Los cabos finalmente se están atando, y mientras nos acercamos al desenlace, más emocionante se vuelve True Detective. Lo que ha hecho hasta ahora la Temporada 3 ha sido alucinante, con actuaciones soberbias y una trama exquisita para los que gustan de investigaciones de asesinatos.
En el capítulo 7, titulado «The Final Country«, dejaron claras algunas soluciones a conjeturas pasadas, preparando el terreno para lo que tiene que ser un final emocionante y que, espero, tendrá un twist que nadie se imagina hasta ahora.
Eso sí, si tiene una resolución sin mayor sobresalto, igualmente estoy seguro que será un cierre digno para una producción que, desde ya, pinta como la gran ganadora en ceremonias de premios. Y al ser HBO y con nombres pesados de la industria, es casi una certeza.
Justicia con sus propias manos
Aterrizando al capítulo, lo que sobresalió fue el hecho de que, en efecto, el tal Harris James estuvo involucrado en el secuestro de los niños. Este hombre trabajaba para la familia Hoyt, magnates que encierran intenciones malévolas y deplorables. O al menos todo parece indicar eso.
Luego de que el cuerpo de Tom fuese descubierto -en el 90- en una torre de agua, tanto Roland como Wayne se ven destrozados, ya que la escena refleja un suicidio. Roland siente más culpa de la fatalidad por su cercanía al señor Purcell, mientras que Wayne no se conforma con esta coincidencia y sigue determinado a trabajar en el caso.
Eventualmente, Hays logra unir cabos que denotan que Harris viajó a donde estaba Lucy dos días antes de que muriera por una supuesta sobredosis, además de otras evidencias que lo situaban en momentos específicos del caso.
Esto es suficiente para dirigirse a donde está Roland y enseñarle que deben ir inmediatamente a buscarlo, pero a su manera, «como en los viejos tiempos». Primero West no quiere y cree que es una mala decisión, pero se deja convencer por el ahínco que presenta el que en 2015 no sabe manejar sus recuerdos.
Lo interceptan en la carretera, lo llevan a un viejo granero y lo amarran a un poste. Golpes, patadas y gritos llenan una secuencia con una iluminación muy bien producida; hasta que Harris intenta engañarlos y robar una pistola, lo que genera una reacción en Roland que le dispara hasta matarlo… Momentos después, entierran el cuerpo en el bosque y regresan como si nada hubiera ocurrido.
La tragedia Hoyt
Otra pieza clave de información que obtuvimos de este capítulo, que tuvo viajes a las tres líneas de tiempo de forma constante, es que una hija de los Hoyt tenía como «guardián» a un hombre negro con un ojo blanco. Sí, igual al que miró Amelia cuando hacía una lectura de libro en los 90.
Isabelle Hoyt sufrió la pérdida de su hija y de su esposo, lo que tendría sentido si fuese ella parte de la maquinaria que secuestra niños. O niñas, en ese caso son dos motivaciones distintas las que están en juego aquí. A partir de la tragedia, ella quedó bajo el resguardo del Señor June o Señor Watts (el del ojo blanco), según información obtenida por Amelia después de seguir una pista de Lucy y su primo O’Brien.
Suspenso e incertidumbre
El capítulo cierra en la línea de los 90. La noche anterior, Wayne quemó sus ropas en un bote de basura a las afueras de su casa, como queriendo expiarse del asesinato en el que participó. Al día siguiente, bastante nervioso y con ganas de que Amelia no se altere, recibe una llamada de peligro… El señor Edward Hoyt.
Éste le dice que desea tener una plática en privado para discutir lo ocurrido con Harris James. Wayne se asoma por la ventana y mira que hay dos carros lujosos en las afueras de su vivienda, por lo que sabe que tiene que ir; además, Hoyt sutilmente lo amenaza con que si quiere puede entrar.
Wayne se despide de Amelia y le pide que no se preocupe, mientras aborda ese viaje que desconocemos hasta dónde lo llevará exactamente, pero que seguramente tiene que ver con el por qué en 2015 es un hombre que ha olvidado tanto…, o que ha preferido olvidar.
En esa línea de tiempo hay que destacar el guiño hacia la primera temporada, con los detectives interpretados por Matthew Mcconaughey y Woody Harrelson. Si recuerdan, el asesino que ellos perseguían tenía que ver con una red de pedofilia, misma que se sugiere pudo haber participado en este caso Purcell.
Estamos a un episodio de cerrar esta gran Temporada 3 de True Detective y no puedo estar más emocionado por conocer el final.