«Madre sólo hay Dos» es una prueba más de la ironía en la audiencia mexicana: es todo un éxito a costa de reacciones en su mayoría negativas.
Las producciones mexicanas siguen llegando a la plataforma de Netflix, convirtiéndose enseguida en tendencia por varios días (incluso semanas completas). Sin embargo, las quejas de este tipo de tramas que son tan repetitivas, forzadas y aburridas siempre salen a relucir en redes sociales.
¿Qué deben hacer los creativos mexicanos para tener contenta a la audiencia? Si hay tanta variedad en gustos y muchos dejan claro que éste no es su favorito, entonces cómo le hace el «género cómico, melodramático, telenovelesco mexicano» donde se encuentran este tipo de series y películas nacionales, para que al final cumpla con su objetivo: ser visto por millones de personas. Los números no mienten, por muy mala que sea y muchas críticas negativas que existan, siempre son de lo más visto en los estrenos.
Pero en esta ocasión, ¿Por qué «Madre sólo hay Dos» logró posicionarse entre las más vistas? Acá te contamos un poco sobre ello.
Una Confusión es la Causante de la Peculiar Historia
La trama gira alrededor de Ana (Ludwika Paleta) y Mariana (Paulina Goto), dos mujeres con estilos de vida completamente diferentes y que por azares del destino terminan dando a luz en el mismo hospital. Después de unos meses, ambas son notificadas de que sus bebés fueron intercambiados accidentalmente al nacer, por lo que deben cambiarlos para que estén con la mamá correcta.
Este suceso, sumado al gran cariño que le tomaron al bebé con el que en un principio llegaron a casa, las lleva a tomar medidas por el bien de sus hijas. A pesar de no tener nada en común y de no soportarse la una a la otra, elaboran un plan para adaptarse a su nueva realidad y así construir una familia muy peculiar. Claro, sin imaginar que descubrirán secretos, dándose cuenta que entre ellas hay más conexión de lo que parece.
Más de la Misma Fórmula Mexicana
La serie no aporta nada nuevo a lo que ya se ha visto una y otra, y otra vez en un producto mexicano. Una comedia básica que llega a lugares muy comunes en el cine mexicano: la «familia perfecta» que no resulta tan perfecta, la irresponsabilidad de los jóvenes, la indecisión de los protagonistas, el drama de las parejas. La importancia de la amistad, el aprendizaje y experiencias. El estigma entre el rico y el pobre.
Pero eso no es todo, la serie se tropieza también al momento de tratar otro tipo de temas más actuales, como la maternidad y la paternidad, la comunidad LGBT,. La libertad de creencias, los conflictos de pareja. Y es que trata de explorar tantos temas, pero no logra cuadrarlos bien con la historia personal ni en el desarrollo de sus personajes. Dando como resultado mensajes conflictivos e ideas problemáticas sobre lo que buscaban explorar.
Además, en Madre Sólo Hay Dos, a pesar de que se está contando una historia inusual, tiene el mismo toque característico de cualquier capítulo de estos programas de televisión abierta que te intentan dejar una enseñanza para que aprendas con el ejemplo.
Entonces… ¿Por qué el éxito de Madre Sólo Hay Dos?
Madre Sólo Hay Dos sabe utilizar los clichés para convertir una historia extravagante en algo no tan ridículo. Claro, sin dejar a un lado que la historia retrata un caso extremadamente raro y muy poco probable en México, de esos que pensamos que sólo suceden como comedia. Pero desafortunadamente, la negligencia médica y sus consecuencias son más reales en este país de lo que quisiéramos aceptar.
Pero al final de cuentas, como sucede en las producciones mexicanas, cumple con lo que otras producciones comerciales exitosas han presentado y que de manera inexplicable gustan a una gran parte de la audiencia.
Si «Todos» odian estás producciones, ¿Por qué permanecen en tendencia por tanto tiempo?
«Madre sólo hay Dos» ha desatado críticas muy negativas en la comunidad, contrastando con quienes se atreven a defenderla. La realidad es que lo único que podría parecer atractivo –si es que logras terminar la serie– es su final, aunque tampoco es cosa del otro mundo dejar abierta la respuesta a las interrogantes más importantes de la historia.
También es cierto que series como esta, ofrecen una alternativa a las buenas producciones y gran variedad de contenido que llega a todos los servicios de streaming con los que contamos actualmente –si es que alguien se queja de eso– o por qué no, simplemente como un distractor para los menos exigentes.
Quizá la verdadera respuesta está en que es la curiosidad por ver el «ahora con qué salieron» o será probablemente que hay una especie de placer culposo por las películas y series mexicanas… lo que hace que producciones de este tipo logren mantenerse en tendencia.
Pese a todo, se ha mantenido en los primeros lugares del top de popularidad en Netflix e incluso ya está confirmado que «Madre sólo hay Dos» contará con una segunda temporada.