Resistimos: Un Festival para tejer redes en el cine mexicano

Resistimos, festival de documentales en resistencia, llega en su 4ª edición a 6 ciudades. En entrevista con su directora, Gabriela Chávez, platicamos de cómo se ha convertido en un espacio íntimo que permite tejer redes.

Por Edgar Apanco | @elapanco

El documental es uno de los géneros más reconocidos dentro del cine mexicano… pero también enfrenta una enorme cuesta arriba en su exhibición. De acuerdo con el Anuario Estadístico de Cine Mexicano 2024, del IMCINE, el documental representa el 31% de los estrenos nacionales, pero solo el 3% de su taquilla. 

El mismo Anuario indica que, al contabilizar a quienes dirigen una película, las mujeres suman el 38% en ficciones nacionales… pero solo el 22% en cine documental. Esto significa que las historias, las perspectivas y las inquietudes de las mujeres se visibilizan menos en un panorama de exhibición de por sí complicado para el cine documental. 

Como sociedad, ¿qué deberíamos estar haciendo para hablar más del cine documental hecho por mujeres, y de cine con perspectiva de género? Ese fue el punto de partida para nuestra plática con Gabriela Chávez, directora de Resistimos, festival de documentales en resistencia, quien comenta:

“Hace algunos años se volvió viral un vídeo de una persona quejándose de que, en deportes, a las mujeres no se les paga igual que a los hombres. Y alguien más respondía que parte de la responsabilidad recae en las audiencias: a los hombres se les paga más por las audiencias que generan. Al escuchar esto, pensé: “Es cierto. A mí me encanta el futbol, también me quejo de que no hay pagos equitativos… pero no veo futbol de mujeres”.

La directora de Resistimos indica que algo similar pasa con el cine y sus audiencias: “¿Dónde estamos poniendo nuestra mirada? Si como gestores culturales estamos buscando que se exhiba más cine documental, como público nos toca ir a los espacios que gana y verlo”.

Resistimos: Un festival autogestivo

Resistimos tuvo su primera edición en 2022. Su directora nos comenta que el punto de partida fue la dificultad para hallar espacios de exhibición: “Tengo un documental al que no podía encontrárselos. Entonces dije: “Voy a organizar una proyección para presentarlo con compañerxs y colaboradorxs”. Luego invité a otrxs documentalistas a que enseñaran sus trabajos, para hacer una muestra más grande. Ahí nació Resistimos”. 

Chávez reflexiona que este ha sido un viaje de aprendizaje en lo referente al financiamiento de festivales. Ella, al igual que muchxs, se preguntaba por qué la mayoría de los festivales de cine nacionales “se juntan” en la segunda mitad del año. Hoy sabe que esa fecha está en función del momento en que “caen” los fondos. “A todos los festivales nos gustaría tener fechas menos competidas… pero así es, y ha sido un aprendizaje”, precisa.

La realidad es que no siempre existen fondos de gobierno. En ese sentido, Resistimos es un festival autogestivo:

De ‘Deconstruir la Herencia’ a ‘Raíces tercas’

Para este año, el festival recibió 130 materiales y seleccionó 38, latinoamericanos y europeos. Dicha curaduría permitirá a las audiencias observar y contrastar qué historias se están contando en otras partes del mundo y, sobre todo, las conexiones que existen.

“Es fuerte pensar que algunas secciones se mantienen, como Violencia de Estado y Mujeres en Resistencia. Cada año, en Latinoamérica tenemos muchas historias de desapariciones forzadas, de madres buscadoras. Lo triste es que, en estos años, no he visto un cambio importante: los culpables siguen quedando impunes”, apunta la gestora cultural, quien también recuerda que, como territorios colonizados, compartimos historias con India y África: “Nos enfrentamos a las mismas preguntas: ‘¿Qué pasa si no quiero regirme por esos valores impuestos? ¿Qué pasa si prefiero colocar los míos al centro?’” 

Este año en particular recibieron muchos documentales de estilo autorreferencial, donde lxs directorxs más jóvenes se ponen al centro de la narración: “Por ello –acota– hicimos una nueva sección, Deconstruir la Herencia, sobre qué heridas o patrones heredamos en las familias y cómo lo cuestionamos”.

Otra nueva sección, Raíces Tercas, revisa cómo habitamos los territorios. “Este año, el documental Andrómaco revisa la historia de un callejón en el ‘Nuevo Polanco’ [en realidad, la colonia Ampliación Granada] rodeado de megaproyectos inmobiliarios. El documental toca un tema actual, como la gentrificación, y es la historia de personas originarias del barrio y cómo resisten”.

Integrar la mirada de quienes son retratados

Chávez cuenta con orgullo que, por cuarto año, presentan el documental Jaky Palmeros, sobre una madre buscadora. Pero llega fully reloaded, pues su directora Paola García Ruiz impartirá “Intervenir para no olvidar: Taller de esténcil”, sobre cómo esta herramienta es una forma de denuncia y reapropiación del espacio público. 

A la directora del Resistimos le enorgullece pensar que su curaduría integra la mirada de quienes son retratados: “En el documental hay una larga historia de ‘extractivismo’, es decir, una persona, que no conoce lo que retrata, filma desde una mirada externa y a veces de explotación, para llegar a los fines que les interesan. En Resistimos creemos vital integrar a quien es retratado, pues esa es la forma más verídica y digna de contar esa historia”.

¿Por qué acudir a Resistimos?

Gabriela Chávez comenta: “Vivo enamorada del documental por muchas razones, y una clave es porque representa una manera muy bonita de abrir ojos y mentes. El documental te humaniza sobre problemáticas sociales. En Resistimos la gente se ve acompañada y reflejada en la pantalla, y el festival se convierte en un espacio de sanación”.

Chávez, docente universitaria, profundiza: “A veces no tenemos la fuerza de compartir nuestras historias. Por ello, ver que alguien se atreva a contar la suya nos anima a nombrar lo que nos ha sucedido. Eso es algo que puede lograr el documental: nos permite sanar, tejer redes, encontrar soluciones. Resistimos se ha convertido en un espacio sincero e íntimo donde las personas se sienten integradas y seguras”.

¿Dónde y cuándo sucede Resistimos?

Resistimos llega una vez más a CDMX (15 al 24 de agosto) y luego a Monterrey, Mérida, Puebla y Querétaro (septiembre). Para que esto sea posible, la clave ha sido tejer redes. “Llegamos a esas ciudades porque conocimos a personas afines a nosotrxs. A veces piensas que eres la única persona peleando desde tu trinchera, y luego te das cuenta de que hay muchas más haciéndolo”, indica su directora.

La versión online del festival ocurrirá en octubre, en Nuestro Cine MX. Se ideó así para motivar la asistencia a los eventos presenciales, pues además de proyección de cine documental, las actividades incluyen conversatorios, un rally de realización de cine documental con dispositivos móviles y un tour de cine e historia en Tlatelolco.