Conversamos con Luciano Vittori sobre la serie Maradona: Sueño Bendito.
El 22 de junio de 1986 se disputaban los cuartos de final del mundial de fútbol en México, los dos equipos protagonistas de aquel encuentro en el Estadio Azteca eran Inglaterra y Argentina, una rivalidad que para algunos/as fans de ambos países iba más allá de lo futbolístico, pues 4 años antes se enfrentaron en el plano militar en lo que se conoce como la Guerra de las Malvinas.
Por ello dicha tarde para algunos/as se jugaba algo más: los ingleses buscaban extender su dominio al plano deportivo, mientras que los/as argentinas/os veían esta como una oportunidad de redención, lo cual se cumpliría gracias a dos goles históricos de Diego Armando Maradona, quien posteriormente lideraría a la selección de la tierra del tango a ganar el campeonato.
En esa misma tarde en un hospital de la Ciudad de México nacía Luciano Vittori, quien años más tarde se convertiría en actor y curiosamente sería contratado para laborar en una serie de Amazon Prime Video enfocada en la afamado futbolista, Maradona: Sueño Bendito, en donde da vida a Gustavo Flores, un personaje que funge como asistente del director técnico de Argentina en el mundial del 86: Carlos Salvador Bilardo.
Iba a ser otro personaje
Luciano nos confesó en una entrevista para Fuera de Foco que su personaje en la realidad se llama Carlos Pachamé, con quien se percató que comparte el mismo peso y altura, por lo que de alguna manera ya estaba “destinado” a dar vida al susodicho.
A pesar de lo anterior, el histrión admite que el realizó el casting para otro personaje: un dirigente de la Asociación de Fútbol Argentino (AFA), para quien se preparó viendo archivos históricos del mundial del 86, sin embargo recuerda que 4 días antes de que comenzaran las filmaciones de la serie se le informó que daría vida al asistente de Bilardo, sobre quien no encontró mucha información, por lo que confiesa que el personaje se fue creando durante el rodaje:
“Gustavo Flores nació junto al actor que hace de Bilardo: Marcello Mazzarella, siempre estuve con él tirando chistes. De hecho las escenas entre nosotros son muy graciosas, él tiene un background cómico, y por suerte el director Alejandro Aimetta nos dejaba improvisar, muchas tomas se quedaron. ¡Me encantó esa dupla del payaso bueno y malo”.
Sombras y luces
Dicho lo anterior el histrión reconoció que sólo es fanático del fútbol cuando juega la selección argentina, y su verdadera conexión se dio con otros deportes como el tenis, el cual jugaba con su hermano quien casi llega a ser profesional: “Le iba bien, a mi no. Pero luego yo jugué mucho al tenis de mesa y allí llegué a competir por parte de la federación argentina, pero nada más. Hoy en día hago running”.
También a pesar de que su nacimiento está conectado con una fecha importante en la carrera de Maradona, Luciano admite que el futbolista no es una figura que haya admirado en el plano personal debido a que “no concordaba con sus ideas políticas”, aunque admite que la historia es diferente en su faceta como deportista, ya que “hasta el día de hoy aseguro que es un Dios en el fútbol, en su época brindó mucha alegría a la sociedad argentina y al deporte mundial”.
Pero está no es la única reflexión que el actor fanático del humor de Ricky Gervais y Will Ferrell elabora sobre Maradona, sobre quien menciona que al participar en la serie pudo conocer a una persona antes de que “sucumbiera al mundo de las drogas. Y al parecer el tipo era buena persona: empático, quería ser alguien en el mundo y lograr el bien. Mucha gente no conoce lo que tuvo que vivir, se tropezó y volvió a levantarse unas mil veces. Me parece que el mensaje del programa es ese, no importa cuando te caigas, levántate”.
La importancia de un buen contexto
El programa de Amazon Prime Video también nos sugiere que muchas de las problemáticas en torno a la figura del afamado futbolista se suscitaron por rodearse de las personas equivocadas. Luciano concuerda con dicha tesis y recalca que tener un buen contexto es muy importante:
“Actualmente tengo muy pocos amigos pero son los que necesito, me apego a gente que me ayuda o no a ser algo. Prefiero estar rodeado de personas buenas y con buena energía, a ser éxitoso como Maradona y estar apegado a alguien que no me favorece”.
Referente a lo anterior, el actor rememora que al empezar la pandemia en México tenía un par de amigos de los cuales se alejó porque “me di cuenta que aportaban algo a mi vida que no necesito, no me importa si son productores o los mejores contactos, en ese sentido soy muy transparente y sensible”.
No importa el barrio
Al respecto Luciano piensa que la susodicha virtud también la posee el actual referente de la selección argentina -y hasta hace no poco del Barcelona-: Leo Messi, sobre quien menciona que se manejó en un entorno de “gente buena, no se le ve polémico y es de bajo perfil”.
El histrión piensa que esto último no se debe a que el futbolista del PSG creció en un barrio más elevado en la escala social, ya que “Carlos Tévez creció en una villa humilde con mucha inseguridad y no cayó en las drogas, o si cayó no tanto como Maradona. No creo que influya tanto el barrio sino las personas de quienes te rodeas y la personalidad”.
Y finalmente volvió a elogiar a Messi al mencionar que el sólo se dedica “a jugar fútbol y ya. Es como el actor que va al set y graba. Obviamente se busca hacer polémica en torno a ellos, pero sólo va a trabajar, hacer lo suyo y ya. Luego lo que suceda en su vida privada es suyo, y mientras menos se sepa creo que es mejor”.