21 Grams

Una formidable cinta repleta de esperanza, amor y venganza.

 Indiscutiblemente, 21 Gramos es una cinta asombrosa, en la que se aprecia el dolor y sufrimiento por el que atraviesan cada uno de los personajes.

Notables cintas a lo largo de los años se han vuelto ícono a nivel mundial; no solo por las grandes masas de gente que atrajeron a salas de cine, sino también se debe a la repercusión generada que se propagó entre todos aquellos que las disfrutaron; en gran medida por los temas que dichas cintas tratan. Particularmente, como si fuese una generalidad; los temas que sobresalen son aquellos en los que se involucran los sentimientos más profundos y arraigados que tiene el ser humano. Haciendo a la cinta algo digerible y fácilmente asimilable por parte de casi cualquier espectador; sea éste adiestrado en el séptimo arte, o un simple aficionado. Otorgan una valiosa experiencia que no sólo conmueve momentáneamente; sino que toca fibras sensibles y ocultas que sin duda, causan sentimientos que perduran por mucho, mucho más tiempo.  

Estrenada en el año 2003; 21 Grams o 21 Gramos es escrita por Guillermo Arriaga y es la segunda obra del director Alejandro González Iñárritu. En esta se narra la historia simultánea de tres personas desconocidas entre sí, que se ven involucradas en eventos que los afectan en diferente medida a cada uno; a tal grado que sus vidas cambian por completo. Aquí surgen entre ellos una gran variedad de sentimientos tan propios y característicos del ser humano; en situaciones donde el odio, tristeza, arrepentimiento y amor logran converger en una sola cosa: algo que pareciera ser un ente que interactúa con ellos, generándoles emociones tan complejas que terminan siendo indescriptibles.  

Primeramente habría que comprender la narrativa que tiene esta cinta; puesto que de manera recurrente se utiliza el recurso de flashback para situar al espectador en dos tiempos. Por un lado un presente abrumado; y por otro, un turbulento pasado repleto de inestabilidad emocional.

Sean Penn interpreta a Paul Rivers; un moribundo profesor que está a la espera de un trasplante de corazón que pueda salvarle la vida. Al mismo tiempo, su esposa Mary Rivers (Charlotte Gainsbourg); intenta desesperadamente concebir un hijo con su agonizante marido como último recuerdo de su matrimonio. Por otra parte, Christine Peck (Naomi Watts) es una madre de familia a quien en un infortunado accidente automovilístico, le asesinaron a sus dos pequeñas hijas, y a su esposo Michael (Danny Huston), quedando ella totalmente sola. Y como tercer vértice en esta trama, se encuentra Jack Jordan (Benicio del Toro); un ex convicto y ferviente creyente del cristianismo, quien lastimosamente es el responsable de atropellar a la familia de Christine y huir del accidente.

Una vez muerto Michael, su corazón le es trasplantado de manera inmediata a Paul; logrando con ello salvarlo de una inminente muerte. Ya recuperado de la riesgosa cirugía, el sobreviviente hombre decide investigar a quien perteneció el corazón que lo volvió a la vida. De esta manera, Paul conoce a una destrozada Christine que vive un dolor insoportable al haber perdido a su familia; recayendo poco a poco en su viejo problema de drogadicción. Mientras, Jack lucha consigo mismo poniendo a prueba su inquebrantable fe, frente a un deber moral que lo obliga a entregarse a la policía.

Poco tiempo después de haber recibido una nueva oportunidad de vivir, el corazón Paul comienza a fallar, retornándolo a una agonía que paulatinamente acaban con su vida. Sin embargo, prefiere hacer algo significativo en estos momentos en que se ve físicamente vulnerable; y junto a Christine, se aventura en busca de una venganza que pareciera aliviar el dolor de ambos, en la que el responsable de su sufrimiento no podrá huir de nuevo.

En conclusión…

21 Gramos, indiscutiblemente es una cinta asombrosa, en la que se aprecia el dolor y sufrimiento por el que atraviesan cada uno de los personajes. Ésto se sustenta en la excelsa interpretación que ofrecen Naomi Watts, junto a Benicio del Toro y Sean Penn; siendo esto algo que se destaca gracias a la dirección de actores y un fantástico trabajo de González Iñárritu, quién con esta cinta logra establecer los cimientos de una fructífera carrera en la industria cinematográfica de Hollywood.

No olvidando una fotografía encargada por Rodrigo Prieto; en la que si bien, no recae en lo admirable, si sobresale de lo ordinario. Pues ofrece encuadres llenos de contraste y profundidad; siendo varios los que logran transmitir las emociones y sentimientos por los que atraviesan los personajes.