudio.
“Es muy vergonzoso que una compañía del tamaño de Paramount haga todo esto para no pagarle lo que le debe a la señora Wiseman, a pesar de que tiene una de las franquicias más exitosas de los últimos 25 años”
Ryan Keech, Entertainment Weekly
¿Todo es culpa de Tina Fey?
La demanda publicada por Wiseman asegura que Tina Fey “se acercó a ella con una actitud de que Mean Girls era un proyecto conjunto” y confesó que una de las razones por las que decidió guardar silencio eran “porque no quería verse como una llorona y criticar a Tina”.
Pero en la demanda se detalla que Tina Fey obstaculizó activamente un contrato que el equipo de producción del musical de Mean Girls quería hacer con Wiseman, ya que tanto la comediante como Paramount interpusieron un recurso legal alegando que tenían los verdaderos derechos de la historia.
Wiseman también asegura que Tina Fey la mencionó en repetidas ocasiones como inspiración para la película de Mean Girls y que su nombre estuvo dentro de la nómina de la producción de la película. “Pero nunca me pagaron nada” sentenció la autora.
“Durante años, Tina ha hablado tan elocuentemente sobre mujeres apoyando mujeres, pero conforme pasó el tiempo fue cada vez más claro que esa no sería mi experiencia”
Rosalind Wiseman, Entertainment Weekly
Mean Girls tenía todo listo para producir una secuela en Paramount+, pero recientemente un reporte aseguró que las protagonistas Lindsay Lohan, Rachel McAdams y Amanda Seyfried rechazaron la oferta del estudio porque aparentemente el salario era “demasiado bajo tomando en cuenta la relevancia culturar y popularidad de la película”. Sin embargo, se detalló también que Tina Fey iba a tener un sueldo de 7 dígitos, mientras que las estrellas iban a recibir mucho menos.
No se sabe bien en qué terminará esta batalla legal, pero lo que algo está claro es que todo indica que no tendremos nuevas historias de las plásticas en un buen tiempo, al menos en lo que la franquicia de Mean Girls logra estabilizarse.