En este artículo:
- El director Jon M. Chu compartió las intenciones que tiene con la biopic de Britney Spears.
- Asegura que quiere aprovechar el metraje para hacer una crítica social que aborde ideas sobre cómo tratamos a las celebridades, a la juventud y la obsesión de los medios de comunicación.
- La vida de Britney Spears sin duda es un caso de estudio que ayuda a entender los cambios que se dieron en las décadas de los 90 y 2000.
A mediados de este año, Universal anunció que The Woman In Me, el libro de memorias de Britney Spears que relata su vida desde la infancia hasta la desgarradora experiencia de haber pasado más de una década bajo la tutela de su padre, será adaptado al cine.
El proyecto estará en manos de Jon M. Chu, director de películas como In The Heights y, próximamente, Wicked, lo cual refleja su pasión por las historias musicales. Sin embargo, para esta biopic de Britney Spears, Chu busca profundizar en cómo el público tiende a apropiarse de la vida de las estrellas.
¡A continuación, te compartimos lo que el director reveló sobre su enfoque para contar esta historia!
La biopic de Britney Spears será una crítica social
The Woman In Me fue lanzado el año pasado y con él tuvimos la oportunidad de leer por primera vez la historia de vida de Britney Spears contada en su propia voz. A solo una semana de su lanzamiento en Estados Unidos, el libro se convirtió en el best-seller número uno del New York Times, al vender 1.1 millones de copias en todos los formatos y se estima que ahora existen más de tres millones de ejemplares impresos en todo el mundo.
Con ese éxito, era sólo cuestión de tiempo para que algún estudio de cine intentará adquirir los derechos del libro para llevarlo a la gran pantalla, ya que aunque durante mucho tiempo la cantante se resistió a cederlos, finalmente alcanzó un acuerdo con Universal para ver su historia adaptada al cine.
Sin embargo, tomando en cuenta que una biopic ofrece múltiples enfoques creativos, Jon M. Chu, el director a cargo del proyecto, comentó en una entrevista con The Hollywood Reporter que, si bien aún no puede revelar muchos detalles sobre la historia de Britney, adelantó que la película buscará satisfacer completamente a los fans, ya que su intención es mostrar cómo, en los años 2000, el mundo parecía sentir que Britney Spears les pertenecía.
“Aún no hemos escrito el guion, ni hemos contratado a un guionista. Pero en esta concepción inicial, creo que tiene mucho que ver con cómo tratamos a las personas, a las jóvenes, a las estrellas que creemos poseer, a las mujeres, a las madres”.
Jon M. Chu
Chu aceptó que este es uno de los proyectos más importantes de su carrera, puesto que ha sido un gran seguidor de Britney Spears desde que la vio actuar por primera vez. “La vi cuando era una de las 12 actuaciones en el Shrine Auditorium. He asistido a muchos de sus espectáculos y siempre ha sido alguien a quien he admirado”, comentó. “Representa a toda una generación que creció en los años 2000 y finales de los 90, y tiene una historia que merece ser contada adecuadamente. Hay mucho de nosotros en ella.”
¿Por qué la vida de Britney Spears es importante?
La sensación de que Britney Spears «les pertenecía» a las personas en la época del 2000 tiene varias explicaciones que se pueden analizar desde la perspectiva de la cultura popular, los medios de comunicación y las dinámicas sociales de la época, por lo que el hecho de que el director quiera abordar su historia desde este punto de vista es muy interesante.
Para comenzar, Britney Spears se convirtió en un fenómeno global no solo por su éxito musical, sino también por la imagen de “chica perfecta” que construyeron a su alrededor, especialmente al inicio de su carrera. Esta imagen la hacía accesible y fácil de consumir para un público joven y familiar. Sin embargo, cuando su imagen comenzó a evolucionar hacia una identidad más adulta, los medios la atacaron y transformaron en una figura “polémica”.
Esto permitió que el público y los medios de comunicación sintieran una especie de posesión sobre ella y estuvieran presenciando su “caída” y, a la vez, tuvieran el derecho de opinar sobre su vida personal. Por ello, las constantes críticas y rumores alimentaron aún más este fenómeno, creando una especie de «relación» de pertenencia en la mente de los/as seguidores/as.