- Martin Scorsese señaló que entre los grandes cambios que el cine ha vivido en las últimas décadas, se encuentra la inclinación de los estudios por crear franquicias y no películas autoconclusivas.
- Martin Scorsese explicó que la manufactura de contenido no “representa al cine” y que el medio necesita ser rescatado.
- Martin Scorsese destacó la importancia de que los pequeños y grandes estudios apuesten por guiones y directores con historias profundas, más que en blockbusters que requerirán de decenas de secuelas.
El cine ha cambiado a gran escala en los últimos años. Y si bien, algunas de las nuevas apuestas han abierto la puerta a nuevas voces, actores, directores y creativos de diferentes orígenes, no todo los cambios han sido positivos; así lo indicó el director Martin Scorsese.
Y es que para el icónico cineasta, el hecho de que las grandes apuestas de los estudios apelen a la creación de blockbusters y franquicias, ha dañado profundamente a la estructura creativa de la industria. Pero, ¿exactamente por qué? Te lo contamos.
¿A Martin Scorsese le preocupa el futuro del cine?
Durante una entrevista con GQ, Martin Scorsese señaló que “la industria cinematográfica ya no existe”, explicando que al menos la parte de la industria en la que él se desempeñó ya no posee tanta fuerza como en la década de los 70.
“A lo que me refiero es, la industria de la que formé parte —hablamos de hace 50 años—, ya no existe.
Sería como preguntarle a alguien que hizo películas silentes en los 20 “Oye, ¿qué crees que ha cambiado en los 70?”
Martin Scorsese, GQ.
En específico, Martin Scorsese señaló que las cintas dramáticas autoconclusivas y demás propuestas cinematográficas se han visto grandemente opacadas por los proyectos de Hollywood que apuntan a crear franquicias, a partir de historias que se conducen principalmente por efectos o personajes populares.
En consecuencia, el director señaló que los estudios “ya no tienen interés en apoyar voces individuales que expresen sentimientos o pensamientos personales”, y que al reducir la inversión en cine de dicha categoría, la industria ha “condensado todas esas películas en lo que llaman “indies””.
¿Las franquicias mataron al cine?
Martin Scorsese insistió en que las películas que dependen grandemente de efectos especiales, son parte de un “contenido manufacturado” que no representa los valores del cine.
“Es como si la inteligencia artificial hiciera una película” planteó, asegurando que si bien, son proyectos hechos casi en automático, eso “no quiere decir que no tengan directores increíbles y artistas de efectos especiales talentosos haciendo un trabajo hermoso”.
“Pero, ¿qué quieren decir todas esas películas? ¿Qué te dejarán después? Además de una consumación que luego eliminarás de tu cabeza y tu cuerpo.”
Martin Scorsese, GQ.
Sin embargo, el autor añadió que el fenómeno de las franquicias no es exclusivo del último par de años, sino que se remonta a la década de 1990, cuando comenzó a volverse todo un reto el apostar por películas que no buscaran contribuir a propiedades intelectuales gigantescas.
En sí, el director recordó haber luchado con el productor sentenciado Harvey Weinstein, sobre la duración y presupuesto que se le daría a su cinta de 2002, Gangs of New York.
“No podía trabajar si tenía que luchar así otra vez para hacer películas” destacó Martin Scorsese, añadiendo que “Si esa era la única forma en que podría hacer cine, tendría que parar”.
“Los resultados no eran nada satisfactorios, y a veces era muy complicado, no podría haber sobrevivido de nuevo.” finalizó.
Más adelante, el director se topó con un reto similar para su cinta de 2006, The Departed; en la que Warner Bros. le preguntó si alguno de los dos protagonistas interpretados por Leonardo DiCaprio y Matt Damon podría vivir: “Lo que querían era una franquicia. No se trata ya del conflicto moral de si una persona vive o muere” sentenció.
¿A qué apunta el cine ahora?
Martin Scorsese no es el único director que ha expresado su preocupación por los grandes cambios por los que ha pasado la industria.
Recientemente, los directores Paul Thomas Anderson y Denis Villeneuve celebraron el logro detrás de Oppenheimer, asegurando que los cines y directores tienen que ofrecer experiencias que no se puedan replicar en las casas de los espectadores.
En concreto, Denis Villeneuve señaló que tanto el uso de film como de formatos IMAX, podrían transformar a las películas de nuevo en eventos que deben consumirse exclusivamente dentro de los cines.
Por otro lado, el gremio del cine independiente también señaló que apostar por formatos gigantescos para películas dramáticas es un privilegio que muy pocos directores pueden darse, en especial al ser relativamente mínima la inversión que se da a las voces de directores de diversos orígenes y antecedentes dentro del mismo cine independiente.
Usuarios en redes sociales destacaron que el IMAX no tiene por qué ser el único futuro de la industria, pues proyectos de gran calidad y nivel dramático se han consolidado en estudios mucho más pequeños que, a diferencia de grandes compañías, también han empezado a ver por las necesidades de sus creativos, guionistas y actores.
Tales declaraciones casi empatan con las opiniones de Martin Scorsese, quien también considera que los apoyos de los estudios y producciones deben apuntar a las voces de cineastas y no necesariamente por franquicias que se conducen por números y algoritmos.
No obstante, por ahora la industria sigue en constante movimiento, por lo que quizá aún hay esperanza para los proyectos cinematográficos que se distan de aspirar a convertirse en productos de franquicias.