Menos es más…
De la mano de Dan Gilroy, director de Nightcrawler, ha llegado a Netflix la nueva película de terror y comedia negra: Velvet Buzzsaw.
Estrenada el primero de febrero de este año, Velvet Buzzsaw cuenta la historia de una asistente de arte, que, después de encontrar las pinturas de un recién fallecido, empieza a experimentar cosas extrañas tanto en su vida, como en la de las personas que le rodean.
La película es protagonizada por Jake Gyllenhaal, Rene Russo, Zawe Ashton, Toni Collette y Natalia Dyer.
Lo bueno
La película cuenta con un reparto de primer nivel, por lo que claramente las actuciones son grandiosas. Hay que considerar que tanto Jake Gyllenhaal como Rene Russo ya habían trabajado con Dan Gilroy en Nightcrawler, y la verdad es que la mancuerna ha resultado muy positiva.
Visualmente la película es hermosa. El diseño de producción es exquisito y por sí mismo da un mensaje. El diseño de vestuario también es muy acertado y logra transmitir la esencia que cada uno de sus personaje posee.
El lenguaje cinematográfico también es muy acertado. El uso de planos muy abiertos hace que el diseño de producción tome aun mayor protagonismo en los planos, y los movimientos de cámara le dan un dinamismo que genera tensión.
Las pinturas que el personaje de Zawe Ashton encuentra realmente son tétricas, pero guardan consigo un grado de belleza que no hacen sentir forzada su inclusión en la película.
Lo malo
El mayor pecado que tiene la película es que, al querer abarcar tantas cosas, no consigue ser redonda. Si bien hay momentos muy interesantes que sí logran generar tensión, faltó todavía más. Hay momentos muy chistosos, pero también faltó más de ello. Y he aquí el problema: la película quiso repetir la fórmula de Evil Dead (Sam Raimi, 1981), pero definitivamente no lo consigue.
Otro punto negativo es la cantidad de personajes que tiene la historia. Sí, yo sé que mencioné que las actuaciones son muy buenas, pero el hecho de que la cinta tenga tantos actores de primer nivel, obliga a que cada uno tenga un momento importante; y aunque esto se logra, genera una sobresaturación.
Ahora, la decisión de hacer al personaje de Jake Gyllenhaal bisexual parece ridícula. No había ninguna necesidad de que su personaje tuviera una relación amorosa con el de Zawe Ashton. Se siente totalmente forzada, realmente no era necesario. Y aunque a partir de esta relación suceden algunas cosas que le aportan mucho a la película, creo que se pudieron haber conseguido los mismos resultados sin necesidad de llegar a una relación. El que el personaje fuera homosexual era perfecto, no faltaba nada más.
En lo bueno, mencioné el diseño de las pinturas protagonistas. Pero, para su mala fortuna, la decisión de hacer que estas pinturas cobren vida, les quita todo lo bello e inquietante que poseen.
Conclusión
Velvet Buzzsaw es entretenida y digerible. Por desgracia, no logra posicionarse como una cinta que pueda catalogarse como de culto. La trama y el casting lo tenían, el director ya había demostrado su nivel; sólo que en esta ocasión el querer hacer más, le dio menos.