Contra Todos (Boy Kills World) es una sencilla pero efectiva historia de venganza. Protagonizada por Bill Skarsgård, quien interpreta a un chico de un futuro distópico que jura venganza en contra del sistema injusto que le quitó a su familia.
Boy Kills World se desarrolla en un mundo violento regido por la familia Van Der Coy, quienes tienen un ritual de asesinar a 12 personas en televisión abierta. La historia, llena de sangre y visceras, tiene un tono colorido y estrambótico, que no sólo pretenden innovar los convencionalismos del género, también buscan darle una estructura única a su universo.
En Fuera de Foco, tuvimos la oportunidad de platicar con el director Moritz Mohr sobre su visión de la película y qué le gustaría ver en una secuela.
¿Boy Kills World tiene oportunidad de expandir su universo?
Cuando conocemos a la familia Van Der Coy, se presentan como un grupo implacable que domina la ciudad. Boy, el personaje de Skarsgard, sólo los conoce por su sed de venganza y hace de todo para infiltrarse en su mansión y eliminarlos. Ahí, conocemos que cada uno tiene un estilo y agenda diferente.
Personajes como el de Jessica Rothe, que se presenta como una experta en artes marciales con un increíble casco, dan mucha vitalidad a los personajes. Y como realmente la trama de Boy Kills World nos presenta el mundo visto desde la perspectiva de su protagonista, hay muchos cabos sueltos que ofrecen muchas oportunidades.
Al respecto, el director Moritz Mohr explicó para Fuera de Foco que “el mundo de Boy Kills world fue creciendo poco a poco conforme desarrollaron el guion” y aunque sí pensaron en crear una historia de origen autocontenida, al final decidieron jugar un poco con la ambigüedad y “comprometerse con la creación de personajes”.
“Lo que más me gusta del universo de Boy Kills World, es que realmente no conocemos bien de dónde vienen los Van Der Coy. Yo creo que en un principio tenían buenas intenciones, querían cambiar el mundo, pero se les olvidó.
Es de hecho ya un tropo usado, como en la serie de Fallout: todo el mundo quiere salvar el mundo, pero no se ponen de acuerdo cómo.”.
Moritz Mohr, Fuera de Foco
En Boy Kills World, a pesar de que esa es la razón por la que que perdió a su familia, el asesinato público es presentado como un ritual de celebración, y cada personaje parece que tiene sus propios intereses con respecto a la forma en la que gobierna Hilda (Famke Janssen), por lo que sin duda sería interesante ver cómo se construyó este sistema monárquico en primer lugar.
¿Cómo “deconstruyeron” la figura del anti-héroe?
Con su personaje protagónico, Boy Kills World presenta a un personaje sordomudo que decide que su voz mental será interpretada por Jon Benjamin (quien presta su voz para Bob’s Burger y Archer). Realmente, no podemos confiar en lo que nos está contando, pues los eventos de la cinta los vemos enteramente desde su perspectiva, la cual puede o no estar influenciada por el hecho de que mentalmente tiene 12 años.
“Tuvimos muchas discusiones con productores y en la sala de guion sobre cómo cuidar la tonalidad de la película” nos explicó el director, ya que aseguró que la comedia y la idea de mantener la inocencia de su protagonista fue “crucial” durante todo el proceso para crear Boy Kills World.
Su habilidad para leer los labios fue una herramienta que el director utilizó “para hacer más graciosa la película. Porque en un momento, él simplemente no está de acuerdo con lo que dicen y decide inventar su propia historia, otras veces, genuinamente no saben lo que está pasando, por lo que termina inventado también su propia historia”.
Así, Boy Kills World “logra comprometerse con la comedia y entregar grandes giros divertidos, que era nuestro objetivo principal” mientras construye las bases de una saga que podría profundizar mucho más en el pasado de varios personajes y en la forma en la que funciona su universo.
