Entretenida y emotiva, la mejor definición para Christopher Robin.
Las adaptaciones de los clásicos de Disney son la nueva moda de la compañía del ratón desde unos años. En este 2018 fue turno de uno de los personajes más queridos por toda una generación, Winnie The Pooh. ¿Pero es Christopher Robin una de las mejores películas del verano.
Christopher Robin:
En primer lugar, la historia toma como base al pequeño Christopher Robin compartiendo su día a día con sus amigos en el bosque de los cien acres. Una calca de la serie animada que marcó a millones de personas durante su infancia. Esta da un giro total al llevarnos a la vida adulta del personaje tras dejar a sus queridos amigos en el pasado.
Ahora, Christopher Robin es un adulto con responsabilidades y deberes, que olvidó lo que era ser niño y vivir sin preocupaciones; la película asemeja un poco al libro del Principito, por el mensaje que busca proyectar.
Pero bueno, en esta oportunidad Pooh y sus amigos deberán devolver la alegría a un Christopher Robin que perdió todo aquello que representaba. Con una historia, que no precisamente se enfoca en los niños. Mas bien, es una película para niños que busca marcar a los adultos, con el mensaje: «La familia es primero». Algo muy preciso y directo, que causa empatía con todo aquel que la vea; ya que en los niños, su mercado principal, termina siendo una cinta más de personajes clásicos.
¿La mejor adaptación live action de Disney?
No, no es la mejor película de Disney. Es una cinta con un mensaje muy directo, que en ocasiones pierde el rumbo por el ritmo que lleva; ya que las partes que no tienen a nuestros queridos peluches suelen volverse aburridas. La película sin duda se la llevan Pooh y sus amigos, sin discusión; puesto que ellos suman la parte divertida y de reflexión de todo el largometraje.
Ewan McGregor como Christopher Robin ofrece un gran papel. El actor inglés interpreta de buena manera el rol de un adulto obsesionado con el trabajo que olvida a su familia. En el momento que Robin recupera a Pooh, la cinta toma un ascenso hasta el final de la misma.
Winnie Pooh, es el mejor de todos; su inocencia e ingenuidad proyectan esa dosis de comedia y ternura en el espectador. Cada momento de Pooh en pantalla es cómico y con una dosis de reflexión, dejando una lección muy difícil de olvidar.
Los personajes de apoyo, como la esposa e hija de Christopher Robin; pierden protagonismo, ya que estos no toman fuerza en la mayor parte de la cinta. Es hasta el final que estos toman importancia; ya que la hija del protagonista toma el relevo de su padre al momento de interactuar con Pooh y los demás.
Christopher Robin es una cinta que toda la familia podrá disfrutar. En muchos causará tristeza al tratarse de un personaje querido por millones; pero lo que es un hecho, es que su mensaje no pasará inadvertido en el espectador, ya que es tan simple y directo que es difícil de ignorar.
En conclusión…
Christopher Robin es una cinta que no puedes dejar de ver. Ya que su comedía, simpleza y demás razgos la hacen una película entretenida que cualquiera puede disfrutar. Simple y sin tramas complicadas, que va al grano desde el principio. Un acierto más de Disney para este verano.
