Llena de emocionantes y conmovedores momentos, a pesar de sus fallas.
Tras tres años de espera, finalmente llegó Maze Runner: La cura mortal, entrega encargada de dar cierre a la saga.
Dirigida por Wes Ball, y basada en la novela de James Dashner, la cinta nos narra el peligroso viaje de Thomas y los Habitantes, que va desde rescatar a sus amigos cautivos hasta su misión final de introducirse en la Última Ciudad controlada por C.R.U.E.L., la organización que los encerró en el laberinto.
En esta tercera y última parte de la saga, el argumento es sumamente interesante como conclusión de la historia, pero en el desarrollo se vuelve el típico desenlace para una película de este género. Sin embargo, a diferencia de las dos cintas anteriores: Correr o morir y Prueba de fuego, en las cuales las secuencias lentas y rápidas eran intercaladas una tras otra, en Maze runner: La cura mortal desde el principio hay un ritmo acelerado. Y junto a las situaciones presentadas se construye un ambiente de tensión, en el que hay prácticamente nulas oportunidades de relajar esta tensión generada ante la afortunada falta de personajes cómicos.
A pesar de ello, algunas secuencias se alargan demasiado, especialmente acercándose al final. Sin embargo no se vuelven aburridas, pero si inverosímiles. La resolución a los conflictos parece acomodada para que convenientemente haya alguien preparado con una solución rebuscada. Este es el problema en el que mas cae la cinta.
En cuanto a los personajes principales..
Fuera de Teresa y Thomas, quienes llevan un conflicto emocional, no tienen una gran evolución comparándolos con las películas anteriores. Esto no necesariamente es malo, pues poseen personalidad y motivaciones establecidas que además las encarnan perfectamente los actores. Respecto a los personajes secundarios como Aris, Harriet y Sonya, los olvidan completamente y hace pensar que de haber sido utilizados en la trama, habría enriquecido más a la franquicia.
Por otro lado están la doctora Ava Paige y su colega A.D. Janson, los antagonistas de quienes no se podría decir que son villanos. Sus intenciones son buenas, pues buscan una cura para La llamarada, pero sus métodos no son del todo aceptables. Es aquí donde chocan con los protagonistas y en donde se encuentra el conflicto entre los bandos.
Asimismo existe El brazo derecho, una organización opositora que quiere derrocar a C.R.U.E.L. Ambos grupos son extremistas, pues defienden que sus ideales son los correctos. Esto resulta en un conflicto moral para los protagonistas en el que deben decidir a cual de los bandos apoyar. De la misma forma se transmite ese sentir al espectador ¿Son validos sus métodos para llegar a un fin de mayor impacto? ¿De verdad C.R.U.E.L. es bueno?
En definitiva Maze runner: La cura mortal es un buen final para la saga a pesar de las fallas. Se nota una producción y efectos visuales mucho mejores que los de sus predecesoras. Cierra interrogantes planteadas en las demás cintas, pero no aclara del todo algunas circunstancias. Llena de emocionantes y conmovedores momentos, merece formar parte de las mejores en el género de las adaptaciones Young adult.