El Precio de Educarlos es un título en MAX que conectará con una audiencia sumamente amplia. Basada en la cinta francesa “Mes très chers enfants”, la historia se centra en la pareja Rebolledo, interpretada por Joaquín Cosío y Angélica Aragón, cuyos hijos ya crecieron y están sumamente distraídos como para poder asistir a las fiestas familiares.
Abrumados por ello, la divertida pareja decide fingir que ganaron la lotería para que sus dos hijos: Pali (Michelle Rodríguez) y Marcelo (Ianis Guerrero) vuelvan a casa, y lo hacen desatando una serie de infortunios, pues ahora buscan darse una vida de importantes herederos.
En Fuera de Foco, tuvimos la oportunidad de platicar con Joaquín Cosío e Ianis Guerrero sobre por qué El Precio De Educarlos es una exploración de México y las diferencias generacionales muy interesante.
El Precio de Educarlos: Una exploración sobre el paso del tiempo
“Creo que hay que darle mucho mérito a (el director) Emilio Portes. Fue su visión y la forma en la que quería contar la historia la que nos ayudó a entender nuestra dinámica y a nuestros personajes” nos aseguró Joaquín Cosío, quien se negó a ver la historia original antes de prepararse para su papel. “Esta película no estaba pensada como una adaptación fidedigna. Se tomó la idea, el concepto, pero el desarrollo fue completamente diferente”.
“Mes très chers enfants” ocurre en vísperas de navidad, mientras que El Precio de Educarlos hace que Jorge (el personaje de Cosío) cumpla el 10 de mayo, el mismo día en que se celebra el Día de las Madres en México.
Cosío alabó el gran trabajo de Portes “para adaptar muchos de los detalles culturales de Francia a México, como el sistema de lotería, cómo reaccionarían los hijos a sentirse ganadores y las fiestas, porque de cierta manera nosotros, como mexicanos, entendemos las fiestas de manera muy diferente”.
Para Ianis Guerrero, lo que hizo de verdad única a la adaptación fue la dinámica que lograron crear en el set. Junto con Michelle Rodríguez, los cuatro protagonistas construyeron poco a poco una dinámica en el set que se sentía “familiar y acogedora, como una verdadera familia mexicana”.
“Es muy interesante poder aprender de actores como Joaquín y Angélica, pero también tener el espacio para proponer y crear. Michelle es divertidísima e hicimos una gran mancuerna, y junto con el peso y experiencia de Joaquín y Angélica, nuestras interpretaciones se fueron complementando.
El punto era contar de forma honesta cómo los hijos a veces no entienden lo que sienten sus padres cuando comienzan a ganar más independencia, y juntos logramos hacer esa exploración de forma muy divertida”.
Y así, El Precio de Educarlos ofrece una conmovedora historia que seguramente resonará con muchas personas de la audiencia mexicana. “Pero el hecho de que pueda llegar a otros territorios, poder mostrar esa parte de México, es emocionante y uno de los grandes beneficios que nos dan plataformas como MAX” opinó Guerrero.
El Precio de Educarlos: ¿Un trabajo fácil cuando todos están en sintonía?
Joaquín Cosío confesó que él está “muy feliz en estos momentos” por el estado de su carrera y las oportunidades que recibe. “En esta ocasión, compartir pantalla con Angélica Aragón, que tiene una técnica, un trabajo, una preparación tan inspiradoras, hizo que todo el proceso fuera extremadamente fácil”.
“Fue muy bello interpretar a una pareja que se lleva muy bien y que de cierta manera están en el mismo barco. Porque así, juntos logramos hacer una mancuerna cómica que contrasta con nuestros hijos, y que creo que produce situaciones muy entretenidas”.
Joaquín Cosío, Fuera de Foco
Para ambos actores, la química y el compromiso que todos tenían en el set “es un testamento de lo que se puede lograr cuando tiene libertad creativa, pero una visión clara de la historia que se quiere contar”. Por su parte, Ianis Guerrero estaba muy emocionado de “poder hacer un trabajo de mesa extenso y preparar a un personaje que fuera divertido y resonara con la audiencia”.
El resultado de El Precio de Educarlos es que logró crear una historia ligera, divertida, pero con un humor que se siente conmovedor y real. Ya está disponible en MAX.