¡Showrunner de Alien Earth explica la filosofía de la serie!

Noah Hawley, showrunner de Alien: Earth explica la moraleja que busca mandar al público y los fans de la franquicia.

ADVERTENCIA: ESTE ARTÍCULO CONTIENE SPOILERS DEL EPISODIO 5 DE ALIEN EARTH: IN SPACE, NO ONE…

La franquicia de Alien lleva más de cuatro décadas explorando los miedos más profundos de la humanidad: la invasión de lo desconocido, la deshumanización tecnológica y, por supuesto, la ambición sin límites. 

Ahora, con la nueva serie de FX, Alien: Earth, estos temas regresan con un giro fresco de la mano de su creador y showrunner Noah Hawley, conocido por su trabajo en Fargo.

En apenas cinco episodios, la serie ha demostrado que no pretende ser una simple extensión de las películas, sino una reinterpretación ambiciosa que conecta la mitología clásica con preguntas muy contemporáneas. 

Y si algo dejó claro el episodio más reciente, “In Space, No One…”, es que Hawley quiere usar este universo para hablar de los peligros de la arrogancia tecnológica y la egomanía de los multimillonarios que creen poder controlarlo todo.

Alien Earth

Showrunner de Alien: Earth quiere hablar de problemas reales

El gran giro del episodio recae en el personaje de Boy Kavalier (Samuel Blenkin), un joven genio que sabotea la nave USCSS Maginot para provocar su caída en la Tierra y quedarse con las criaturas alienígenas. A primera vista, parece un plan ridículamente imprudente para alguien descrito como brillante. Sin embargo, Hawley explicó que esa contradicción era deliberada:

“No veo a nuestros multimillonarios tecnológicos como grandes maestros orquestando planes perfectos. Más bien creo que tienes a muchos multimillonarios con TDAH y problemas de control de impulsos. Y siempre queremos imponer cierta lógica a la ficción que en realidad no aplica a la vida real”.

Noah Hawley, the Hollywood Reporter

El personaje de Kavalier no es un calculador villano corporativo como los que suelen habitar la saga, sino un retrato de la egomanía impulsiva: alguien que persigue todas sus ideas al mismo tiempo, convencido de que jamás puede fracasar. “Nunca ha fallado, así que cree que fracasar es imposible. Piensa: ‘Puedo hacerlo todo’”, añadió Hawley.

Aunque el showrunner nunca menciona un nombre específico, la comparación es evidente: Elon Musk. El creador se refirió a cómo figuras de este perfil buscan conquistar simultáneamente el espacio, la tecnología, el transporte y hasta la política, con resultados cuestionables: 

“Es una declaración, en cierto nivel, sobre la arrogancia que vemos a nuestro alrededor: personas que creen que pueden ir al espacio, reinventar el transporte, perforar la Tierra y entrar en política. Están intentando hacerlo todo al mismo tiempo, aunque nada necesariamente esté saliendo bien. Simplemente hacen mucho”..

Noah Hawley, The Hollywood Reporter

De esta manera, Alien: Earth no solo rescata el suspenso del clásico de 1979, sino que lo combina con un comentario social directo sobre los riesgos de que el futuro quede en manos de figuras con más ego que visión.

Alien Earth

La franquicia de Alien siempre ha sido así

Si bien este giro parece novedoso, en realidad es fiel al ADN de la saga. Desde Weyland-Yutani, la corporación omnipresente que siempre ha priorizado las ganancias sobre la vida humana, Alien ha sido un espejo de cómo el poder empresarial y tecnológico puede convertirse en una amenaza mayor que los propios xenomorfos.

En Prometeo (2012), por ejemplo, el millonario Peter Weyland financia una misión espacial en busca de la inmortalidad, solo para descubrir que su arrogancia abre la puerta a horrores cósmicos. Ese mismo eco resuena en Kavalier: un personaje que se cree invencible y termina poniendo en peligro a toda la humanidad.

La diferencia es que, mientras las películas solían retratar a ejecutivos fríos y calculadores, Hawley introduce un ángulo más contemporáneo: el multimillonario caótico, que improvisa proyectos desmesurados sin medir las consecuencias. En lugar de la lógica corporativa tradicional, lo que mueve a Kavalier es la certeza irracional de que todo es posible.

De hecho, la serie juega con esa contradicción al mostrar cómo, incluso antes de la llegada del xenomorfo, los personajes ya están atrapados en un cúmulo de tragedias creadas por la ambición humana. Como dijo el propio Hawley: “Para cuando el xenomorfo entra en la historia, ya llevas seis tragedias encima con estas otras criaturas. Y luego aparece el xenomorfo y todo simplemente escala.”

Es en esa acumulación donde Alien: Earth encuentra su fuerza: no se trata solo de un monstruo espacial, sino de cómo nuestras propias fallas sociales y tecnológicas preparan el terreno para el desastre.

En resumen, Alien: Earth no solo revive el terror claustrofóbico que convirtió a la franquicia en un ícono, sino que lo actualiza con una crítica a la cultura de los multimillonarios y su peligrosa mezcla de poder, ego y capricho. Al igual que los ejecutivos de Weyland-Yutani o los sueños de inmortalidad de Prometeo, el personaje de Boy Kavalier es una advertencia: los monstruos más letales no vienen del espacio, vienen del egoísmo y avaricia humana.

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