Woody Allen, siendo Woody Allen, trae «Un día lluvioso en Nueva York»
Cuando piensas en Allen, curiosamente también piensas en la bella ciudad de Nueva York, y esta cinta no es la excepción, pues en ella es posible apreciar que el amor por Manhattan sigue intacto para el director.
La película está protagonizada por Gatsby (Timothée Chalamet), personaje de carácter bohemio, que Allen utiliza para seguir mostrando su álter ego, haciendo una crítica a la doble moral que se vive en la sociedad y en la industria del cine.
De igual manera, se presenta a Ashleigh (Elle Fanning), estudiante de periodismo, que junto con Gatsby, conformarán una pareja de jóvenes entusiasmados por pasar juntos un fin de semana lluvioso en la Gran Manzana.
Nada salió como lo planeado
Los problemas comienzan cuando Ashleigh, al tener que entrevistar a Roland Pollard (Liev Schreiber), un célebre director de cine, comienza a posponer los planes que tenía con Gatsby, quien se había dedicado a elaborar un detallado itinerario para conocer la ciudad.
Así, mientras Ashleigh se ve envuelta en la crisis existencial del famoso director, Gatsby se encuentra a un viejo compañero de escuela filmando una película para su clase, y es ahí donde conoce a Shannon, (Selena Gomez).
En Un Día Lluvioso en Nueva York, vemos como distintos acontecimientos harán que estos jóvenes comiencen a distanciarse, pero también harán que comience a cambiar su perspectiva sobre lo qué ellos creen de sí mismos y de la vida.
Un Viaje Introspectivo
Gatsby, a pesar de que es un joven al que no le hace falta nada, intelectual y es un audaz jugador de póker, pertenece a un grupo social con el que no logra identificarse. Y no puede escapar de una pregunta constante: ¿quién soy? Aquí, Shannon, con mucha sobriedad y frescura, será una pieza clave para que Gatsby continúe con ese viaje de auto-descubrimiento.
Por otro lado, el gusto de Ashleigh por los hombres mayores y gracias a su pequeño romance con el actor Francisco Vega (Diego Luna), harán que se cuestione hasta qué punto puede corromper sus propios ideales.
La forma en la que avanza por separado la historia de Gatsby y Ashleigh y despúes los vuelve a unir da una pauta para reflexionar; esta bien escuchar a otros y abrirse ante un mundo de posibilidades, pero como le sucedió a Gatsby, es mejor escuchar lo que hay dentro de nosotros mismos.
¿Más de lo mismo?
Fue fácil apreciar en sala la manera en que las personas siguen disfrutando del sello distintivo que tiene Allen, el amor por el arte, la manera de crear un clima que envuelve al espectador, un clima que ya se conoce: lluvia, líos amorosos, la ciudad de Nueva York; las platicas intelectuales y buenos diálogos llenos de sátira y de ironía.
Un Día Lluvioso en Nueva York ha recibido varias críticas debido a que parece que Woody Allen se reusa a salir de su zona de confort. Pero el director explota su estilo característico al máximo para entregar una gran muestra de arte.
Veredicto
A pesar de que le director tiene la forma de contar historias un tanto inverosímil, en Un Día Lluvioso en Nueva York, la buena selección de su casting trae a pantalla una historia profunda y muy divertida.
Hay que destacar que esta película se vio opacada por diferentes factores: la demanda por parte de Woody Allen a Amazon Studios por incumplimiento de contrato, las declaraciones de Dylan Farrow sobre el director en movimientos como el #MeToo, y comentarios de artistas como Timothée Chamalet, quienes expresaron su arrepentimiento por haber trabajado con él. Pero Un Día Lluvioso en Nueva York ha logrado levantarse por sí misma y ha tenido una buena recepción en diferentes eventos, como el Festival Internacional de Cine de Morelia y la67 Muestra Internacional de Cine de la Cineteca Nanional.
¡Y claro!, no esta de más mencionar que las actuaciones de Selena Gómez y Elle Fanning, llenan la pantalla de frescura, un gran acierto por parte de este director.