Platicamos con el director de Firestarter, Keith Thomas, sobre cómo se logra una buena película de terror
Llamas de Venganza (Firestarter) es una película que mezcla el terror y el drama familiar para presentarnos la historia de Charlie (Ryan Kiera Armstrong), una niña con piroquinesis que pasa su vida entrenando con su padre, Andy (Zac Efron), para poder controlar sus poderes sin que se salgan de control. Sin embargo, cuando cumple 11 años, una organización gubernamental la busca para explotar sus poderes.
Aunque es posible que la premisa les suene familiar, la nueva película de Blumhouse ofrece una mirada empática a las dificultades de ser padre y el no poder cuidar a tus hijos, mientras mezcla algunos aspectos de terror. Y al respecto, en Fuera de Foco tuvimos la oportunidad de platicar con el director Keith Thomas sobre cómo se construye una buena historia de terror.
Haciendo algo Auténtico
Llamas de Venganza está basada en el libro del mismo nombre que escribió Stephen King en 1980, recibió dos adaptaciones cinematográficas y ha sido fuente de inspiración de series como Stranger Things. Si bien la trama podría sentirse reiterativa, Thomas nos contó que eso es porque sus temáticas son universales, ya que el miedo a lo desconocido, a no pertenecer y a nuestro potencial para el caos es algo con lo que vivimos constantemente. Y para él, lo más importante era poder contar una historia que se sintiera auténtica:
“Para mí, en términos del mundo, era importante hacer que la película se sintiera lo más real posible. La casa en la que viven, la ropa que usan, quería que la gente se identificara con ellos.
No quería que fueran gente rica viviendo allá arriba. Queríamos identificarnos con ellos, queríamos saber quiénes son, de manera que nos pudiéramos identificar con su problema”.
El Secreto del Terror
Según nos contó, él no es fan de las películas que presentan “sustos” con el único objetivo de hacer saltar a la audiencia, ya que “no hay una profundidad” y realmente no nos hace interesarnos por los personajes ni por lo que les está pasando, cosa que para Keith Thomas es el secreto de una buena película de horror:
“Si tienes a alguien que sólo camina por un pasillo en un lugar que no conocen y algo salta, ese es un reflejo. Te asusta, pero no tiene ninguna profundidad. En cambio, cuando es alguien que nos importa, y alguien más entra a la casa, sientes esa emoción.
Y así, cuando pasan las partes de terror, tiene ese impacto que nos hace sentir: “¡Oh! Eso me puede pasar a mi” o “¡Me puedo imaginar eso!”
La Firma de Blumhouse
Blumhouse se ha destacado en los últimos años por ser los pioneros en “el terror elevado”, ya sea a través de cintas como ¡Huye!, El Hombre Invisible, The Hunt o Us, la compañía se esmera en que sus cintas de terror estén enraizadas en temáticas sociales. Y de acuerdo con Keith Thomas, la razón por la que ha podido alcanzar ese balance es gracias a que le da libertad a sus creadores:
“Creo que una cosa que hace muy bien [Blumhouse] es dejar a sus directores, escritores, la gente involucrada, contar la historia de la forma en la que la quieren contar
Y dejan que las decisiones creativas guíen, tanto como pueden, la trayectoria de lo que estamos haciendo. Claramente, trabajamos dentro de cierto presupuesto, pero creo que eso puede ser liberador.
Cuando estás obligado a tomar una decisión por razones presupuestales o algún aspecto de eso, eres más creativo. Tienes que ser más creativo. Blumhouse es genial haciendo eso, descubriendo cómo podría ser más efectivo”.
Todas las películas de Blumhouse tienen una visión diferente y Llamas de Venganza no es la excepción. ¡Ya la pueden ver en sus salas de cine favoritas!