Nadie es una apuesta que se sabe sentir fresca anteponiéndose al cliché y con un feeling de John Wick que es gratamente bienvenido.
Todos estamos hartos de la rutina. El estar atrapados en una vida en la que la cotidianeidad se sienta más bien como un Día de la Marmota es algo que puede derivar en crisis existenciales, depresiones o algunas otras indeseables situaciones. ¿La solución? Un hobby, el salir de la zona de confort o, como es el caso de Hutch Mansell, retomar tu antigua vida.
Lo curioso es que esa vida que ha quedado atrás era la de un talentoso (porque aún para matar se necesita talento), habilidoso y rocoso personaje con el cual no nos quisiéramos encontrar ni en nuestras peores pesadillas.
Con hasta cuatro retrasos en su fecha de estreno (algo a lo que, desafortunadamente, ya nos estamos acostumbrando), por fin ha llegado Nadie (los juegos de palabras pueden ser infinitos) a salas de cine en nuestro país. Si tus intenciones son pasar hora y media de tu vida sumido/a en sangre, acción y entretenimiento puro; esta puede ser una gran opción para ti.
Abandonando el cliché del cine de acción
Es importante saber a lo que se enfrenta un espectador cuando ingresa a la sala de cine ( es fascinante para nosotros el darnos cuenta de que cada vez más rápido podemos frecuentar nuestro espacio favorito de nuevo) a ver a Nadie: violencia, sangre, inverosimilitud (de la buena), a un curioso héroe y los (no tan típicos) rusos que son malos malotes. ¿No es como todo lo demás que hemos visto dentro del cine de acción? Sorpresivamente, no lo es. ¿Vale la pena verla? Ya te aseguramos que sí.
En Nadie conocemos a Hutch, un padre de familia no tan respetado por ellos (potencial cliché, que no lo termina siendo) con un empleo que no disfruta (potencial cliché, que no lo termina siendo) atrapado en una vida que parece repetirse calcadamente semana a semana (potencial cliché, que no lo termina siendo) hasta que un evento que pone la vida de su familia en peligro (cof, cof… con una pulsera de gatito de por medio) lo hace volver a la vida por el medio que más domina: el de lanzar puñetazos a diestra y siniestra.
Los paralelismos con, al menos la primera, John Wick están ahí y ni siquiera pretenden esconderse; ya que son Derek Kolstad y David Leitch (junto con Bob Odenkirk y otros más como Tobey Maguire), los mismos detrás del ya fenómeno del género de acción protagonizado por Keanu Reeves. Aún así, en Nadie no se busca ser «una cinta tipo» del usual inquilino de una habitación en el hotel Continental.
Es por méritos propios con los que Nadie se sostiene por sí sola y es una cinta absolutamente entretenida en la que el mismo Kolstad (encargado del guion), el director Ilya Naishuller y, por supuesto, Bob Odenkirk (con un fantástico Christopher Lloyd por momentos) nos regalan un motivo más para volver a la sala de cine a pasarla bien.
¿Abogado de día, matón de noche?
Aquí definitivamente no veremos a Saul Goodman, pero aprenderemos a querer a Hutch Mansell como lo hacemos con el irreverente abogado que labora en Nuevo México. ¿Quién hubiera dicho que aquel joven que hacía sketches con David Cross por allá a finales de los 90s (Mr. Show) y que después sería un favorito de la audiencia televisiva gracias a su papel en los tribunales tenía madera para ser una estrella de acción? Muy grata sorpresa es la presencia de Odenkirk en pantalla.
De hecho, como dato curioso, la película completa surge a partir de una idea que tuvo Bob después de sufrir un allanamiento de morada en la que él atrapó a los delincuentes en su sótano; ya que le frustró la manera en la que las autoridades lidiaron con el asunto y pensó: «¿Qué hubiera pasado si yo mismo me hubiera encargado de ellos siendo un completo badass?» Quién sabe cuántos años después, tenemos la respuesta como una aportación que vale la pena en el séptimo arte.
Bob Odenkirk entrenó por dos años para realizar esta película de la manera más convincente posible (y se nota); realizando ejercicios de acondicionamiento físico y algunas artes marciales para dotarle a Hutch ese aspecto convincente de que tiene el potencial de romperte cada uno de tus 206 huesos. También, el papel protagónico le calza a la perfección porque, simple y sencillamente, Odenkirk tiene la cara de un tipo amable… Ideal para interpretar a las dos caras de la moneda. Definitivamente, Bob es la estrella de la película… ¿Y una nueva cara de acción?
El resto del elenco pasa a un segundo plano, aunque con cumplidoras participaciones también. RZA y Christopher Lloyd tienen momentos para brillar y el villano interpretado por Aleksey Serebryakov intimida a ratos pero sin ser espectacular. Connie Nielsen no tiene mucho que hacer, al igual que el resto de la familia (con la pequeña de casa como la probable excepción) pero, a pesar de no ser tan memorables, contribuyen a que el largometraje fluya sin restarle a la trama.
¿Siguiendo una fórmula?
Necesitamos urgentemente que los productores nos confirmen o desmientan si Nadie y John Wick suceden en el mismo universo, ya que visto lo visto, nos comemos las uñas al pensar que podríamos ver a Hutch y a John peleando codo con codo (¿o el uno contra el otro?). Esto es gracias al gran trabajo que hacen los implicados en el proyecto.
En su onceavo crédito como director, Ilya Naishuller (director ruso) logra que Nadie no se sienta como el cliché de la película de acción que tiene cansado a más de uno. Por supuesto, lo mismo sucedió allá por 2014 cuando John Wick sorprendió al mundo, pero es que hay una línea muy delgada entre hacer al personaje todopoderoso y hacerlo invencible; cosa que en Nadie se logra muy bien y es esa la razón por la que sea disfrutable. (No podemos decir más para que sea igual de gratificante para ti también)
Por el apartado de la estructura narrativa, Kolstad abandona la narrativa del viaje del héroe porque solamente hay una cosa clara: nuestro protagonista no va a perder y no va a ganar nada haciéndonos creer que lo va a hacer. Esto plantea una cuestión muy interesante para el espectador: ¿puede uno disfrutar de una película de acción en la cual sienta que el héroe no está en peligro nunca? La verdad es que sí, y eso es lo divertido.
Claro que vemos a un Hutch herido y vulnerable, pero como en este tipo de cintas los héroes siempre ganan, la peli no te intentará engañar. Así que tú relájate, confía en Hansell y, sobre todo, diviértete con los golpes.
Mención aparte para el apartado musical que combina un buen score original con un soundtrack lleno de canciones clásicas, reconocidas y populares que, combinados con una buena dosis de acción, hacen que Nobody sea una película de acción redonda.
Por último, te dejamos la opinión de Gaby sobre la cinta para terminar de convencerte para darle una oportunidad a Nadie se abrirse el camino a puñetazos a tu sala de cine más cercana.