The Rings Of Power es fácilmente uno de los proyectos más ambiciosos que se han hecho en la historia de la televisión. Con un presupuesto que ronda los 462 millones de dólares, la primera temporada de la historia creada por J.D Payne y Patrick McKay prometía ser el inicio de una saga épica que consistiría en 5 temporadas, donde nos mostrarían adaptaciones de las historias sueltas que dejó JRR Tolkien.
También se reportó que la serie terminaría costando mil millones de dólares, posicionándose en la serie más cara de la historia. La apuesta era construir algo novedoso sobre el amor a la franquicia de El Señor de los Anillos, y que pudiera tener una gran presencia en internet.
Eso ha resultado ser complicado, ya que las libertades creativas que se tomaron con personajes como Sauron y Galadriel, crearon gran controversia entre grupos de fans en internet. Y además, la compra de Middle Earth Enterprises, empresa que protegía los derechos y trabajos de Tolkien, por parte de Embracer Group, complicó la negociación de derechos para poder acercarse más a la trilogía principal del Señor de los Anillos.
Y aunque cuando terminó la temporada Amazon Prime Video aseguró que The Rings of Power “rompió” récords de visualización y audiencia, nuevos reportes indican que la serie está batallando en poder considerarse un éxito.
¿Qué tan exitosa fue en realidad Rings of Power?
De acuerdo con un reporte de Amazon Prime Video, la serie fue vista por más de 100 millones de personas, una cifra récord para la plataforma. Pero hay que tomar en cuenta que uno de los problemas más grandes que enfrenta actualmente el streaming es la forma con la que contabilizan y presentan los datos.
Netflix, por ejemplo, presenta los datos en número de horas vistas, HBO Max contabiliza las “casas”, por lo que precisar un “estándar” para medir el éxito o fracaso económico de un estreno en streaming es más complicado. Por eso, un nuevo reporte de The Hollywood Reporter causó furor en internet al confirmar que solamente 37% de las personas en Estados Unidos vieron toda la serie, mientras que en el resto del mundo 45% de la gente en promedio la terminó.
Según el mismo informe, un resultado favorable se encuentra en el rango del 50% de completitud, pero también citan a que Rings of Power terminó en el lugar 15 de los resultados de Nielsen en 2022 y a que tampoco estuvo presente en ceremonias como El Sindicato de Actores (SAG) en la temporada de premios, como muestra de que la serie tal vez no tiene el rendimiento que Prime Video esperaba.
¿Pero eso significa un fracaso?
Aunque estos números parecen bajos, en el informe de THR, Jennifer Salke, una de las cabezas de Amazon Studios, aseguró que “era un hecho irrefutable que The Rings of Power ha hecho que la gente se suscriba a Prime” y que además, el show ha sido un éxito en países como Sudáfrica y Argentina. “La audiencia global lo es todo, queremos hacer contenido global para una audiencia global” dijo en el mismo reportaje.
Además, aseguró que “la apuesta es a largo y mediano plazo”, puesto que la primera temporada de Rings of Power “involucró establecer muchas cosas”, por lo que apenas están delineando cómo será el resto de la historia. En el pasado, Salke prometió que las siguientes temporadas “aumentarán en tamaño y ambición” y que a partir de la segunda “habría incluso batallas más grandes y momentos icónicos de los apéndices de Tolkien”.
La segunda temporada de Rings of Power se está filmando actualmente en Gran Bretaña, la actual ha resultado bastante problemática. Desafortunadamente, un caballo murió de problemas cardíacos en el set, y recientemente un incendió obligó a pausar la producción de la historia.
No se sabe cómo afectará esto en los costos de la serie, pero además de estos obstáculos tendrá que competir próximamente con la nuevas películas que prepara Warner Bros en el universo de Lord of The Rings, los nuevos videojuegos y NFT’s que se venden de la trilogía original de Peter Jackson, y las producciones de Game of Thrones que enfrentarán directamente en streaming. Por lo que todo indica que Rings of Power tiene una ardua batalla por delante.