La región salvaje , una película dirigida por Amat Escalante, es una rareza en la cartelera habitual en México. Se hizo merecedora del León de Plata como Mejor Director en el Festival de Venecia en el 2016. Es una cinta de dramática, con temas sumamente controversiales y lamentablemente cotidianos: el machismo, la homofobia, el homicidio; pero con un toque de cine fantástico o de género, que la hacen única en la cinematografía del director.
La película comienza con un gran meteorito orbitando en el espacio que nos sugiere que se estrellara contra la Tierra. Corte a una escena con una chica, la primeriza y magnífica Simone Bucio. Ella se encuentra desnuda en una cabaña; la cámara se desplaza lentamente hasta ver su entrepierna, que es acariciada por un tentáculo rosa, sí, así como las obras del artista japonés Hokusai. Un extraño ser que nos desenmascara que el verdadero terror, no proviene del espacio exterior; sino que se encuentra en el centro de la psique humana. ¿Tentacle Porn y drama mexicano?
La Región Salvaje es mucho más que eso, porque se trata de los deseos reprimidos. El monstruo del espacio exterior que habita en nuestro interior; la hipocresía en general de una sociedad machista con pensamientos conservadores.
De repente, nos recuerda a su película previa Heli (2013), con otro tipo de violencia; pero Escalante se aventura hasta al final por adentrarse al cine ciencia ficción, junto con una sórdida historia sobre el deseo. El ser que venía en el meteorito se alimenta del interior del ser humano, de sus necesidades, de sus deseos, se satisface de su placer o de su dolor; llevándolos a otro estado de la conciencia, que se vuelve altamente adictiva. Vero (Bucio) es la encargada de llevar más “víctimas” a este monstruo, quienes por diversas situaciones, se ven atraídas a ella por una inusual insinuación.
La dirección de cine de género está repuntando en México, con la otra cinta post-apocalíptica: Las tinieblas (2016), de Daniel Castro Zimbrón. O las películas del insaciable Isaac Ezban: El incidente (2014) y Los parecidos (2015). Después de años de trabajo; la carrera de Guillermo del Toro ha establecido que los monstruos y el cine de género continuarán dando que hablar por estos lares. La Región Salvaje es un pequeño guiño en la cinematografía de Escalante, pero seguramente se convertirá en una película con su propio público y su propia historia.
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