Black Panther: Wakanda Forever logra ser una película conmovedora que se enfoca en proceso de duelo y da lugar a nuevos superhéroes y villanos
Después de una inestable Fase 4, Marvel presenta uno de los proyectos más esperados del año, Black Panther: Wakanda Forever. La secuela de una cinta que hizo historia por ser la primera película de superhéroes nominada a los premios Oscar en la categoría de Mejor Película. Por ello, las expectativas de su regreso son altas, sumado a la pérdida de su protagonista Chadwick Boseman, quien falleció en el 2020, y dejó un vacío en sus fanáticos/as que ahora esperan encontrar una historia que reafirme su legado.
La franquicia trae de regreso al elenco original que incluye a Letitia Wright (Shuri), Angela Bassett (Ramonda), Lupita Nyong’o (Nakia), Danai Gurira (Okoye) y Winston Duke (M’Baku). A estos se le suma el nuevo villano de Marvel, Namor (Tenoch Huerta) y la presentación oficial de Riri Williams/Ironheart (Dominique Thorne) quienes marcan un interesante futuro para la Fase 5 del MCU.
Black Panther: Wakanda Forever inicia con una cautivadora despida al rey T’Challa que se convierte en el principal hilo conductor de la película al marcar a todos los personajes, en especial, a Shuri quien ahora siente la responsabilidad de proteger a su tierra y lidiar con su duelo. La princesa de Wakanda es uno de los mejores personajes de la historia que logra tener un cambio en sus motivaciones y resolver sus conflictos internos que la atormentan a lo largo de la trama. Principalmente, porque le cuesta aceptar que ella debería ocupar el lugar de Black Panther y encontrar su propia voz.
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El origen de un villano
Basada en el mítico paraíso azteca Tlālōcān, la película ha decidido cambiar la tradición del cómic del nuevo personaje, Namor, de ser el Príncipe de la Atlántida al gobernante de Talokan, un poderoso monarca submarino que será no solo una amenaza para Wakanda, sino también para el resto del MCU, ya que sus capacidades y poder de destrucción son muy altos.
La presentación de Namor y todo su reino, que incluye a Namora (Mabel Cadena), es uno de los puntos más poderosos de la película debido a que el personaje impone desde la primera escena y explican su origen de tal manera que el espectador entienda sus razones para querer destruir a los humanos. No es que se justifiquen sus actos, pero es un tema que se explora a profundidad en la cinta.
El contraste entre sentirse héroe o enemigo de la civilización son la base de esta película y la ira que trae el antihéroe detrás de una tragedia que lo ha golpeado de cerca, lo convierte en un destructor; sin embargo, al final, el personaje logra tener un gran cambio y esto probablemente indique que Namor estará muy presente en el futuro del MCU.
Namor y Shuri también se roban gran parte de la película, no solo por sus destacadas actuaciones, sino porque ambos tienen una herida personal que los hacen conectar y ponen en perspectiva la posición de Wakanda y Talokan como territorios asediados por el resto del mundo y la forma para solucionar esos problemas. Aunque podría percibirse que la resolución de su conflicto es algo apresurado, lo cierto es que a lo largo de la película se nos describe el por qué ambos personajes son más compatibles de lo que piensan, de manera que el desenlace se siente lógico y orgánico.
¿Una historia que no defrauda?
La fórmula de Marvel sigue presente en Black Panther: Wakanda Forever, y desde el punto de vista del mero entretenimiento, la película no defrauda y regala momentos de mucha acción, en donde la música y las actuaciones hacen que la cinta sea espectacular. Además, en su mayoría, abandona la comedia característica del estudio y obtiene un tono más dramático, ya que Tenoch Huerta le imprime una solemnidad a su personaje que pocas veces hemos visto en un villano.
Sin embargo, la cinta sí tiene un problema: su duración. Con casi 3 horas de metraje, la historia por momentos se siente lenta y reiterativa y se puede llegar a pensar que sobran escenas, ya que se pudieron haber resuelto de una forma más sencilla o simplemente pudieron recortarse.
No obstante, Black Panther: Wakanda Forever continúa con la brillante construcción del mundo que Ryan Coogler estableció en la primera película. Es visualmente buena, especialmente el mundo de Namor, y con actuaciones sólidas que podrían resonar en la próxima temporada de premios, en especial por Angela Bassett.