Mabel Cadena nos contó la intensa preparación que llevó a cabo para su papel en Black Panther: Wakanda Forever
Mabel Cadena está a punto de hacer historia en el Universo Cinematográfico de Marvel. Su personaje, Namora, aparecerá como la prima y aparentemente fiel guerrera del Namor de Tenoch Huerta. Ambos mexicanos, junto con Josué Maychi, son los primeros latinos en aparecer de manera prominente en una cinta del MCU, y que además su cultura fue adaptada para ser representada de manera ficticia en este universo.
Sin duda, muchas personas escucharán que este “es el primer trabajo importante de Mabel Cadena”, pero en realidad tiene más de 10 años de trayectoria y ha protagonizado importantes producciones mexicanas, como Capadocia, Ingobernable, Hernán, o El Baile de los 41.
Lo que sí, es que ella nunca había estado en una producción de una magnitud tan grande como la de Black Panther, por lo que durante el podcast de Hablando de Cine Con nos contó cuáles fueron los retos de adaptarse a filmar en Hollywood.
La intensa preparación para Wakanda Forever
Mabel Cadena es una persona sumamente dedicada, ya que nos contó que además de estudiar actuación, también se metió a estudiar psicología y una maestría, “en caso de que el plan de la actuación no funcionara”. Por eso, ella contó que pasó 10 años sin tomarse vacaciones, desde que salió de la carrera. “Pero antes de comenzar a filmar Wakanda Forever, decidí irme a la playa una semana”.
Y vaya que lo necesitó. La primera sorpresa que enfrentó al llegar a Georgia a filmar fue darse cuenta de que tendría que pasar 9 meses ahí.
“Yo no estaba segura de cuánto tiempo íbamos a estar porque nuestro rodaje era menor […] Y aunque teníamos espacios para salir, regresar y ver a nuestras familias, yo preferí no hacerlo porque sabía que no iba a poder con las exigencias del trabajo si me distraía con eventos sociales”.
Mabel Cadena, Hablando de Cine Con
Entonces no se reencontró con su familia hasta diciembre de 2021, y aunque en un principio no lo sentía, poco a poco el aislamiento y la presión comenzó a pasarle factura. “El primer mes todo me salía bien y sentía que podía con todo. Fue después cuando empecé a sentir la presión de levantarme todos los días a las 6 am y comenzar a entrenar y luego al rodaje. Y es que lo tengo que decir, el equipo de Wakanda es férreo y muy disciplinado”.
Mabel Cadena tuvo una intensa preparación para su personaje, ya que su entrenamiento de buceo fue tan intenso que ahora aguanta la respiración durante 6:30 minutos. “De todas formas me duele el ego porque no rompí el récord de Kate Winslet [en Avatar]”. Winslet aguanta la respiración bajo el agua durante 7:14 minutos, pero Mabel Cadena está en las mismas ligas que Tom Cruise, quien soporta bajo el agua poco más de 6 minutos.
El punto de quiebre
Las largas jornadas de entrenamiento y rodaje, mezclado con el aislamiento de la pandemia y de estar en un lugar que no conocía, empezaron a afectarle meses después de estar en el trabajo. “Todos parecían que tenían muy claro que esas eran sus horas de trabajo y hasta ahí. De repente, no tenía a nadie con quién poder hablar o irme a tomar un café para despejarme, y por eso llegó un momento en el que colapsé mentalmente”.
Al final, hizo una amistad muy profunda con su asistente, Jessica, quien al también tener raíces mexicanas “entendió mi experiencia y las dificultades que vivía para adaptarme”. También le ayudó a grabar desde el monitor todas sus escenas bajo el agua, “para que pudiera estudiar mi cuerpo y mis expresiones. No quería demostrar que sólo nadaba bien, tenía que mostrar que vivía bajo el agua, así que estudiaba mucho mis movimientos para dar la sensación de que ese era mi hogar”.
Aún con toda su minuciosa preparación, Mabel Cadena nos contó que el primer día de la filmación, ella simplemente se paralizó. “Nunca había estado en una producción tan grande, con una pantalla verde. Si había trabajado con pantalla verde pero no con esa magnitud”.
“Mi escena era una pequeña parte de acción en donde tenía que saltar al agua y no podía hacerlo, estaba muy nerviosa. Así que usé lo que conocía: el lenguaje cinematográfico, para tratar de calmarme. Porque aunque mi cerebro me estaba saboteando, entendía lo que era ‘action’, ‘rolling’ y así”.
Mabel Cadena, Hablando de Cine Con
Al final, todo rindió frutos, ya que cuando terminaron el rodaje, la asistente de producción le dijo que “no tenían bloopers de ella”. A lo que nos contó: “claro que no iban a tener bloopers míos. Yo sólo me iba a equivocar si Ryan Cooler [El director] me decía que me tenía que equivocar”.
Una oportunidad que no se esperaba
Mabel Cadena nos contó que “desde niña siempre supe que quería ser actriz. De eso no había duda”. Sin embargo, su familia también le decía que tenía que estar consciente de que había ciertos personajes que simplemente no podía interpretar.
“Tenía un tío que me molestaba mucho y me decía: Vas a ser la próxima Patricia Reyes Spíndola. Y yo decía, bueno, seré la mejor Patricia Reyes Spíndola que me toque. Pero esos comentarios, tal vez no conscientemente, pero inconsciente, me daba un lenguaje de lo que podía aspirar a ser”.
Mabel Cadena, Hablando de Cine Con
Sin embargo, conforme avanzó su carrera de actuación, ella llegó a preguntarse qué más podía interpretar “no quiero ser solo la boxeadora, la sicaria, la carcelera. ¿Qué hago para no hacer sólo estos personajes?” Así, se dio cuenta que estaba trabajando solamente en una empresa, por lo que decidió abrir más mercado con otras productoras en México. “Una vez que empecé a buscar otros lugares y mi lenguaje hacia mi misma, lo que pensaba de mí misma como actriz y mis habilidades, me empezaron a llegar otro tipo de oportunidades”.
Por eso, nos contó que cuando audicionó para Wakanda Forever, ella realmente no tenía expectativas de quedarse con el papel. “Eso lo hago mucho. No audicionó para quedarme, audiciono como ejercicio para ver cómo puedo mejorar”. Así que mandó sus pruebas e incluso audicionó leyendo partes de sus diálogos en Náhuatl. Sin embargo, como tampoco dominaba el inglés, no pensó mucho en lograr obtener el papel.
Una vez que obtuvo el papel, el cual todavía le causa un poco de trabajo dimensionar porque nos confesó que “estoy en esta línea de sentirme merecedora, pero al mismo tiempo preguntarme por qué a mi”, cosa que sintió con mucha más fuerza durante su presentación en San Diego Comic-Con, en donde las emociones eran tantas que “hubo un momento en donde me hice bolita y lloré”.