TW: Este artículo contiene menciones de abuso y violencia sexual.
El actor James Marsters, quien dio vida a Spike en la popular serie Buffy the Vampire Slayer, se ha pronunciado respecto a una de las escenas más controversiales de la serie. Pues aunque la relación de su personaje con la protagonista fue en su momento uno de los ships más populares de la televisión, esta terminó convirtiéndose en algo sumamente tóxico.
La complicada relación llevó a varios de los momentos más divisivos de la temporada 6, especialmente el sucedido en el episodio Seeing Red, donde Spike abusa sexualmente de Buffy. Es por eso que durante una entrevista con Radio Times, James Marsters profundizó sobre el origen de tan controversial escena, y el peso emocional que tuvo en él al filmarla.
¿Spike no tenía que ser bueno?
Con motivo de la celebración de los 20 años del final de Buffy the Vampire Slayer, James Marsters conversó con Radio Times sobre diversas anécdotas y momentos del show, llegando inevitablemente a la controversial escena de Seeing Red.
De acuerdo a Marsters, la idea original de la escena era lograr que “la gente se sintiera como Buffy”, no precisamente como una heroína capaz de arrojar a Spike al otro lado de la habitación, sino como alguien con quien los espectadores “podían empatizar”.
“Pensé, la gente que ve esto, le voy a estar haciendo esto a todos ellos” explicó, añadiendo que en realidad, el hecho de que tal escena fuera escrita en primer lugar era para que los/as fans de la serie pudieran empezar a marcar límites entre la relación de Buffy y Spike, y mostrarlo como el villano que era.
“Era muy frustrante porque no podíamos convencer a la gente de dejar de apostar por Spike. Los escritores no querían que el público dijera “Buffy y Spike por siempre”, porque no era el punto.
Por eso, me tenían haciendo cosas cada vez peores para que la gente se diera cuenta de que no era bueno”.
James Marsters, Radio Times.
“Incluso en algún momento Spike dice “Hey, chicos, soy malo”, porque el público se rehusaba a verlo por sí mismo, hasta que llegamos a tal escena” añadió.
¿James Marsters sufrió rodar la escena?
El actor expresó que está consciente de que dicho momento en Buffy no ha “envejecido bien”, pero asegura que es exactamente el punto, especialmente cuando en la televisión no se abordaban temas de abuso todavía. “Nadie decía, “vamos a hacerlo porque es genial y será sexy si hacemos esto. Los escritores apuntaban a lo contrario, fue algo muy meditado”.
Por otro lado, Marsters destacó que el día de la filmación fue “el más difícil de toda su carrera”, al grado en que tuvo que asistir a terapia terminado el rodaje.
“Colapsé en el set, no podía hablar, estaba temblando. Fue un día horrible. Cuando llegó el guión, estaba contractualmente obligado a hacer lo que se me pidiera, a la persona que se me indicara.
Legalmente estaba atado a esa escena. No fue divertido de ver en televisión, pero tampoco fue divertido de filmar”.
James Marsters, Radio Times
¿Spike debía morir?
Diversas personas han criticado la controversial escena, incluidos Marsters y Sarah Michelle Gellar, quienes destacan que dicho momento ejemplifica “lo peor” de su relación.
No obstante, a pesar de haber empujado a Spike a tal vía para marcarlo como un villano definitivo, el personaje termina recibiendo un arco de redención en la temporada siguiente, recibiendo un alma y sometiéndose a tortura por la culpa en sí mismo. Durante la temporada, se plantea la pregunta sobre si Buffy es capaz de querer y perdonarlo a pesar de todo.
No obstante, ahora Marsters destacó que “Buffy jamás podría amar realmente a su enemigo, y Spike entendía eso”, por lo que para él la falta de respuestas respecto a su relación, es un planteamiento abierto donde la cazavampiros sigue su propio camino, sin la presencia de Spike en el mismo, «si fuera por mí, Spike habría muerto en un abrir y cerrar de ojos».
