Como cada año, el Tour de Cine Francés trae una comedia romántica entre su programa de películas. Esta vez se trata de Un nuevo comienzo, una historia sobre Diane (Karine Viard) y Alain (Franck Dubosc), quienes son una pareja de cincuenta años que se encuentran en medio de una crisis luego de que su último hijo abandona su casa para ir a la universidad, lo que por supuesto, significa que ambos han entrado en una nueva etapa de su vida al ya no tener la responsabilidad de criar a sus hijos.
En consecuencia, la pareja comienza a querer vivir otro tipo de experiencias y se preguntará si quieren permanecer juntos por el resto de su vida o, si lo más sano para toda la familia, es separarse y comenzar desde cero. Por esta razón, Un nuevo comienzo, no solo es una simple comedia romántica, sino una oportunidad de pensar en la complejidad de las relaciones humanas.
El amor después de cumplir 50
Un nuevo comienzo podría convertirse en un perfecto drama debido a la complejidad de la historia, pero en definitiva es una comedia sobre el amor después de los 50 años, en donde la pareja protagónica ha construido su vida alrededor de la familia, pero cuando los hijos deben emprender su camino, comienzan a experimentar una crisis, dado que jamás se habían imaginado solos en la casa y compartiendo el día a día.
Sumado a esto, Diane está afectada por los primeros síntomas de la menopausia que la hacen tener cambios de humor, además de que en su trabajo como periodista las cosas no marchan bien al ser reemplazada por personas más jóvenes. En contraste, Alain sigue teniendo una carrera como pianista muy exitosa, ya que parece que la edad no le juega en contra.
Lo anterior es un ejemplo de cómo muchas mujeres experimentan a nivel mundial una discriminación por su edad, mientras que los hombres los consideran más “experimentados” en su campo y, aunque es un problema ajeno a la relación, en realidad termina por afectarlos, ya que dicha situación solo provoca que Diane se sienta más a la deriva, mientras que su esposo vive de sus logros y se siente motivado.
Asimismo, Diane comienza a cuestionar si es normal que una relación ya no nos emocione después de tantos años de convivencia y, en dado caso que la respuesta sea sí, ¿Qué sentido tendría permanecer juntos? Es ahí cuando la pareja de Un nuevo comienzo decide separarse para, desde lo individual, tratar de resolver todas las crisis que rodea su vida y responder si es posible continuar juntos.
¿Las separaciones son necesarias?
Un nuevo comienzo también plantea la idea sobre que una separación no es precisamente algo negativo en una relación, sino una oportunidad de reflexionar sobre tus sentimientos y la vida que han construido juntos. Al final de cuentas, esto podría representar que ambos se reinventen y quieran volver a enamorarse.
Sin embargo, como toda decisión, no siempre resulta como pensamos, lo que al final nos hace darnos cuenta que tal vez las relaciones humanas sí tiene una fecha de caducidad y, como estamos en constante evolución, es posible que en cierta etapa de tu vida, ya no concuerden con la mismas personas. Por otro lado, Un nuevo comienzo, también es optimista a la hora de decir que, si bien no podemos tener los mismos gustos y personalidad por siempre, una pareja puede llegar a adaptarse en diferentes etapas de la vida, ya que al final, lo importante es no perder la individualidad y tener en cuenta que una pareja es un acompañamiento pero no tu vida entera.
Al final, Un nuevo comienzo, permite que a través de estos dos personajes y, en especial con escenas bastante divertidas, los/as espectadores/as puedan cuestionar ciertas prácticas de las relaciones amorosas ya que, inconscientemente, a veces solemos creer que nuestra pareja es definitiva y nos olvidamos que la vida está en constante cambio y probablemente el amor evolucione.
