Nuestro anti-héroe favorito está de vuelta
Ryan Reynolds vuelve a interpretar a Deadpool, personaje que conquistó a la audiencia, crítica y la taquilla con su primera cinta. Pero ¿era realmente necesaria una secuela? La respuesta es que sí. A pesar de que existía gran inquietud por parte de los fans —sobre todo tras rumorarse en varios sitios que la segunda entrega era un desastre y que seguir explotando al personaje era un error— pero la verdad es que la cinta es grandiosa.
Antes de hablar de la película, quisiera aplaudir todas las campañas publicitarias que están haciendo alrededor de la película porque son grandiosas.
Deadpool 2 es todo lo que prometía ser. Los personajes —tanto nuevos como viejos— tienen una química excepcional y en ningún momento salen de contexto. Aunque… eso sí, habrá uno que muy probablemente te incomode un poco al inicio. Aunque al final no importa mucho; ya que tanto la película, como los protagonistas son irreverentes y mantienen el toque cómico que los caracteriza.
La historia
Más allá de las bromas pesadas, las escenas de acción y la brutalidad de ciertas escenas, Deadpool 2 es una película familiar. —Y no, con esto no nos referimos a que puedan ir a verla los niños, sigue siendo clasificación R— De hecho, el mismo Deadpool te lo explica desde el inicio: Wade Wilson está buscando una familia, un lugar al cual pertenecer. Y de eso trata la historia, de explorar el lado humano del personaje.
Sin hacer muchos spoilers, ni indagar a profundidad en la historia, sucede lo siguiente…
Deadpool es despojado de todo lo que ama, se siente solo y vulnerable. Para su desgracia, (o nuestra fortuna) él no puede morir. Por más que intente suicidarse o reciba cualquier clase de daño, simplemente no puede morir; lo que sí está muerto es Wade Wilson por dentro; se encuentra destrozado. En su miseria, es encontrado por Colossus, quien lo rescata y lo lleva a la mansión de los X-men y es reclutado como «aprendiz». Posterior a eso, en una misión que parecía sencilla, conocemos al villano de la cinta; el cuál es un niño mutante que busca venganza.
Cable y la X-Force
La misión de Wade será rescatar a Russell Collins (el niño) de Cable, quien aparentemente quiere matarlo. Cable es un mercenario del futuro que viaja por el tiempo tratando de encontrar a Russell para matarlo; debido a que asesinó a su familia. Wade ve salvación en el alma del chico y trata de hacerlo entrar en razón; pero se da cuenta de que no puede con Cable solo y decide armar un equipo para ir en busca de él.
En el proceso ocurren muchas tonterías y otras cuantas batallas épicas, llenas de humor y CGI. Cable sin duda se vuelve en lo mejor de la película; es un personaje intrigante, del cual siempre quieres saber más y quieres seguir viéndolo reventar cabezas. —Definitivamente es la media naranja de Deadpool—
Si bien, varios de los integrantes de la X-Force son solo un chiste, hay algunos que destacan; el cual es el caso de Dominó. La chica se roba la pantalla en varias ocasiones y da fluidez a varias escenas. Obviamente utilizando su «superpoder» como recurso para la trama y voltear todo a su favor sin la necesidad de que tenga sentido.
¿Supera a su antecesora?
A mi en lo personal me gustó más. El hecho de que supieran aprovechar todos sus recursos de una buena manera hace la historia más entretenida. Está infestada de fan service y como lo dije; cada personaje aporta algo bueno y esas bromas pesadas por parte de Deadpool son todavía mejores. Cómo era de esperarse; Ryan Reynolds en sí, es uno de los principales objetos de burla de la Deadpool, lo cuál al final nos entrega lo que podría ser La mejor escena post-créditos de todos los tiempos.
Una cosa que si sorprende, es el tiempo en el que Ryan Reynolds sale en pantalla sin máscara; lo vemos más tiempo con el maquillaje y eso probablemente tiene que ver con la exploración del lado humano del personaje.
En conclusión…
Si bien tiene uno que otro tropiezo, y el villano termina dando más ternura que miedo, Deadpool 2 es lo que esperábamos y nos deja con hambre de ver una secuela de X-Force. El hecho de que ahora Deadpool tenga —literalmente— el tiempo y suerte de su lado, seguro harán que las cintas por venir sean aún más alocadas.