El 10 de septiembre el mundo de la actuación sufrió una terrible pérdida con la partida de Diana Rigg a sus 82 años de edad a causa del horrible cáncer. Además de su memorable papel en Game of Thrones como Olenna Tyrell, la Reina de las Espinas, participó en On Her Majesty’s Secret Service como Tracy junto a George Lazenby y como Emma Peel/Lola en la serie británica The Avengers; además de haber ganado un Emmy por su aparición en Rebecca.
Para honrar su memoria, en Fuera de Foco nos dimos a la tarea de recopilar sus mejores momentos como Olenna Tyrell en Juego de Tronos. ¡Apostamos a que es uno de tus personajes favoritos! Y lamentamos mucho su pérdida… Nuestros corazones seriéfilos están rotos.
ADVERTENCIA: esta nota contiene spoilers de Game of Thrones.
Olenna Tyrell, mucho gusto
Indudablemente, uno de los mejores momentos de la abuela de Loras y Margaery Tyrell, es el primerito en el que la vemos. Recordemos que después de la Batalla de Blackwater, el heredero de Altojardín le pidió a Joffrey que contrajera matrimonio con su hermana; cosa que él inicialmente rechaza por estar comprometido con Sansa, pero finalmente acepta.
Poco tiempo después, al llegar a Desembarco del Rey, Olenna le pide a su nieta Margaery que invite a la pelirroja Stark a almorzar con ellas, cosa que a Sansa sorprende mucho porque no sabía por qué la chica que se casará con su exprometido tendría interés en hablar con ella. Al reunirse las tres, conocemos a la anciana Tyrell y una cosa nos queda clara: ella pone a su familia antes que a nadie.
Este es un grandioso momento porque conocemos a Olenna en plenitud: dura, brusca, sarcástica y engreída, a la vez que muy inteligente, meticulosa y planificadora. Desde esta primer escena nos damos cuenta del talento que Rigg plasma en el personaje y sabíamos que se convertiría en uno de nuestros favoritos gracias a su fiereza.
Sé un dragón
Olenna Tyrell es alguien que ha vivido un largo, largo tiempo. Esto significa que ha visto a muchos reyes sentarse en el Trono de Hierro y la conclusión siempre es la misma: no ha habido paz en Poniente desde hace muchos reinados.
En esta escena, Lady Tyrell está con Daenerys Targaryen en Rocadragón cuando la aspirante a reina le promete a la señora que Cersei Lannister iba a pagar por lo que le hizo a Loras y a Margaery, además de que le devolverá la paz a Westeros. Ante estas declaraciones, la exgobernante de Altojardín dice que la paz nunca ha perdurado… Bastante desesperanzador.
Para finalizar, le ofrece un consejo a la última Targaryen: «Todos los lores de Poniente son ovejas… ¿A caso eres tú una oveja? No… tú eres un dragón. Sé un dragón.» Con este momento aprendemos que la anciana está harta de mano blanda en el gobierno del país, ya que gracias a ello, lo ha perdido todo; Olenna Tyrell quiere que Daenerys Targaryen gobierne sin compasión, sin piedad y con mano dura.
Un árbol genealógico un tanto… confuso
Bastan únicamente 40 segundos para darnos cuenta de que Olenna Tyrell era un personaje sumamente carismático y nos resulta imposible no amarla. Todos sabemos que en Poniente, las uniones entre reinos se dan cuando un descendiente de una familia se casa con un descendiente de otra, así los hijos tendrán en sus venas sangre de ambos reinos.
Claro que esta mujer no iba a pasar de tomarse con humor esta situación. En la boda de Tyrion Lannister y Sansa Stark, Olenna le dice a sus nietos que la familia sufrirá cambios muy interesantes cuando los matrimonios empiecen a brindar frutos. El hijo de estos dos sería el sobrino de Loras al casarse con Cersei, él se convertiría en pradrastro del rey y también en su hermanastro, porque Margaery se casará con Joffrey; la madre del rey se convertirá en su hermanastra y el hijo de Joffrey con ella será el sobrino y el nieto de Loras… Pero eso no es lo más loco, ¡porque Loras (hermano de Margaery) se convertirá en el padrastro de ella!
A decir verdad, esta escena es fascinante, hilarante y, además, necesitas verla varias veces para acabar de entender lo torcido que sería la genealogía de las casas Lannister, Baratheon y Tyrell. Anda, vuelve a ver el video, por favor.
Cersei es… vieja
Esta es Olenna Tyrell en su máximo esplendor. Descarada, atrevida, orgullosa y protectora con su familia. Aquí la vemos dialogar con el hombre más poderoso de todos los Siete Reinos: Tywin Lannister, quien siempre, sieeeempre consigue lo que quiere.
En esta ocasión, lo que el cabeza de la familia más adinerada del mundo quiere es que su hija Cersei se case con Loras Tyrell, diciendo que es la única forma de limpiar la mancha en su nombre tras los rumores de sus «actividades nocturnas»; ¿qué le dice Olenna? ¡Le pregunta a la Mano del Rey si alguna vez él ha estado con un hombre!
Para alguien tan recto como Tywin, es insultivo que la señora le haga semejantes interrogantes, pero este se pone a temblar cuando ella pone sobre la mesa los rumores sobre Jaime y Cersei, diciendo que, si de manchas hablan, aquella es mucho peor que la homosexualidad; por lo que Tywin rápidamente asegura que todo son mentiras.
La última palabra de Lannister es que si Olenna no quiere casar a Loras con Cersei, el joven será nombrado miembro de la Guardia Real, por lo que no podrá tener hijos y el nombre Tyrell se perderá. A la sra. de Altojardín nadie la amenaza, así que le quita la pluma al león y la rompe. Se nos están quedando cortas las palabras para este personaje…
El que ríe al último…
ríe mejor. Nadie como Olenna Tyrell para darnos esta enseñanza. En sus últimos momentos, la matriarca partió como los grandes: con la última palabra. Es muy difícil que en Game of Thrones los fanáticos disfruten con las muertes de los personajes; pero en esta ocasión es inevitable no alabar a Olenna con la manera en la que perece.
Nadie es peor que Cersei Lannister, absolutamente nadie. Lo sabe Poniente, lo sabe Jaime y lo sabe Olenna; por eso todas las acciones de la señora están «avaladas» de cierta manera por la maldad de la reina. Ambas se han hecho mucho daño la una a la otra pero en esta escena descubrimos quién dio la estocada final, fue la Tyrell.
Para Cersei, lo peor que le pudo pasar en la vida fue perder a sus hijos, sobre todo al rey Joffrey; así que enterarnos después de tres temporadas que en realidad fue Olenna la artífice del envenenamiento del joven monarca, fue una muy gratificante sorpresa. Nadie mejor que la abuela para herir a Cersei de esa forma, además, le hizo un gran favor a Margaery evitándole ese marido.
Los últimos momentos de la vida de Olenna Tyrell fueron sublimes: magnífico diálogo con Jaime, confesión de sus crímenes y, sobre todo, con mucho estilo. Cabeza alta, orgullo intacto y satisfacción con cómo llevó a cabo su paso por el tablero del Juego de Tronos.
Diana Rigg fue una estupenda actriz que supo plasmar a la perfección su interminable talento en un personaje que reflejaba autoridad, irradiaba respeto y merecía honor; cualidades perfectas también para describir a la persona que nos deja vacío el corazón. En Fuera de Foco lamentamos mucho su pérdida y esperamos que este homenaje a su personaje sea recibido como una carta de amor a lo que fue su trabajo histriónico en una de las series más exitosas de la historia.
