Las nuevas series de Star Wars están siguiendo un patrón muy similar al de Marvel Studios. ¿Le quitará eso «el toque» a la Guerra de las Galaxias?
En Noviembre de 2019, una de las cartas más fuertes que tenía bajo la manga la recién llegada Disney+ fue The Mandalorian. La primera serie live-action de la saga de Star Wars rápidamente se convirtió en una de las principales razones por las que el servicio de la casa del ratón logró posicionarse como uno de los jugadores más fuertes en las llamadas «Guerras del Streaming», pues semana a semana las aventuras de Din Djarin y Grogu generaban millones de espectadores y también millones de descargas ilegales a lo largo del mundo.
El éxito rotundo del Clan de 2 llegó justo después de que Disney pusiera en pausa temporal los planes de las cintas spin-offs de la saga, estrategia derivada del fracaso en taquilla de Han Solo: Una Historia de Star Wars.
Pronto se dieron cuenta del potencial que la saga de la Guerra de las Galaxias tenía en el mundo de streaming, así que conforme se anunciaba que Disney+ se volvería la prioridad de la compañía, Lucasfilm rápidamente anunció múltiples proyectos exclusivos para la plataforma centrados en el mundo de Star Wars.
En 2020, junto con la muy esperada última temporada de la serie animada de The Clone Wars, llegó también su spin-off titulado The Bad Batch. También llegó la intensa segunda temporada de The Mandalorian, la cual cimentó las bases para la nueva serie de Ahsoka y la recién estrenada The Book of Boba Fett.. El personaje de Cara Dune (Gina Carano) fue tan popular que también iba a tener su propio spin-off llamado Rangers of the New Rapublic, pero las controversias que provocaron sus comentarios en internet terminaron por bloquear el proyecto.
Además, la compañía fundada por George Lucas incursionó por primera vez en el mundo del anime con Star Wars: Visions. Y confirmaron el anticipado regreso de Ewan McGregor como Obi-Wan Kenobi en su propia serie precuela; Andor con el mexicano Diego Luna; una historia de Lando, y hasta una serie animada centrada en R2-D2 y C3-PO.
Jamás habían habido tantas producciones simultáneas sobre Star Wars. Pero, ahora la pregunta que le quita al sueño algunos/as fans es: ¿Está Disney «marvelizando a Star Wars? ¿Eso hace menos especial la franquicia?
**Advertencia: Este artículo contiene spóilers del último episodio del Libro de Boba Fett y de la Segunda Temporada de The Mandalorian**
La Fórmula Marvel a la Star Wars
El anuncio de The Book of Boba Fett vino por medio de una escena post-créditos en el final de temporada de The Mandalorian, la cual anunciaba que su estreno estaba a exactamente un año de distancia. A eso, debemos sumarle las críticas que recibió la historia de Mando debido a que algunos episodios se sentían hechos para anunciar -de una forma muy poco sútil- spin-offs de diferentes personajes.
Y además concluyó con un gran cameo de Luke Skywalker, el momento en el que la serie se ató definitivamente a la historia de la saga principal. Pero la similitiud más importante que guardan estas nuevas series de Star Wars con los patrones marvelitas es que, en el más reciente episodios de Boba Fett… no hubo una sóla aparición de su personaje titular.
En su lugar, el quinto capítulo es en realidad El Regreso del Mandaloriano, el cual se enfoca totalmente en contar qué pasó con Djarin después de su derrota de Moff Gideon y en desarrollar el lore del Sable Oscuro y Mandalore, funcionando como un puente para la historia antes de la llegada de su tercera temporada. Si todo esto les suena familiar, es que todas estas son técnicas implementadas por Disney y Marvel Studios con su Universo Cinematográfico.
El dejar las semillas para spin-offs del spin-off del spin-off. Incluir referencias al resto de la franquicia para que sus fans empiecen una intrépida cacería de easter eggs. Un cameo de uno de los «personajes legado» de la saga principal para emocionar al público y mantenernos al pendiente hasta del último minuto para saber cuál es el próximo capítulo de esta historia interconectada.
¿Eso afecta a la Saga de Star Wars?
Esta no es la primera vez en que se ha acusado a Disney de intentar volver la saga de Star Wars en algo similar al UCM. La estrategia de estreno que siguieron para la nueva trilogía, que consistió en estrenar una película de la saga al año seguida de una película spin-off causó reacciones mixtas entre ciertos sectores de sus fans, quienes argumentaban que parte de lo que hacía sentir diferente a la franquicia era que no veíamos cintas sobre ellas tan seguido.
Las trilogías originales y las precuelas estrenaban sus episodios cada 3 años, y la franquicia de George Lucas tomaba «respiros» que podían llegar a durar décadas», lo que ocasionaba que cada que llegaba el momento donde podíamos volver a escuchar esas icónicas notas iniciales del tema de John Williams, se sintiera como un evento verdaderamente especial.
El mantener los estrenos del Despertar de la Fuerza, Rogue One y Los Últimos Jedi con un año entero de espera entre sí, ayudaron a salvar las expectativas y el sentimiento de estar frente a un evento épico. Sin embargo, las intensiones de hacer el universo de Star Wars una especie de primo no-muy-lejano del UCM se hicieron más claras cuando Disney estrenó Han Solo tan solo 5 meses después de la cinta de Rian Johnson, un periodo de tiempo similar al que se tiene entre los lanzamientos de Marvel.
Y aunque tanto las series y películas de Star Wars empre han tenido una clara conexión, estaba claro que esto era porque su historia era la de una saga definida y sus proyectos (canónicos) únicamente se hacían para expandir la historia principal de la familia Skywalker.
Como un fan cuya saga favorita toda mi vida siempre ha sido Star Wars, estoy muy feliz y emocionado por ver tanto nuevo contenido explorando tantos personajes y rincones de la galaxia… Pero, no puedo evitar y preguntarme si esto le quita un poco de ese factor que la hacía tan especial y diferente a otras franquicias.