Robert Kirkman pierde demanda contra AMC por The Walking Dead, y te contamos los detalles.
En 2017, el creador de cómics y productor ejecutivo de The Walking Dead, Robert Kirkman, presentó una demanda contra AMC y otros creativos del programa, como Gale Ann Hurd, David Alpert y el ex showrunner Glen Mazzara, alegando incumplimiento de contrato. De acuerdo a la demanda, la casa productora no cumplió con sus obligaciones contractuales con el equipo creativo, esto al no entregar las ganancias correspondientes según lo generado por el show.
Gran parte de la pelea surgió porque, según Kirkman, los ingresos brutos del programa fueron ajustados para no entregarle lo que habían acordado. Esto porque presentaban un cálculo MAGR menor a lo que valía la serie.
El MAGR es una fórmula que se basa en sumar todos los ingresos de la distribución de un show o una película y restar todos los costos de producción y distribución, que incluyen los honorarios que mantiene el estudio. Algo importante a notar es que los ingresos MAGR pueden variar año con año.
No quedaron contentos
No obstante, Kirkman alega que AMC violó este «pacto implícito de buena fe y trato justo» al tergiversar la rentabilidad de la serie y no decir claramente cuánto ganaba. Sin embargo, el juez del Tribunal Superior de Los Ángeles, Daniel Buckley, dictaminó esta semana que de acuerdo a las pruebas presentadas, la ley no encontró “cuestiones procesables de hechos materiales”, y el tribunal está de acuerdo con la casa productora en que jamás ocultó ninguna de las ganancias:
“Ninguna de estas evidencias son suficientes para plantear una cuestión de hecho procesable, en la que los Demandados privaron a los Demandantes del beneficio de su trato o actuaron de manera arbitraria, irracional o malévola. De tal manera que un jurado razonable no podría determinar que su conducta violó el pacto implícito de buena fe y equidad relación comercial.»
Los abogados Robert Kirkman no quedaron satisfechos con la decisión del juez y explicaron que esto sólo agravia los “errores anteriores cometidos por el juez Buckley al desestimar las reclamaciones anteriores”. Por lo tanto, «los demandantes buscarán justicia en este asunto a nivel de apelación. Como consecuencia, AMC se enfrenta a años de litigios adicionales dada la apelación y la esperada devolución para el juicio”.
Una pelea de largos años
La denuncia original fue presentada en 2017 por Robert Kirkman en donde se alegaba que The Walking Dead era un programa muy rentable para la industria y que la casa productora no le entregaba las ganancias acordadas, pues de acuerdo con un comunicado del propio Kirkman:
«Las Entidades de AMC demandadas explotaron su estructura corporativa para combinar tanto la producción como la exhibición de TWD, lo que permitió a AMC quedarse con la mayor parte de los enormes beneficios de la serie para sí misma y no compartirlos con los Demandantes, tal y como exigen sus contratos.
Los Demandantes y el resto de talentos que están detrás de TWD son los que con su trabajo de creación, desarrollo, escritura y producción de la serie han conseguido su enorme éxito, pero los frutos de ese éxito no se han repartido como es debido.»
En ese momento AMC negó que se les estuviera pagando de manera injusta a los creativos y recalcó que se defendería de ellos a pesar de seguir trabajando como socios en la serie. Incluso recalcó que estos problemas legales eran bastante comunes en la industria del entretenimiento, especialmente cuando un programa se vuelve rentable:
«Este tipo de demandas son bastante comunes en el mundo del entretenimiento y toda comparten algo: siguen al éxito. Prácticamente todos los estudios que han tenido un programa exitoso han sido objeto de litigios como este, y The Walking Dead ha sido el programa número 1 de la televisión durante cinco años consecutivos, así que esto no es una sorpresa.
Tenemos un enorme respeto y aprecio por estos demandantes, y seguiremos trabajando con ellos como socios, incluso mientras nos defendemos enérgicamente contra esta demanda infundada y previsiblemente oportunista.»