Hace unos días llegó a Netflix una nueva serie original, protagonizada por uno de los personajes más icónicos de la cultura pop japonesa, Ultraman.
Los más jóvenes no tendrán ni idea de quién es este personaje, pero sus padres o tíos sí lo ubicarán perfectamente. Ultraman es un superhéroe japonés que fue muy famoso en los años setenta y ochenta, al que probablemente muchos conocimos por algunas repeticiones que se transmitieron en televisión durante los años noventa.
Y aunque Ultraman no ha desaparecido por completo, ya que todavía sigue presente en diversos medios, se ha ido quedando únicamente en Japón. Así que podemos considerar que éste es un intento de revivirlo ante el resto del mundo.
¿Quién es Ultraman?
Los Ultraman son una raza de extraterrestres gigantes que toman prestado el cuerpo de un humano para poder enfrentarse a la invasión de otros monstruos que vienen al planeta para destruirlo. En este sentido, se parecen mucho a los Power Rangers.
La historia básica
Hayata, un miembro de la patrulla científica, ha sufrido un accidente en el cual pierde su vida, por lo que un Ultraman decide resucitarlo para que éste lo ayude a combatir a los alienígenas.
Una secuela
Han pasado ya varias décadas desde que Ultraman dejó la tierra y a Hayata. Su hijo ha heredado los poderes del guerrero de la luz, y ahora con una nueva tecnología se convertirá en el nuevo defensor de la tierra.
Esta serie es una continuación directa de la serie clásica de los 60 que tal vez algunos de ustedes o sus padres conocieron. Se salta las secuelas posteriores, pero incorpora algunos de sus elementos, como a los personajes de Moroboshi y a otros Ultraman, aunque adaptándolos a nuestro tiempo.
Modernizando la leyenda
Es verdad que esta nueva versión, en su intento de reinventarse, toma “prestado” muchos elementos de otras series o personajes. El origen de los poderes, por ejemplo, es más tecnológico, y está muy cerca del estilo del Ironman de Marvel.
Profunda y realista
La temática también evoluciona. Ya no tenemos una historia simple en la que todos están en paz, aparece un monstruo, llega Ultraman lo vence y ya. Ahora se tocan temas mucho mas serios, como el legado entre padres e hijos, la madurez, la desigualdad y la discriminación. Esto hace que los espectadores tengamos mucho más que ver que una serie simple de acción.
Acción dinámica
Ultraman no descuida el que debería ser su mayor atractivo, la acción. Aquí ya las batallas no son las clásicas en las que un Ultraman gigante se enfrentaba a extraterrestres igual de colosales. De hecho, son más rápidas, pero están bien estructuradas. Incluso hay algunas que resultan bastante extremas.
Sobresaliente en lo visual
Sólo hay que poner atención al detalle con el que se han realizado el CGI. Desde el diseño de personajes y escenarios, hasta todo lo relacionado con las explosiones y luces, los efectos son de primer nivel; justamente lo que se esperaría de una serie de Netflix.
A pesar de que Ultraman ha estado ausente mucho tiempo de las pantallas occidentales, ésta es una serie a la que definitivamente hay que darle una oportunidad.
