El Club de los Insomnes

¿Qué historias ocurren en la madrugada en un minisuper?

SEGURO TE SABES ESTA HISTORIA

El Club de los Insomnes (Que por alguna extraña razón es más fácil de encontrar como “El Refugio de los Insomnes”); es una película mexicana independiente, en la que comparten el crédito de director Joseduardo Giordano y Sergio Goyri Jr.

Ésta es una de esas películas que has visto más veces de las que recuerdas; forma parte de esa triste zona gris donde las cosas no son ni buenas ni malas. Se dice que una película es el 1% de la vida que vale la pena contar; esta película, lamentablemente forma parte del otro 99%.

¿De qué va «El Club de los Insomnes»?

En ella, Estela, Danny y Santiago compartirán sus insomnes noches; y entrelazarán sus tortuosas vidas con un minisúper que abre 24 horas, como pretexto y punto de reunión.

Danny es la encargada del minisúper; una chica aficionada a la fotografía, de la que – spoiler alert –  no sabemos nada más durante la película. Santiago es un godínez; de quien podemos ver varias veces su recurrente sueño sobre un estacionamiento, y una puerta de luz que no se atreve a cruzar. Finalmente, Estela enfrentará las dudas y reveses de estar embarazada de un hombre que la niega y la ignora.

Lo Bueno y lo Malo

Cuando se dice que la película no es mala, se quiere decir precísamente eso; que los aspectos técnicos están bien: La foto, la edición, la música, el sonido, etc. Incluso las actuaciones cumplen, pero hay algo que no termina de convencer. Y no, no es que el único departamento donde quedan a deber, sea el de maquillaje, porque ninguno se ve desvelado nunca. Es otra cosa, en este caso, los personajes, que aunque son genuinos, auténticos, incluso únicos; los directores no logran que nos interesemos en ellos.

Los Integrantes del Club

Ninguno de los tres logra desarrollarse. Se encuentran en el mismo punto al principio y al final, justo como son descritos en la sinopsis. Y cuando – spoiler alert – llegan a suceder cambios en sus vidas; no son porque ellos hagan algo al respecto, sino porque siguen en un camino recto, en la dirección a donde sospechábamos que acabarían desde que los conocimos.

Son personajes con muchos deseos, con muchos conflictos, pero que no avanzan a través de ellos. Ninguno de los personajes es memorable, de alguna manera los directores lográn que los casuales compradores del minisuper: el “diablo”, las “vampiras”, los “duendes”, la “momia” o los “artistas”; sean igual de interesantes, o intrascendentes, que los personajes principales.

El fondo de la Película

Es muy difícil hablar de una película así, porque como se mencionó primero, es equiparable a ese 99% de nuestro día que no contamos; y que por ende, olvidamos.

¿Qué se puede escribir de una película de la que no hay nada que decir, o se dice todo en la misma sinopsis? Ni siquiera se puede decir que esté mal ejecutada, es una historia que sólo puede ocurrir aquí y ahora. La premisa es buena, la moraleja también.

Incluso la idea envuelta en el tagline: “La vida sucede cuando el resto del mundo duerme” está clarísima, y agotada. Desde el primer acto, se usa como una metáfora de que hay que salir del letargo, del sueño, y de la zona de confort; o en el caso de los personajes: atravesar esa puerta, volvernos fotógrafos, y decidir qué hacer con nuestro futuro hijo.

Pero los personajes no están ni despiertos ni dormidos, las cosas apenas las hacen; las cosas simplemente les pasan.

En Resumen

En el afán de transmitir lo que provoca la película; contaré mi experiencia en el cine: éramos 5 personas en la sala, la tarde del sábado de estreno, y 2 de ellas se salieron a la hora de comenzada la función. Al final, los 3 que quedábamos salimos como los personajes; como si no hubiéramos dormido en varias noches.

Le platicaba a otro colaborador de Fuera de Foco que no me gusta hablar de una película con las palabras “No es ni buena ni mala” porque son extremadamente ambiguas; pero que tenía que hacerlo esta vez, no por las palabras, sino por el “nah” que implica decirlas.